28. La primera y más importante

529 43 131
                                    

— ¿Manzana? — ofreció Lime desde atrás.

Habían partido, después del alboroto, acompañados con los cálidos rayos del sol, en aquellos momentos se encontraban sobrevolando por una gran extensión de tierras boscosas, el aire golpeaba sus rostros con delicadeza y hacia que sus cabellos se movieran al mismo ritmo que marcaba el viento. Habían decidido transportarse haciendo uso de la nube voladora, aquella opción resultaba más cómoda y práctica puesto que así podrían cargar ambos son sus respectivas mochilas. Era apenas medio día y el sol estaba en su máximo apogeo, Gohan iba sentado al frente de la nube, pues era quien la dirigía siguiendo las indicaciones de Lime que se encontraba tras de él.

Llevaban aproximadamente una hora de viaje y ya se encontraban bastante alejados de la montaña Paoz, para esas horas, Milk y Goten, seguramente ya se encontraban en la tienda del señor Lao. Allí habían dejado más de la mitad de la enorme dotación de manzanas que Gohan le había regalado a Lime, por lo que, era casi un hecho,que su madre se pondría a hornear tartas de manzana para la cena.

— Gracias — respondió Gohan tomando la fruta que su amiga le extendía. — ¿Vamos en la dirección correcta? — preguntó el semisaiyajin después de darle una mordida a su manzana.

— Eso creo... mira — al decir esto la niña extendió el radar para que Gohan pudiera verlo, allí se hallaba una marca que indicaba el lugar donde ellos se encontraban y, en esa misma línea, un poco más adelante, parpadeaba una luz, señal de que ahí se encontraba una esfera del dragón. — Creo que aún falta mucho ¿no?

— No, estamos cerca. La escala del radar está muy aumentada por eso parece estar muy lejos, llegaremos pronto — explicó el semisaiyajin volviendo su atención a la manzana a medio comer que tenía entre sus manos.

Siguieron su camino hasta que el paisaje cambió dejando los árboles atrás para abrirle paso a un grande y caudaloso río. De pronto, Gohan sintió como su amiga enredaba los brazos sobre su pecho y se aferraba con fuerza a él, el semisaiyajin no sabia la razón pero un leve sonrojo se asentó en sus mejillas al sentir ese abrazo tan repentino.

— ¿Qué... qué haces? — preguntó dándole pequeñas palmadas a la manos entrelazadas de su amiga.

— ¡Ay Gohan, ¿era necesario pasar por aquí?! — exclamó ella aferrándose aún más a él.

El semisaiyajin soltó un carcajada y se relajó, había olvidado el temor que su amiga le tenía al agua, o más bien, a morir ahogada. — No te preocupes, estamos a salvo aquí — dijo acariciando la superficie de la nube voladora.

— ¿Y si a tu dorado algodón de azúcar le da por derretirse y caemos al agua? — rebatió ella con un leve toque de preocupación en su voz.

— Puedo volar — fue la respuesta de Gohan. Ante esas palabras Lime apretó aún más el abrazo e hizo uso también de sus piernas para enrollarlas en la cintura de su amigo. El semisaiyajin nuevamente volvió a reír y tomó las manos de su amiga para tratar de calmarla.

Al cabo de un par de minutos, cruzaron en su totalidad aquel río que tanto temor había infundido en Lime llegando a un hermoso plano de árboles increíblemente verdes. Gohan susurró a su amiga que ya se encontraban volando sobre tierra y, solo entonces, ella se atrevió a soltarse y abrir sus ojos para observar como el paisaje había cambiado.

— Gohan... — dijo Lime, dando un leve toque al hombro del aludido, quien volteó ligeramente — Necesito ir al baño —. Anunció ella con la desesperación bailando en su rostro.

— Claro... ¡baja nube voladora! — exclamó Gohan haciendo que su transporte comenzara a descender. Una vez en el suelo Lime dio un salto para bajar de la nube y corrió adentrándose en los árboles para poder hacer sus necesidades. El semisaiyajin se quedó esperando en el mismo sitio hasta que, pasado un pequeño tiempo, escuchó a su amiga gritar con todas sus fuerzas.

En su ausencia || Dragón Ball ZWhere stories live. Discover now