Parte Neun: Consecuencias.

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Frankfurt, Alemania. Septiembre 29 de 1939.

Las madrugadas en el campamento eran hermosas,el sonido envolvente de la naturaleza te hacía sentir libre.

Brisas espiraladas acariciaban viejos y pequeños de pie,desnudandolos poco a poco.
Pálidas amarillas,rojas agonizantes  y moribundas ya secas, comenzaban a abandonabar sus ramas cubriendo el suelo y tapando los techos de los ranchos. El Otoño había llegado.

   -¿Ida?,¿Ida,estás despierta?-.

   -I

   -Da!

Horas de naturaleza eran a calladas por el susurro diminuto de Gretl que sacudía mi cara e incluso mi cuerpo,

    -Ahora si.¿Que?- Fatigada dije.

Un aroma a Ron invadida mi entorno, encendí mi lámpara tratando de mirarla y eso me hacía sospechar que el potencial aroma era mi amiga.

    -Idi, -Dijo sentada en mi cama con ojos perdidos en quien sabe donde apretujando su cartera.

    -Gretl,son las cuatro a.m.¿Cómo volviste?.

    -Solo flote hasta aqui- Dijo sonriente arrojándose a mis pies.

     -¿Acaso bebiste?-.

       -¿No son hermosos sus ojos?-

     -¿Los ojos de quién?- Pregunté.

     -De mi Kurt-Dijo ella

      -¿Tu Kurt?.

    <<Ay amiga,si bebiste>>  , pensé.

    -Si claroo, en especial cuando les grita inútiles a las demás chicas hasta hacerlas llorar,creo que su color azul hasta se intencifica - Sarcástica rodé mis ojos y la acomode en mi cama-.

    -El jamás me hizo llorar.

    -Pero lo va a hacer- Expulse.-¿Gretl?

Al parecer,mi compañera se había dado cuenta de sus emociones por nuestra niñera y ahora reposaba ebria  en mi catre abrazando mis piernas.

Gracias al alcohol,hacemos y decimos cosas que quizá teníamos guardadas hace un tiempo.Pero,no nos preocupa lo que podamos hacer o decir sino lo que viene después de eso.

No es solo el alcohol,la ira,el temor,los nervios todas liberan lo reprimido en nuestro interior,pero también traen algo en común con ellas, consecuencias.

Existen consecuencias para todo, hasta para el más mínimo de los actos,pero solamente depende de nosotros darle un rumbo positivo o negativo para nuestra vida.


Los rayos de sol hacían su entrada triunfal a través de las ventanas en el viejo rancho,compañeras vencidas ante un enemigo no letal pero totalmente desagradable,la resaca.La tranquilidad se extendió por todo el lugar pero era hora de continuar y como dice el dicho, nada dura para siempre.

   ¡RINNNNG!  ¡RINNNNG!

  -¡Güten morgen Kaiserinas!-.Quiero verlas afuera de sus catres ¡ahora!.

Un escandaloso timbre oxidado,fue colocado justo sobre las puertas,no había bebido tanto pero podía jurar que sonaba más fuerte de lo que debía.Si para mí era una molestia para las demás de seguro fue una explosión agonizantes al cerebro.

Hasta la voz del Sergeant se oía rara,pero no rara desganada sino rara de enérgica, energía que no todas poseían.

    -¡Mas rapido,en el comedor ya!- Vociferaba tanto que su rostro enrojecia.

El Diario de Ida: ÜberlebeWhere stories live. Discover now