"Fragmentos"

"Cumpleaños Azul"

Shinichi Kudo está molesto y decepcionado ¿La razón? Hoy era su cumpleaños y había planeado pasar todo el día al lado de su amado mago, pero este no se había tomado la molestia siquiera de mandarle un mensaje de felicitaciones. No había recibido señal alguna De él desde el día anterior. Y, por si fuera poco, el muy insensible había mandado un anuncio ese mismo día para robar una famosa joya de la nueva exposición organizada por el grupo Suzuki. Que tonto había sido al creer que el mago pasaría por alto el desafío y preferiría pasar el día con él. 

Ya había recibido las felicitaciones correspondientes por parte de sus padres y amigos en el transcurso del día, pero seguía sin noticias del mago. Sacó por milésima vez el celular de su bolsillo y miró en las notificaciones, pero no había señal alguna del mensaje que esperaba. Suspiró decepcionado, tomando rumbo a la cocina de su mansión decidió ir a calentar su cena cuando el celular en su bolsillo vibró, con un poco de ilusión lo sacó y emocionado miró el "Nuevo mensaje de Kaito recibido" pero al abrir el mensaje su ceño se frunció al ver el contenido del mensaje.

" Mi querido detective, ¿Me honrarías con tu presencia esta noche de luna llena, donde realizare la hazaña de robar dos joyas?"

Bastante molesto, cerró su celular y lo arrojo sobre el sofá con rabia. Al parecer prefería su

ego como mago antes que al él.

—Estúpido mago de cuarta. —Murmuró molesto. Aunque con cierta curiosidad de saber a qué par de joyas se refería, si el señor Suzuki solo exhibiría una joya. — Otra estúpida metáfora debe de ser. —Se dispuso a comer un poco de fideos y un poco de curry, alimentos que había preparado el mago el día anterior que lo visitó. Justo cuando estaba por terminar el timbre sonó, extrañado porque no esperaba a nadie, se dirigió hacia la entrada, al abrir se topó con un repartidor.

—Buenas noches, ¿El señor Kudo Shinichi? —Preguntó con tono amable.

—Soy yo.

—Tiene un paquete, ¿Puede firmar de recibido?

—Claro — Firmó y recibió un par de cajas una pequeña y una grande y alargada.

—Que tenga una excelente noche. —Dicho esto, se retiró.

—¿Que será esto? —Primero abrió la caja más grande y encontró una docena de rosas

rojas atadas con un hermoso moño azul, sorprendido buscó alguna nota de quien las

enviaba, pero no había tal cosa. Procedió a abrir la más pequeña y dentro había un fino

collar de plata con una piedra con forma de media luna de color violeta. Sorprendido la tomó entre sus manos, y sin poderlo evitar una enorme sonrisa acompañada de un sonrojo se hicieron presentes.

—Eres un idiota Kaito —Miró el reloj de pared, notando que faltaban 30 minutos para la aparición de Kid, si se daba prisa al menos llegaría a tiempo para la persecución, por lo que se apresuró a poner las flores en un jarrón con agua, tomó su sacó azul y sus llaves. Un poco emocionado se dirigió al museo, no sería gran problema para él moverse con libertad por las instalaciones, el anciano estará más que feliz por tenerlo como parte del operativo, después de todo él es el "Kid killer", aunque esta vez solo quería ir como un simple expectador.

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