Quedarse Quieta [Tales of Arcadia]

13

 Con la poca energía que le quedaba, Merlín impidió que la bruja se hiciera añicos contra el suelo. Observo todo desde abajo, como esta lanzaba una gran flecha mágica que atravesó el corazón de Morgana haciendo que esta se debilitara, dando una ventaja a los cazatrolles. 

Merlín subestimaba a la bruja de vasija. Solo podía ver en ella, una persona que buscaba beneficiarse todo el tiempo. Sin embargo, aquella tarde Arabella le demostró que era más que esa cara bonita, y una princesa caprichosa.

—Lady Pericles, lo ha hecho bien.— sonrió.

 Luego que la batalla finalizara, el viejo hechicero alzo el cuerpo de la bruja y lo llevo al puente. Noto como estaba cubierta de grietas luminosas de color rosa en su piel, que poco a poco se iban apagando.

—Es hora de tu descanso.— murmuró.

Los festejos se silenciaron al ver a Arabella completamente inmóvil.

—Ella se sacrifico.— dijo Clara mientras le acariciaba el rostro con leves manchas rosas.—Ella... ¿Esta dormida?

Arabella lazo un ronquido que les devolvió el alma al cuerpo a todos los presentes. Y no hicieron más que reír un poco más relajados ante eso.

—Si se sacrifico, de alguna manera. Uso una gran cantidad de magia para desestabilizar a Morgana.— explico Merlín.—Que también la debilitó a ella.

—¿Ahora que va a sucederle?—pregunto Jim.

—Es una bruja de vasija, lo mas probable es que la grietas que se originaron por la cantidad de magia que absorbió tarden en sanar.— dijo Merlín.—Asi como yo, dormirá por un tiempo.

—¿Nueve siglos? No es excesivo.— dijo el cazatroll.

—Es lo ideal, pero dudo que alguien como ella logré algo así.— respondió Merlín.

•

Hisirdoux empezó a correr junto con White cuando gran parte de su energía volvió a su cuerpo, temiendo que Arabella no haya sobrevivido a la locura que había planificado.

—Vamos muchacho.— dijo la gata.

Al llegar y ver a todo al rededor del cuerpo de la bruja, temieron lo peor.

—¿Qué pasó?— pregunto Hisirdoux.—Ella ...

Nadie decía algo, sin embargo no se veían preocupados o tristes.

Lento se acercaron. White se alegro al escuchar un poco sutil ronquido de su ama, e Hisirdoux derramo lágrimas de alegría cuando pudo sentir algo de su presencia mágica.   

Sintió como su corazón palpitaba con calma otra vez.

—Ella está bien.— suspiro.

—Solo está dormida.— dijo Clara.—Estara bien.

—Al final su plan si resultó.— dijo tomando aire.—La llevaré a casa, a que descanse cómoda lo que deba descansar. 

 Se despidió de todo, se fue con la chica en sus brazos, y con White y Archie caminando a un lado

 White la veía con preocupación, después de todo ella fue quien eligió a la bruja para acompañarla para el resto de su vida. 

—Hisirdoux, tu conoces por todo lo que paso esta loca ¿No? A pesar de todo lo malo e inmoral que hizo en los últimos novecientos años, ella siempre pensó en el bienestar ajeno.— contó la gata viendo con pena.—Y siempre termina de la misma forma.

—¿Cómo?

—Lastimada.— murmuró.

—Ella estará bien White, y nos encargaremos que cuando despierte no deba interponer el bienestar de los otros ante el suyo.— dijo dándole una sonrisa.—Es una promesa de mago.