Parte Vierzehn :Punto y coma.

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De un instante a otro me encontraba rodeada de jóvenes,lista para arremeter con espectadores presentes.

Nos trasladamos a aquella esquina del bar,la de sector exclusivo para los uniformes;¿Qué era lo exclusivo para nosotras si también teníamos el águila en nuestra chaquetilla? Simple,no somos hombres,las únicas damas que ingresaban solo eran damas de compañía, pasatiempos.

La hermosísima Marlene endulzaba con su voz de ángel atravesando la radiofónia y yo tenía a mis "preparadoras" para subir al ring,una algarrobada mesa en medio con dos sillas y a nuestro lateral la diminuta tribuna con una diana.

-Bien es simple Fraulein,debe lanzar el dardo,si acierta en el blanco bebe un tarro completo,si acierta hasta por tres líneas debajo bebe la mitad,cinco tiros, cinco rondas quien acabe primero gana- Guiñando un ojo.

-Gut - Con calma susurré al mismo tiempo que mis porristas me miraban con preocupación.

-Cuando ya no pueda seguir solo hágalo saber, las damas primero- Confiandose - Amigo migo, no estés tan seguro - le advertía Kurt.

El juego comenzó,los tarros se llenaron Adler tenía esa pícara y ególatra mirada,esperaba lo que muchos, verme fallar o en su defecto estar cerca de ello, pero que mejor que acallar todas esos pensamientos dando en medio de el círculo, tome el dardo y toque leve su punta para sentir el filo y después de exhalar arroje casi en flechazo para dejarlo ensartado, acto seguido sostuve el mango de aquel fresco cristal lleno de la mejor cerveza,la alemana, - A su salud Teniente -

-La suerte de principiante la acompaña Fraulein - curvo sus labios hacia un lado -

Casi experto y como era de prevenir dió un blanco perfecto, pero si algo se dice es que no hay que cantar la victoria antes de tiempo.

No quiero ser soberbia,pero soy Alemana y de Baviera,no le tengo miedo a la cerveza y al parecer tengo bastante puntería con el rifle,eso puede que influyo en una diana. Era sorpresivo para todos en el recinto,mis tarros se vaciaron antes que los suyos,debo de admitir que hasta yo misma estuve anonadada y Adler por subestimar se llevó una pequeña pero significativa derrota.

- Muy bien,¿ Que es lo que gané? - pregunté con la frente en alto y el chillido alarido de las chicas saltando sobre si mismas sin creer lo que sus ojos ven.

- Una cena - Rotundo expresó encendiendo un cigarro- Me asombre, pero no tuve la oportunidad de  aceptar o denegar por la interferencia del Sergeant

- Te lo dije, no debiste desafiarla amigo, felicidades Schneider - Dijo Kurt dándole una palmada en su hombro y sonriendo. - Al menos el Teniente posee el don de arriesgar y no se atemoriza ante un imprevisto -.

Cruzamos miradas unos con los otros y quedamos boquiabiertos, en total asombro,colmado de incomodidad diría,al oír mencionar esas palabras tan filosas de Gretl

- ¿A qué se refiere Pentz? - arrastra su silla brusco y se pone de pie posando ambas manos en la mesa - ¿una persona precavida que busca no lastimarte es cobarde? - Frunciendo su entrecejo.

- A veces el remedio es peor que la propia enfermedad y aquel que no arriesga no ha de ganar, Sergeant -

Ambos se encontraban enfrentados y pocas personas eran ajenas,la mesa de superiores en su totalidad conocía bien el motivo por el cual Kurt se comportaba de tal manera,todos, menos nosotras.

- Pues,a veces,es mejor jugar a lo seguro y evitar varias cosas,Pentz-

- Se refiere entonces a evitar a una persona la cual ya fue utilizada como un simple pasatiempo, Sergeant-

- Golpeo con una furia vital su puño y dijo - Jamás fuiste un pasatiempo - Se silencio por un breve  momento y continúo- Solo,quería evitar que la distancia rompiera tu corazón, aunque eso signifique alejarme de ti,esa es la razón de mi indiferencia -

El Diario de Ida: ÜberlebeWhere stories live. Discover now