Destino

441 40 15
                                    

Apple sonreía expectante ante el espejo, este la reflejaba tan maravillosamente que no podía más que fascinarse ante su reflejo, le encantaba, pues ya no veía la humillación que Raven Queen le había provocado y mucho menos veía en sí misma la decepción con la que su madre la miro esa última vez. No, esta vez ella sería una mejor reina que su madre, nadie en el mundo de los cuentos se atrevería a cuestionar el destino de Apple White.

Pero necesitaba algo más, algo que le diera el poder de cambiarlo todo.

- Espejito, espejito, di el nombre de quien gobernara el mundo de los cuentos. – Sus manos acariciaron su cabello, tomándolo entre sus dedos comenzó a cepillarlo despacio. Al terminar, tomo su bolso y salió de su habitación rumbo a su destino.

>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>

- ¿Cuánto tiempo tarda en reponerse un corazón roto? – Pregunto Dexter, quien miraba entristecido el cielo azul que se le presentaba frente a él. Las nubes corrían tranquilas una frente a la otra, sin embargo, estas no eran suficiente para cubrir los arrasadores rayos del sol que se coronaban un poco más encima de ellas.

A su lado, Hopper se encontraba recostado en la misma posición, con sus manos encima de su estómago y los ojos cerrados, el príncipe intentaba ignorar vehemente las preguntas deprimentes de su mejor amigo, pero le era imposible, pues él mismo no paraba de preguntarse aquello.

Y un poco más lejos, pero no lo suficiente, se encontraba Sparrow Hood, quien recargado en las mochilas de los chicos tocaba tranquilamente su guitarra y escuchaba los desaires de sus amigos con corazón roto.

- ¿Quién sabe? Tal vez un día, una semana, un mes o un año o incluso tal vez nunca pueda curarse. – respondió Hopper finalmente a la pregunta que el Charming no paraba de hacerse últimamente.

- Al paso que van, es seguro que tardarán mucho más. – dijo Sparrow sonriendo burlón – Cómo esperan seguir adelante si ustedes mismos se tiran abajo.

- ¡No es tan fácil Sparrow! Yo realmente fui feliz con Raven y pensé que tendríamos nuestro...

- ¿Qué? ¿Final de cuentos? Vamos, Charming, puede que seamos parte de un cuento de hadas, pero definitivamente nuestra vida no lo es. Acostúmbrate a la realidad.

Dexter a pesar de escuchar de su amigo esas crudas palabras le era imposible aceptar que tenía razón, al parecer había estado soñando demasiado y eso le hizo sentir total y completamente un estúpido.

- Además, yo no entiendo por qué estás deprimido Hopper, por lo que sé, tú y Briar nunca tuvieron una relación – remato irónico, apuñalando al joven peli castaño en su destrozado corazón.

- No lloro por lo que fue, sino por lo que pudo haber sido y aún más por lo que pudo suceder después de Nunca Jamás, - chillo Hopper ante los recuerdos de los besos que alguna vez le dio Briar.

- Pensé que solo el sapo era poeta, ahora resulta que el príncipe también lo es. Ambos, empiezan a repugnarme – Dijo Sparrow, quien refunfuñando comenzó a tocar aún más fuerte su guitarra, cabeceo al ritmo de la melodía que salía de ella. Los dos muchachos prefirieron ignorarlo, ambos sabían que Sparrow no lo hacía con mala intención y con el tiempo ese joven bandolero se había convertido en un gran amigo.

No tardó mucho tiempo para que ambos chicos que tenían el corazón roto empezaran a suspirar tristemente, y ya no se sabía si era para llamar la atención de su tercer amigo o porque realmente no podían hacer más que eso para descargar la tristeza que los acompañaba. Finalmente, Sparrow hastiado de aquella acción paró de tocar y se recostó junto a sus amigos, dispuesto a deprimirse con ellos.

Érase una vez... NosotrosWhere stories live. Discover now