"Fragmento de mi corazón"

964 84 16
                                    


Hay leyendas e incluso algunos estudios que dicen que nuestras marcas de nacimiento son indicios o señales de la manera en que morimos en nuestra vida pasada, también que, dependiendo de la visibilidad de estas, es el grado de impacto que tuvo en ese momento.

Shinichi Kudou desde pequeño siempre se preguntó el porqué de aquella cicatriz a la altura de su corazón, era similar a la de una puñalada, quizás tan ancha como la hoja de una espada. A temprana edad, cuestionaba a su mamá sobre si había sufrido algún tipo de operación o si estaba enfermo del corazón, su madre simplemente sonreía y negaba aquello, le había dicho que era su marca de nacimiento y le había contado aquella leyenda, Shinichi, emocionado estaba seguro que había tenido una muerte honorable, puesto que algunas veces se había soñado como un caballero al servicio de su rey. Otras ocasiones soñaba con un par de ojos violáceos y una preciosa sonrisa, acompañados de una capa blanca y el resplandor de la luna.

Pero conforme el pequeño de ojos azules fue creciendo se volvió cada vez más escéptico, además, con cada día que pasaba, un vacío en su pecho iba creciendo, haciéndolo sentir agobiado, los sueños fueron cada vez más agresivos e incluso se habían transformado en pesadillas, en las cuales siempre veía una capa manchada de sangre y una espada siendo enterrada en su pecho, a veces despertaba con la respiración acelerada y un punzante dolor en su marca de nacimiento, con ayuda de psicólogos consiguió disminuir ese tipo de sueños hasta ser realmente raras las ocasiones en que los tenía, al punto en que olvidó por completo aquella historia, ignorando por completo que estaba por encarar al destino.

.

.

.

.

.

.

.

.

Contando con ahora 18 años de edad, se encontraba siendo arrastrado por su mejor amiga e interés romántico actual, Mouri Ran, una chica de cabellos castaños y mirada azulina, experta en artes marciales y de carácter fuerte, había escuchado de Sonoko que su tío, Suzuki Jirokichi realizaría una exposición sobre la era medieval ya que recientemente habían encontrado un ataúd que contenía interesantes objetos como lo eran: una espada y una pistola. Además de que Kaito Kid había enviado un aviso por adelantado, diciendo que volaría a través del tiempo y tomaría de vuelta lo que le pertenecía. Shinichi estaba curioso sobre aquello, ¿A qué se refería con "tomar aquello que le pertenecía"? Pocas eran las veces que se había topado con aquel enigmático mago, estar cerca de él le provocaba una terrible nostalgia, pero extrañamente siempre sentía que aquel vacío que lo agobiaba era llenado. Sintió un ligero pellizco, haciendo que centrara su atención en la explicación de aquel guía de museo.

Al llegar, Shinichi no paraba de preguntarse por qué había accedido, tenía una carpeta de casos sin resolver esperándolo en casa, suspiró aburrido por milésima vez y Ran, fastidiada, le dio un golpe en el vientre con su codo, haciendo que Shinichi la mirara molesto.

"Aquella espada, perteneció hace siglos a un reconocido y famoso caballero, nombrado en aquel entonces como "Caballero negro", leal a su reino y a su rey, poseedor de una astucia e ingenio temerarios, fue incluso capaz de atrapar al escurridizo dueño de aquella pistola plateada, "ladrón blanco", aunque su muerte fue trágica, se dice que su amante lo traicionó y lo envió a la horca a través del Caballero negro, lo extraño del asunto es que tras desaparecer el Ladrón blanco tampoco se supo nada más del caballero. Es realmente increíble que lográramos encontrar esta espada junto a la pistola, ambos trajes que pudimos replicar fue gracias a un viejo diario que encontramos junto a los dos anteriores objetos, lamentablemente no hemos podido descifrar el contenido, puesto que parece estar todo decodificado"

"Fragmentos"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora