— ¿Estas bien? — preguntó Gohan alarmado, tomando a su amiga de los hombros.
— Se llevaron las esferas, Gohan... perdón no pude evitarlo — decía entre sollozos la chica.
El semisaiyajin la abrazó con fuerza y acarició suavemente su cabello. Su amiga temblaba y se estremecía con su llanto, era evidente que estaba asustada, pero Gohan necesitaba comprobar que esos rufianes no la hubieran lastimado.
— Lime, mírame ¿estás bien? ¿Te lastimaron? — insistió acunando el rostro de su amiga entre sus manos para que ella lo viera a los ojos.
Lime fijó la vista en los grandes y preocupado ojos de su amigo y asintió ligeramente — ¿tú estás bien?... Recibiste el ataque directamente — cuestionó.
— No debes preocuparte por mí — contesto Gohan. — Ven iremos a buscarlos — ofreció poniéndose en pie mientras extendia una mano para ayudar a su amiga.
Lime aceptó e imitó a Gohan, sus manos seguían temblando, pero al menos había dejado de llorar — ¿Dónde está el Gran Dragón? — preguntó mirando hacia dónde se suponía que tenía que estar la criatura.
El semisaiyajin comenzó a buscar con la mirada a su amigo por los alrededores sin hallar pista alguna de él — supongo que escapó para mantenerse a salvo — comentó, pero la preocupación seguía latente en el rostro de su amiga — descuida, está bien, puedo sentir su ki, debe estar escondido en alguna parte — explicó regalándole una sonrisa a la niña. — Vamos tras esos rufianes ¿te parece? — exclamó tomando la mano de Lime.
— ¿Cómo lo haremos? No sabemos hacia donde se fueron — preguntó la chica.
— Con ayuda del radar del dragón — contestó Gohan.
— No tenemos el radar, ellos se llevaron tu mochila y allí teníamos todo — exclamó Lime soltando su mano del agarre de su amigo. — Lo lamento debí... debí ser más fuerte y no dejar que se lo llevaran — dijo llevando las manos a su rostro para cubrirlo.
— No... esto es mi culpa yo... yo bajé la guardia y ni siquiera fui capaz de percibir su ki, yo soy quien debía cuidar de nosotros, yo... me dejé aturdir con algo tan simple como esa arma — rebatió el semisaiyajin tomando a su amiga de los hombros. Ella bajó un poco sus manos de forma que sus ojos quedaron libr6e para mirar a Gohan.
Mientras tanto en el templo de Kamisama, Piccoro había pedido a Dende que le permitiera observar a su discípulo, por lo que fue testigo, a distancia, del ataque que habían recibido los dos niños — ¡No puedo creer que Gohan se haya dejado sorprender por esas sabandijas! — exclamó el namekusei ligeramente molesto por el descuido de su protegido. — No queda más remedio, iré a ayudarlo a atrapar a ese idiota de Pilaf — anunció a Kamisama y Mr. Popo.
— ¡Espere, Piccoro! — exclamó Dende tomando al aludido del brazo. — No creo que sea correcto — argumentó.
— ¿De qué hablas? Gohan está en problemas debo ir a ayudarlo — refutó Piccoro, molesto y sin entender porque Dende lo retenía.
— El Kamisamas tiene razón, es momento de que el niño aprenda a defenderse por sí mismos — opinó Mr. Popo mostrando su apoyo a la idea de Kamisama.
— Ese tal Pilaf no es alguien peligroso, Gohan puede hacerse cargo de él sin ningún problema — comentó Dende soltando el brazo de Piccoro.
— Pero él ni siquiera sabe por dónde empezar, en donde buscar, ni tan siquiera sabe a quien buscar — insistió el namekusei.
— Piccoros debe entender que Gohan ya no es un niños, ya se esta convirtiendo en un hombres y debe aprender a resolver sus problemas el mismos — dijo Mr. Popo manteniendo su cara inexpresiva.
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En su ausencia || Dragón Ball Z
Fanfiction¿Qué pasó con Gohan después de la muerte de Goku? ¿A qué retos se enfrentó? ¿Quiénes estuvieron con él? ¿Qué pasó con el resto de los guerreros Z? Todos los personajes pertenecen a Akira Toriyama.