Tenebrise (+18) I COMPLETA I

Capítulo 1- El Tenebrise

-Mira, te entiendo Carry, es tu primera fiesta y estar con esta gente tal vez sea un poco intimidante, pero no te preocupes, todo saldrá bien. Nos divertiremos un rato y luego te llevo de vuelta a casa, se lo prometí a Isabel.- pasa su brazo por mi hombre- arriba el ánimo.

A diferencia de mi padre sobreprotector, a mi mama le entusiasmaba la idea de que me divirtiera un poco, debido a que me la paso en mi habitación leyendo libros y tocando el violín, las clases habían servido de algo. Pero por supuesto las condiciones para la fiesta eran nada de alcohol, nada de drogas, no aceptar nada de nadie y que fuera con alguien conocido, ahí es donde entra Tony.

-Supongo que podemos enfiestarnos un rato- dije sonriendo.

Una vez dentro, me di cuenta que no era una casa, era una maldita mansión. En la entrada, nos recibió una mesita en el centro de la sala con flores y un retrato de Lauren, indicando que era su fiesta. Habían cuadros enormes colgados en las paredes que probablemente valían más que toda mi casa, y dos innecesarias escaleras blancas con barandas negras que llevaban a la segunda planta.

Tony y yo subimos, uno en cada escalera para bromear un poco. Esta planta era aún más grande, habían muchos adolescentes, con gente en la piscina climatizada. A la derecha se podía ver el bar, en el cual un chico hacía girar bebidas. En el techo, una bola de cristal y unas luces de colores que apuntaban a la pista de baile, y pude llegar a ver una sala de juegos con una mesa de pool, un futbolito y varias de esas máquinas para jugar.

Supongo que es comprensible que los padres de Lauren, unos importantes y respetados abogados, quisieran tener sus lujos. Pues el que tiene dinero lo gasta como quiere.

Mi familia y yo no estamos mal económicamente. Mamá y papá tienen trabajos estables que logran satisfacer nuestras necesidades perfectamente. No significa que nos sobre el dinero. En esta vida, nada es gratis. Pero soy feliz con lo que tenemos gracias a mis padres, ya que nadie les regaló nada. Todo lo han conseguido por mérito suyo con mucho trabajo duro y dedicación. Yo he insistido varias veces en que me dejaran trabajar, ya sea un empleo pequeño que contribuya un poco. Pero siempre me dejan claro que mi único objetivo ahora, es continuar con mis estudios y que me concentre únicamente en eso.

Adentrándonos cada vez más en el lugar, mi sonrisa se ampliaba. Todo se veía super bien, a excepción de que a mi alrededor pasaba gente bastante borracha. Su olor a alcohol podía sentirse a kilómetros de distancia. Era un tanto desagradable.

Los meseros cargaban bandejas de una lado al otro. También se podía observar a personas besuqueándose de las formas más raras que te puedas imaginar.

-Movamos el bote un ratito- mi amigo me tomó del brazo para llevarme directo a la pista de baile.

La música era muy ruidosa, había gente sudada saltando a mi lado con el éxtasis en sus sistemas. Soy tan pequeña que algunos ni notaron mi existencia, a consecuencia de ello, me daban pisotones y empujones.

Después de bailar un poco y saludar a algunos amigos de Tony, nos encontramos a la anfitriona de la fiesta.

-¡Tony! ¡Carry!- gritó Lauren acercándose a nosotros. Llevaba un vestido rojo al cuerpo que combinaba perfectamente con su cabello largo y pelirrojo- me alegra que hayan venido.

-No podíamos perdernos la gran fiesta de Lauren Davis- exclamó Tony mientras la abrazaba. Sabía que ellos formaban una linda amistad desde hace años.

-Espero que se estén divirtiendo. Tomen- nos extendió un vaso de plástico con algo que parecía vodka. Sea lo que sea, sabía que no le daría ni un sorbo- para que se enloquezcan un poco.

-Gracias, que hermosa casa tienes por cierto- alagué a Lauren.

-Si supongo, tengo otras tres en la ciudad, pero siempre hago las fiestas aquí. Con la piscina, el bar y la sala de juegos, no hay forma de que mis invitados se la pasen mal- asentí- y ni hablar del lago, en el verano a veces voy a refrescarme un poquito.