¡CAPÍTULO 41!

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Heme aquí, recuperando un poco de mi vida, volví hace una semana al colegio, todos estaban demasiado conmocionados por mi regreso, creo que no se lo esperaban o algo así. Los chicos están más que ocupados en sus cosas, Will con temas de la manada, Killian con temas de su reinado en el otro continente y yo, bueno mi más grande preocupación ahora es poder adelantar todos y cada uno de los exámenes y trabajos prácticos que me dan para no perder mi calificación, eso sería desastroso si quiero ir a una buena universidad. Por otro lado Sofi está más que feliz con su chico, Scott, bueno él no cabía de felicidad cuando supo que había despertado, Celes, ella sigue aún con nosotros a pesar de su extra mega celoso novio, él es muchísimo más celoso que mis chicos, pero aún así mi querida amiga lo a domado al menos un poco, Bastián se tuvo que quedar más tiempo en este lugar ya que su Luna está terminando la escuela y bueno ella no iba a darse el lujo de ser una Luna sin terminar sus estudios, además de que se tendría que ir muy lejos y ya estamos un poco màs cerca de la graduación y eso me emocionaba demasiado.

Faltaban algunos días para que diciembre llegará y con ello navidad y año nuevo también, lo que hacía que todos en este lugar estuvieran muy estresados. Con todos y cada uno de los infortunios que me han venido pasando veo que no solo el colegio es lo más importante, en este lugar conocí muchas personas que ahora son más que importantes en mi nuevo mundo, conocí más secretos de mi pasado de los que aún algunos tengo que asimilar, me he vuelto un tanto más fuerte que antes, pero eso no es suficiente en este mundo, aún hay muchas cosas que desconozco, por lo que pienso seguir esforzándome aun mas cada dia no solo en el ámbito escolar, sino también en mejorar en el campo de batalla.

Había otras cosas que aún dejaba de lado como el cofre, el cual sigue en ese lugar donde lo dejé la última vez, tal vez soy una gallina por no volver a abrirlo, pero es que me es difícil aún asimilar que es... de él. Hay muchas cosas que me gustaría preguntarle a él, o a mi abuelo, pero a la vez algo me detiene como si un muro invisible se interpusiera entre el saber que hay ahí y yo.

Sonrío al sentir unas manos en mi cintura, sus manos un tanto ásperas y cálidas que hacen a mi corazón saltar en su lugar dejan suaves caricias por donde toca dejando una estela agradable que me produce escalofrío. Suelto un suspiro al sentir un beso húmedo en su marca que yace en un lado de mi cuello.

— Mi Luna – susurra en mi oído mandando otro escalofrío por todo mi cuerpo — ¿vamos? – enarco una ceja y me giro en sus brazos.

— ¿A dónde? – pregunto intrigada a lo que solo sonríe y se encoge de hombros. Miró en dirección a esos intensos ojos azules y me pierdo en ellos, son tan lindos, tienen ese brillo que sé que es solo por mí, y eso hace que mi corazón salte desbocado en mi interior.

— A nuestro lugar, hoy es viernes y quiero un descanso – dice haciendo un pequeño mohín que se me antoja demasiado apetecible, no lo resisto más y me lanzo a su boca buscando saciarme de ella, él corresponde enseguida a mi demanda y me estrecha aún más contra su tosco y gran cuerpo, paso mis brazos por su cuello y acarició lentamente su nuca, enredo mis dedos en su cabello suave y lo escucho soltar un pequeño gruñido, sonrío al separarnos un poco y él apoya su frente en la mía, ambos tenemos un poco agitadas nuestras respiraciones pero aún así es el chico más sexi del planeta tierra, a parte de mi otro chico. Ambos son endemoniadamente sexis y calientes.

— ¿Y Killian? – pregunto aún jugando con el cabello de su nuca, es tan suave que me encanta, él baja su cabeza y se hunde en el hueco de mi cuello dejando caricias suaves con la punta de su nariz fría.

— No sé, salió hoy a la mañana a una diligencia y no ha regresado. – dice encogiéndose de hombros. Me separé un poco de él deteniendo mis caricias y lo miró detenidamente a los ojos.

— ¿Lo llamaste? – niega. Me separo del todo y busco mi bolsa que está arriba de la cama aún y la reviso buscando mi celular. Lo tomo y marco su número.

Un tono, dos, tres y nada, solo el maldito buzón de voz. Miro mi celular como si tuviera las respuestas y marco de nuevo, y otra vez nada. Observo detenidamente a Will quien está concentrado en ver mis cuadernos que estaban arriba de mi escritorio mientras come una de las galletas que me trajo hace un rato Maggi. Frunzo el ceño.

— ¿A dónde fue? – corto el silencio que se estaba haciendo más denso. Will aparta su mirada de mis cuadernos y la posa en mí. Se muerde el labio y apartó su mirada de mi enfocándose en la pared frente a nosotros. Frunzo el ceño nuevamente y me acerco a él que está sentado en la silla de mi escritorio — ¿Qué me estás escondiendo Williams Craig? – suelta un suspiro y al fin me mira. Se remueve incómodo en su lugar. Me cruzo de brazos y enfrento su mirada azul.

— Por que mejor no nos vamos a algún lado mi Luna — dice levantándose y queriendo salir del cuarto, pero soy más rápida que él y lo increpo antes de que siquiera pueda dar dos pasos a la puerta.

— Habla — exijo más que con seriedad en mi voz. Él sabe que no le conviene tenerme enojada.

— Bien – dice rindiéndose, se pasa una mano por su cabello castaño oscuro desacomodando un poco. Me pican las manos por hacer lo mismo y enterrar mis dedos en su suave cabello, pero me contengo. Solo levanto una ceja y él me mira mordiéndose otra vez su dulce y húmedo labio sonrojado — Killian se fue... se fue a... buscar a... Mikeyla... — murmura muy bajo.

Bajo lentamente mis brazos y fruncí aún más mi ceño.

— ¿Me estás jodiendo? – pregunto incrédula. Will se acerca a mí y niega con la cabeza. Trago el nudo que se está formando en mi garganta y me giro sobre mi eje dándole la espalda — ¿por qué? – cuestionó en un susurro. Will me abraza desde atrás y apoya su mentón en mi cuello.

— No lo sé mi Luna, pero él solo me dijo que no te lo dijera ya que sabia como te pondrías. – dice lentamente.

Aprieto fuerte mis párpados tratando de no soltar ninguna de las lágrimas que se acentúan mis ojos.

¿Eso quiere decir que me mintió? Siento mis uñas incrustarse en mis palmas, pero no aflojo el agarre. Se fue con ella... ¿Por qué no me lo dijo? Me había dicho que regresaría para este fin de semana... Era una mentira entonces.

* — Nos mintió descaradamenteescucho la voz dolida de Homi.

* — ¿Homi? Regresaste... — susurro en mi mente un poco conmocionada por todo.

* — Siento haberme ido... pero ya estoy aquí... No podía volver... pero eso lo hablaremos luego...

* — Claro... me alegro de que hayas vuelto... te extrañe...

— La siento... — dice Will abrazándome con fuerza por mi espalda.

— Si... ella volvió...

* — ¿Por qué te habrá mentido en algo así?

* — Técnicamente nos esconde la verdad porque sabe como nos pondríamos, pero... — niego.

No quiero seguir por ese lado. No aún, necesito sus explicaciones, sé cómo es él, y sé lo que siente por mí, confío en él, en sus sentimientos, pero no confío en esa arrastrada de Mikeyla. Suelto un sonoro suspiro y me giro en los brazos de Will. Me enfrento a su mirada azulada. Me muerdo el labio.

— Confío en él Will, no en ella — digo seria. Él asiente y me estrecha con fuerza en sus brazos. Suspiro su rico perfume y cierro mis ojos.

Solo espero que no me decepciones Killian, no creo soportarlo.

Mi corazón no lo soportará.

En el momento en el que pienso que nada puede salir mal, todo se vuelve en mi contra. Todo.

Un aullido ahogado sale de mí al sentir un fuerte dolor en mi cuerpo y caigo en la inconsciencia. 


NUESTRA MELODY ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora