Capítulo 3

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03

Taehyung no es muy fan de las cosas terroríficas pero de las dos veces que ha visto películas de terror nunca creyó que fueran reales e incluso decía que eran tonterías inventadas por las personas para lograr hacerse millonarias creando conspiraciones falsa.

Porque vamos ¿una muñeca malvada? Si el diablo existiera, por qué una muñeca y no un asesino en serie o un maniático salido de un psiquiátrico?. Eso si daría miedo.

Y justamente ahora se sentía imbecil por creer que algo ya sea malignamente espiritual está en su casa y sus teorías son bastante locas porque, la puerta está con llave no hay modo de que alguien entrara allí y se encerrara porque la cerradura es únicamente desde afuera.

Dando su quizás décimo suspiro se atrevió a insertar la llave abriéndola y Taehyung encontró que fue más aterrador escuchar el chillido que hizo la puerta al empujarla tan despacio, antes de entrar prendió la luz mirando algo asustado a su alrededor si entiendo escalofríos por su espalda, pero al no ver nada a la vista se armó de valor entrando.

—Bueno Kim Taehyung felicidades estas completamente loco.

Se dio vuelta para volver a salir pero escucho caer un pincel al fondo de la habitación causando que diera un pequeño brinco por el susto.

—Hay...hay alguien ahí?  —se atrevió a caminar despacio y con cuidado a través de sus cuadros— si hay alguien solo salga si...no —otro ruido—...mierda.

Al llegar al fondo donde estaba ese lienzo grande levantó la cabeza para mirar el rostro del chico que había pintado días atrás pero lo único que encontró fue un lienzo completamente en blanco sin ninguna mancha de pintura.

—Pero que demon... —Un estornudo muy cerca de él se volvió a escuchar— quien quiera que seas solo...

Una sombra detrás del lienzo se vio y al borde se asomó lo que parecía ser un...brazo?, Taehyung hizo a un lado aquel gran objeto sorprendiéndose por lo que veía.

Alto o tal vez de su misma altura y de piel pálida en su mayoría por lo que las manchas que veía suponía que era polvo, cabello color negros y uno ojos del mismo color de este deteniendo a verlos para notarlos algo asustados. Bajando un poco su vista llegó a unos labios cerezas un poco partidos y resecos con ese conocido lunar bajo de ellos.

—¿Quién eres y porque estas desnudo aquí? explícame antes de que me desmaye —soltó nada más sin creer en lo que veía recriminándose mentalmente por ser un miedoso.

—Yo... —Es lo único que salió del chico frente de él y Taehyung apenas pudo escucharlo.

—Tu... eres —volvió a detallarlo para luego mirar el lienzo completamente en blanco junto a él—...No puede...no no.. no puedes.. oh Dios.

Taehyung crecía que había consumido alguna clase de drogas o algo debió tener esa pizza que había comido esta tarde con Jimin porque era totalmente absurdo lo que ocurría frente sus ojos y mucho más tonto lo que pensaba su cabeza.

—Es que t... tu? —tapó levemente su boca con sus manos en medio de su pánico al recordar el nombre que dijo cuando había terminado su pintura— ¿jung...jungkook no?...Dios no

—¿jung...gook? —repitió en un susurro el chico y Taehyung solo suspiro para asentir.

—Si.. al parecer si, jungkook

—Ah

—¿Asi te llamas no?

—¿Uhm?...¿j-jungkook? —el chico delante de él temblaba y Kim tenía una gran confusión en su cabeza como para notarlo pero solo sacudió sus cabellos rubios con una mano.

La Epifanía de un pintor •KookTae•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora