IAN WRIGHT [+18] ||TERMINADA||

Capítulo 2

Ian Wright

Observo por la ventana con gesto enfadado. Hay espectaculares por todas partes anunciando el desfile, la modelo de los anuncios es una rubia hermosa de ojos azules, esbelta y con unas piernas kilométricas; la he visto antes, es Sophie Lepro.

Probablemente le haga una visita y una invitación. Nunca he estado con una modelo, y para todo hay una primera vez.

Finalmente llegamos. Un chico del ballet parking nos abre la puerta. Alexandra baja primero, y yo detrás de ella.

Extiendo mi brazo y ella lo toma. Juntos avanzamos hasta la entrada. Estamos rodeados por fotógrafos, paparazzis y gente del mundo del espectáculo.

Mostramos nuestras invitaciones al guardia que esta custodiando la puerta, los revisa sin prestar mucha atención y nos deja entrar. No se percató de que eran falsas. Bien.

Buscamos asientos adecuados para poder observar la pasarela sin que nos estorben mucho.

El lugar se va llenando poco a poco, hay mucho ruido, y movimiento.

A las ocho en punto empieza.

Realmente no presto atención a lo que ocurre a mi alrededor, estoy aburrido y cansado. Esas chicas me dejaron agotado. Intento no demostrarlo, no quiero tener problemas con Alexandra.

Y el diamante aparece, cuelga del largo y esbelto cuello de Sophie; me imagino que debe pesar mucho, pero ella camina con gracia y soltura como si no tuviera que soportar el peso de una enorme piedra preciosa que brilla y resplandece con el flash de las cámaras y la iluminación del lugar.

Se ve radiante, trae un vestido azul marino. Con lo cerca que estoy puedo ver como el color se refleja en sus ojos provocando que adopten un color azul más fuerte, y también puedo notar algo más: su mirada es gélida. Calculadora. Sophie es una mujer peligrosa.

Y eso me atrae.

El desfile termina. Salimos de ahí para reencontrarnos con Aarón. Miro mi reloj, ya son más de las diez de la noche.

- ¿Listos para la fiesta? -Nos pregunta en cuanto nos ve.

-Por supuesto que sí -digo con una sonrisa.

Alexandra me mira de soslayo pero no dice nada.

La fiesta se llevará a cabo en un hotel que está a unas cuantas cuadras, así que llegaremos en unos minutos.

Aarón habla con Alexa durante el trayecto, hacen como que yo no estuviera ahí, pero eso no me molesta. Lo que me molesta, es la manera en la que mira a mi ex, son como los de un borrego a medio morir.

Todos sabemos que está loco por ella, e igualmente sabemos que ella jamás le haría caso, pero no por eso deja de ser molesto e irritante. Especialmente cuando la mira de forma posesiva cada vez que Alexandra se acerca a mí.

-Buena suerte -le dice Aarón cuando nos bajamos de la limusina.

-Gracias -responde ella y le sonríe.

Él está a punto de decirle algo más, pero la frase es interrumpida cuando cierro la puerta con fuerza haciendo que ella se sobresalte.

- ¿Por qué hiciste eso? -me reclama.

-Estamos perdiendo tiempo, andando.

Camino a grandes zancadas. Oigo sus tacones sobre el suelo, viene corriendo y me alcanza rápidamente.

-No tenías que ser tan grosero, iba a decirme algo, podría ser importante.

-Quizá por fin iba a decirte cuanto te ama -le suelto. Sí, ya es hora de que se entere.