La Epifanía de un pintor •KookTae•

Capítulo 4

04

Por la mañana un somnoliento Taehyung despertaba sintiendo los rayos mañaneros del Sol colándose por su ventana iluminando su rostro de una manera cálida pero igual fastidiosa. Quería seguir durmiendo.

Bostezo mientras se sentada restregando sus manos por su rostro suavemente y se estiró con poco, buscó su celular por el mueble junto a la cama y miró la hora.

10:16 am

Normalmente era bastante madrugador le sorprendía haber dormido tanto pero como no tenía mucho que hacer no se alteró por eso.
Más abajo de la hora en su celular reviso unas cuantas notificaciones de su hermano diciéndole que pronto su familia estaría de visita y suspiro pesadamente porque si venía su padre sería un verdadero caos la casa.

Y no es Taehyung se llevará mal con su papá, solían ser muy unidos (aunque ahora ya no tanto), pero la persona que venía con él apegada como una larva era quien sacaba a Taehyung de sus casillas creándole dolores de cabeza interminables.

Su madrastra.

Respondió los mensajes que tenía pendientes y antes de levantarse de su cama escuchó un ruido y algo en su cabeza hizo click.

"Jungkook", susurró en sus pensamientos.

Frunció el ceño porque de alguna manera el creía y sentía que todo lo vivido hace unas horas en la noche era producto de un sueño y por eso despertó como si nada. Pero su Taehyung curioso caminaba hacia la puerta para dirigirse al lugar en donde supuestamente había dejado al muchacho durmiendo.

Al abrir la puerta encontró al mismo Jungkook que había pintando, al mismo Jungkook que se había salido de su pintura, al mismo Jungkook que le dio de comer, al mismo Jungkook dejó durmiendo justo donde estaba ahora. Bueno al menos no estaba tan loco.

—Sigues aquí...wow bien —se adentro mirando al menor que inspeccionaba los objetos como si fueran alguna especie de maravilla nunca antes vistas— ¿Como dormiste?

—Yo..Bien —Respondió bajito.

—Excelente entonces... ¿Desayunamos?

Jungkook asintió en respuesta para acompañar a Taehyung a la habitación de al lado ya que por obvias razones el mayor tuvo que prestarle algo más de ropa más cómoda, no podía estar todo el día con pijama.

Luego de haberse aseado (por separado obviamente) bajaron a preparar algo de desayunar, bueno en este caso fue Taehyung ya que el menor solo se disponía a mirar cada acción que realizaba Tae sentado esperando.
Con una taza de café y una de leche tibia con unas tostadas y mermelada desayunaron en silencio y observándose uno con curiosidad y el otro como si siguiera viviendo en un sueño.

Solo que ahora aceptaba que realmente jungkook estaba ahí... y vivo.

—¿Jungkook puedo preguntarte algo? —lo vio asentir y siguió hablando— ¿Sabes de donde vienes? —recibió una respuesta negativa por parte del contrario y suspiro.

—No sé.

—¿Realmente no sabes nada sobre ti?

—No sé mucho —repitió y terminó su última tostada.

—Bien yo...tendremos que buscar respuestas en alguna parte.