capítulo EXTRA largo
_________________________________
Robert miró a mi madre y pestaño un par de veces.
— ¿ustedes? — levantó sus cejas — ¿vivir juntos?
Era como si su mente estuviese analizando lo que le había dicho. Iba a responder, pero Tom se adelantó.
— si, en mi departamento — respondió nervioso, pero su voz era totalmente segura y madura.
— ¿no creen que es algo apresurado? — preguntó mi madre con total seriedad.
— puede ser, pero queremos hacerlo — contestó Tom.
Esto se había convertido en una conversación entre Tom y mi madre, Robert y yo los mirabamos como en un partido de tenis.
— ¿tomaron esta decision juntos?
— si, osea yo se lo pedí a ______, pero ella aceptó. No voy a obligarla a vivir conmigo, se lo aseguro
— ¿______? — mi madre me miró — ¿estas completamente segura? aún te quedan cuatro meses en el liceo este año, debes terminar el liceo el otro
— estoy segura mamá, Tom termina este año el liceo y si voy a terminar mis estudios mamá, de eso no debes preocuparte
— ¿y que harás después del liceo Tom?
— compraron al equipo de F.A en el que estoy y el próximo año desde enero comenzarán a pagarnos bien, entraremos a las mejores ligas — contó Tom sonriente.
Abrí mis ojos como plato, eso no lo sabía. Lo miré por unos segundos y luego observé a mi mamá.
— genial mocoso, te felicito — se adelantó Robert muy sonriente.
— si, yo también Tom — dijo mi madre.
No dije nada, se suponía que yo ya sabía...se supone.
— gracias — respondió él sonriente.
Nos quedamos en silencio unos segundos, mi madre suspiró y nos miró intercaladamente.
— esta bien — suspiró — pero, Tom...debes cuidar a mi hija, cuando se comienza a convivir con alguien es mucho más difícil, pero les tengo fé
Sonreí feliz mirandola y luego ví los ojos ilusionados de Tom.
— no se preocupe de nada, la cuidaré como si fuese mia — sonrió divertido.
Enarqué una ceja mirandolo.
Luego de conseguir el permiso, nos quedamos conversando sobre nuestras espectativas y sueños, lo que queríamos o no...
(...)
— ¿como si fuera tuya? — enarqué una ceja mirandolo.
Estabamos en mi cama. Él acostado y yo aplicandole gel protector en su rodilla. Siempre debía hacerlo desde que tuvo el accidente.
— no eres mia — contestó despreocupado cerrando sus ojos.
— ¿puedo hacer lo que yo quiera?
— claro que si, con tus límites ya que estas conmigo
— ¿estas hablando enserio? — mi voz sonó desafiante.
— yo tampoco soy tuyo — abrió sus ojos mirandome.
— ¿no?
— claro que no — rió divertido.
— ¡eres mio! — subí mi tono de voz y golpeé su abdomen con mi puño despacio.
Él rió de mi y se puso en forma fetal.
— mirame — me senté a su lado.
Abrió sus ojos y se sentó mirandome
— ¿de quién soy? — enarcó una ceja.
— mio — baje mi voz.
— ¡¿de quién?! — se burló subiendo la voz.
— mio
— a ver mas fuerte — se acercó a mi rostro.
— ya basta — fruncí el ceño.
— solo quiero oírlo — rió bajito.
— eres mio, imbécil — dije ya sacada de quisio.
Él soltó una carcajada y me abrazó de la cintura lanzandome a la cama.
— si, soy tuyo, todo todo — decía depositando besos en todo mi rostro.
Reí cerrando mis ojos ya que estaba besando mis ojos.
— y tu eres mia, si, mia mia — seguía besando mis ojos, mi frente, mi menton, mis mejillas hasta que se quedó en mi boca.
Después de jugar un rato, apagamos la luz y nos quedamos conversando.
— ¿por qué no me dijiste sobre lo del equipo?
— te iba a decir cuando estuviesemos viviendo juntos así como una sorpresa, pero tuve que decirle a tu madre para que sepa que tendrás estabilidad conmigo
Sonreí abrazandolo.
— también te felicito mi amor — besé sus labios, él sonrió entre el beso y luego me abrazó fuerte.
Tom y yo estuvimos conversando la mayoría de la noche. Decidimos terminar nuestros estudios este año y el próximo en enero irnos a vivir juntos, sólo quedan cuatro meses.
__
Él me ayudaba a estudiar cuando tenía examenes y yo lo iba a ver cuando tenía partidos de F.A.
Enero se acercaba muy rápido. Mi promedio subió y se acercaba la graduación y fiesta de gala de Tom.
Sam me ayudó a elegir un regalo para él aunque tampoco fue de mucha ayuda...hombres ¿no?. Y mis amigas un vestido. La graduación era un día viernes y la gala un sábado.
— pero amor, necesito saber el color de tu vestido para que mi corbata sea del mismo color — dijo Tom al telefono.
— ¿dónde estas? — pregunté.
— en el centro comercial con Harrison
— es beige
— ¿beige?
— es casi como un color piel Tom
— ¿piel?
— ¿recuerdas cuando eras pequeño y usabas el lapiz naranjo para pintar el rostro de alguien?
— si... — respondió confundido.
— ¿cuando lo usabas despacio? ¿sin remarcarlo?
— si — rió.
— ese color es — suspiré.
— ah, beige...
— ¿estas bromeando?
— si — rió- ya, besitos. Nos vemos mañana
— adiós... — colgué.
— TOM'S POV
¿quién usa color "beige" para un vestido? jamás entenderé a las mujeres. Amo ser hombre, jamás me compraría un traje color beige, negro y ya esta.
— ¿y de qué color es? — preguntó Harrison entrando a una tienda que vendían corbatas, camisas, etc.
— beige — respondí demostrando que sabía de lo que hablaba.
— no tienes idea de que color es ¿cierto?
— no lo sabía hasta que ______ me dijo color piel — reí.
Él rió a carcajadas y la señora que estaba atendiendo nos miró sonriente.
— hola, ¿los puedo ayudar en algo? — preguntó amable.
— si, andamos en busca de una corbata color beige, mi gala es el Sabado.
— todo a última hora ¿eh? — rió.
— claro que no — sonreí — es jueves
Ella nos observó sonriente y negó con su cabeza buscando entre todas las corbatas. Puso sobre la mesa cinco corbatas color beige con diseños diferentes.
— esta me gusta — tomé una relativamente de mi gusto.
— mm si, esta bien — opinó Harrison.
— ¿y si el vestido de ella no es igual?
— cállate, todos los colores beige son iguales
— no, no todos — dijo la señora haciendo que ambos nos miraramos.
Decidimos enviarle una foto a Cheryl y ella nos respondió que la corbata estaba "bonita" y que la compraramos ya que era muy parecida al color del vestido de _______.
La señora me recomendó que usara una camisa negra y así fue. Compré la corbata "beige" y la camisa negra al igual que mi traje.
Al llegar a mi departamento nos encontramos con Cole y Milo que me habían ido a ver y estaban esperandome en una cafetería del lugar.
— ¿como me veo?
Me puse el traje completo y todos comenzaron a silvarme y tirar besos.
— guapo — bromeó Cole.
— idiotas — dije dirigiendome a mi habitación. Me quite el traje y luego opté por un buso y una sudadera más mis pantuflas.
Estabamos comiendo pizza y jugando xbox hasta que Milo tosió mirando a Harrison.
— deberías hablar ya — le dijo Milo a Harrison, quien abrió sus ojos considerablemente.
— ¿qué es lo que no sé? — preguntó Cole.
— somos dos, yo tampoco sé — me uní.
— lo iba a decir mañana — gruño Harrison.
— ¿en mi graduación?
Él asintió con su ceño fruncido.
— lástima que a Milo se le salió, vamos, cuentanos — insistió Cole.
— estoy saliendo con Michelle — respondió rápido.
Cole rápido pausó el juego, yo me atraganté con un pedazo de pizza y Milo soltó una carcajada.
— ¿con Michelle? — la voz de Cole pausó mi tos y la carcajada de Milo.
— si ¿qué hay de malo?
— nada, sólo que es raro — respondí para luego tomar un sorbo de bebida.
— ¿raro? ¿por qué?
— ya te lo dije — comentó Milo — es que en el campamento parecían hermanos
— parece que las cadenas nos unieron — opiné.
— hablen por ustedes, jamás me gustaría Liz — rió Cole.
— genial hermano, esta bien. Hacen una linda pareja si lo miras bien — opiné.
— asi es — opinamos todos juntos.
Después de burlarnos lo suficiente y de reír en exceso, los chicos se tuvieron que ir. Mañana sería un gran día en mi graduación y agradecía que Harrison, Cole y Milo se graduaran en días diferentes a los mios ya que así podían estar presentes en el día más importante de todos mis años en el liceo.
Desperté con el sonido del timbre que en realidad no dejaba de sonar, quizás estén esperando desde hace mucho tiempo ahí afuera.
Me puse de pie sólo en boxer, me cepille los dientes y me dirigí a abrir.
— ¡Tom ya es tarde! tienes mucho que hacer hoy — la voz de mi hermano me despertó por completo. Él traía mi traje para hoy, el traje de mi gala lo tenía yo.
— "hola hermanito ¿cómo estás?" "muy bien ¿y tu?" "bien también gracias" — simulé una conversación imitando su chillona voz. Él sólo rió dejando las cosas encima del sofá.
— ¿y _______?
— nos juntaremos en el liceo, llegará junto a Cheryl y Michelle — dije bostezando.
— son las dos de la tarde y debes estar a las cinco en el liceo ¿qué estas esperando?
— esta bien — gruní mirandolo — voy a ducharme
Me di una ducha lenta y relajante, asimilando todo lo que tendría que hacer en mi graduación. Tantas semanas ensayando para este día.
Después de un almuerzo rápido que preparó mi hermano, arroz con salchichas para ser exactos. Me cepillé los dientes y comencé a vestirme. Mi camisa azul marino abotonada ajustada a mi torso, pantalon de vestir negro relativamente ajustado y zapatos negros muy brillantes. Salí a la sala abrochando mi cinturon y Sam rió.
— ¿qué te parece gracioso? — enarqué una ceja — tu elegiste esto
— lo sé, te ves bien — dijo sonriente.
— lo sé — levanté mis cejas de arriba a bajo haciendolo reír.
Me perfumé bastante, arreglé mi cabello naturalmente con agua y volví a retocar el perfume hasta que Sam me gritó desde abajo que dejara de perfumarme.
(...)
La graduación ya había comenzado. Estabamos en el patio central enorme y techado. Mis compañeros y yo estabamos sentados en filas ordenados por estatura así que estaba en la última junto a mis amigos de siempre. Había visto a Harrison, Milo y Cole, pero a las chicas no.
Comenzaron a llamar por lista para entregarnos un diploma. Todos pasaban con sus padres y al no querer sentirme mal, decidí decirle a Sam y a Harry que salieran junto a mi.
— Tom Holland — me nombraron.
Me puse de pie y escuché miles de aplausos, sonreí en silencio y caminé hacia la directora quien me entregó un gran diploma, mis hermanos caminaron junto a mi abrazandome, tome a Harry en mis brazos quien tomó mi diploma y Sam me abrazó de los hombros, nos sacaron la foto y luego abracé a Harry quien recibió miles de "aww". Sam besó mi cabeza y luego volvimos a nuestros asientos.
Luego de nombrar a todos mis compañeros, nos llevaron a una sala llena de comida. Busqué con la mirada a _______ entre la gente y unos delgados brazos me rodearon por la cintura, volteé a mirar y era mi pequeña.
— al fin te encuentro — sonreí abrazandola.
Ella rió y luego apegó su boca junto a la mia. Se separo un poco de mi y me miró directo a los ojos.
— felicitaciones amor, terminaste invicto — dijo sonriente.
— gracias — besé su frente.
Después de compartir con mis hermanos, mis compañeros, amigos y mi chica, la noche terminó.
— ________'S POV
Me gusta ver a Tom feliz. Su graduación fue muy emotiva ya que la mitad de sus compañeros estaban llorando, él no. Para que decir que jamás he visto a Tom llorar, él lo dijo una vez "si me ves llorar es porque estoy a punto de suicidarme".
Hoy es su gala y pretendo que esté feliz y verme bien. Estuve alrededor de dos horas arreglandome con la ayuda de Cheryl y Michelle que se ofrecieron.
Cuando estuve lista, no pasaron más de diez minutos y ya estaba viajando en el auto de mi madre a casa de Tom.
Mi madre me dejó afuera y luego se marchó. Toqué el timbre y luego la puerta se abrió dejandome ver a mi chico, con su traje impecable, muy perfumado y con sus ojos abiertos como plato.
— amor... — dijo mirandome de pies a cabeza — te ves hermosa
Sonreí algo ruborizada y me adentré a su departamento.
— tu también — él me abrazó y luego beso mis labios.
La noche en su fiesta de gala fue muy divertida, compartí con varios amigos de él y sus invitadas. Me contó como fue la compra de su corbata y me burlé de él bastante rato.
Todo terminó a eso de las dos de la mañana. Nos fuímos a su departamento y decidí darle su regalo.
— tengo un regalo para ti — dije mientras me ponía una de sus poleras para dormir.
— ¿si? — levantó sus cejas.
— si — sonreí
Tomé mi mochila y de ella saque una caja azul pequeña. Regalo elegido como una aguja en un pajar. Me senté en su cama frente a él mientras sonreía nerviosa.
— ¿por qué un regalo? — preguntó tomando la cajita azul.
— porque esto es un gran paso y quiero que esto lo tengas toda tu vida
— ¿son viagras? — analizó la caja por fuera.
— no, idiota — reí y el rió junto a mi — ya, abrelo
Tom analizó la caja nuevamente y la abrió. Sus ojos se iluminaron al ver el anillo grueso grabado con el diseño de un balon de futbol americano y adentro un "por siempre"
— amor, me encanta — sonrió mirandome y luego al anillo — ¿es en serio? yo debería estar regalandote un anillo
— olvídalo, tu eres la mujer de la relación — bromeé.
— puede ser — rió — vamos, ponme el anillo
Tomé el anillo y lo puse en su dedo anular izquierdo.
— ¿por qué un anillo y no un collar o pulsera?
— porque juegas F.A, un collar y una pulsera se pueden cortar fácilmente
— buena elección, esa es mi chica — me besó — gracias, gracias
Definitivamente el anillo significaba mucho para mi. Sé que Tom jamás usa anillos, pulseras o collares y que lo use definitivamente es muy importante para mi que el le de importancia a esto.
— eres la mejor ¿lo sabías?
Sonreí en silencio mirando sus ojos cafés, profundos y brillantes. Su sonrisa estaba intacta mostrando sus perfectos y blancos dientes, junto a sus perfectos hoyuelos en ambas megillas.
— siempre estaré contigo, siempre — su voz sonó segura, sus manos viajaron a mi cintura y me abrazó lanzandome a su lado en la cama. Yo permanecía en silencio abrazandolo y acurrucandome en su torso descubierto.
— ya falta poco, sólo semanas para tenerte aquí conmigo ______, por siempre