↬ᴅʀᴀɢÓɴ ʙʟᴀɴᴄᴏ-ᴅʀᴀɢÓɴ ɴᴇɢʀᴏ🐲❤ [ᴋᴏᴏᴋᴊɪɴ]

Especial Navideño.

1 año después...

Los primos Kim estaban como locos adornando la casa que sus padres les habían prestado para celebrar la navidad con sus cuatro amigos, era una casa de playa enorme, y ellos ponían entusiasmados los adornos navideños ya que eran fans de esas tradiciones.

Al término de unas 3 horas, los Kim yacían descansando sobre el piso de la sala, aún les faltaba arreglar los cuartos para sus invitados, terminar de adornar la casa, hornear las galletas, preparar el pavo, en fin, aún tenían mucho por hacer, lo bueno era, que sus amigos llegarían dentro de 3 días así que aún tenían tiempo.

—Jinnie. -Llamó TaeHyung a su hermano.

—Mhm. -Fue la simple respuesta del menor.

— ¿Te gusta JungKook? -Preguntó casual provocando que el otro se incorporara a la velocidad de la luz, haciéndole sonreír por su acto arrebatado.

— ¿D-de dónde sacas eso? -Sus mejillas y orejas se habían puesto rojas, señal de que estaba nervioso.

—Desde que lo conociste, no te despegas de él, parecen sanguijuelas –Rió divertido. —Además, a él no le incomoda para nada, así que, supongo que el sentimiento es mutuo. -Respondió NamJoon.

—Ay por favor, sólo somos buenos amigos. -Contestó jugando con sus dedos.

—Sí claro, amigos. -Dijeron los mayores al unísono para después carcajearse del rostro colorado del más pequeño.

Jin se levantó avergonzado, fue a una de las habitaciones y comenzó a limpiar. Ciertamente los mayores tenían razón, desde que conoció al pelirrojo, se sentía tan feliz, como si una pieza faltante por fin había encajado en su mundo, se mensajeaban casi todos los días pues Kook trabajaba en una cafetería a medio tiempo, y él ayudaba a su madre con la pastelería de la familia, cada vez que salían en grupo, inconscientemente buscaba estar cerca de él y por supuesto, el oji-azabache no se hacía del rogar por lo que se la pasaban todo el tiempo juntos, a los demás chicos les había parecido sorprendente como aquellos dos habían encajado tan bien desde que se vieron, pensaban que quizás era su destino el conocerse.

❤❤❤

JungKook estaba emocionado, caminaba por el centro comercial buscando el regalo perfecto para su oji-azul, sí, "SU", porque él desde que lo vio, lo declaró como suyo, sólo faltaba que el rubio lo supiera, y aprovecharía esta ocasión, ya que esta navidad sería la primera que ambos pasarían juntos.

Él amaba realmente pasar su tiempo libre con el chico, sólo se llevaban dos años de diferencia y eso era muy bueno ya que tenían gustos similares, en cuanto a música, películas, video juegos, etc., HoSeok lo molestaba diciéndole que se había enamorado a primera vista y no es para menos, los Kim realmente son chicos hermosos, pero el que cautivó su corazón con sólo una mirada sin duda fue el menor de ellos, ese rostro de ángel, esos labios abultados de color rosa, sus preciosos ojos azules que lo veían con adoración, sí, él se declaraba enamorado, aunque habían ocasiones en las que soñaba con el rubio, pero la diferencia radicaba en que el muchacho tenía cabello blanco y vestía ropa antigua, era algo un poco desconcertante, ya que sentía con esos sueños que llevaba conociendo al rubio desde hacía mucho tiempo, pero él justificaba aquello como un juego de su mente, pues nunca había visto al oji-azul antes de ese año en que se conocieron.