Pero ya era demasiado tarde para arrepentimientos, y se dió cuenta cuando de forma instantánea el autobús comenzó a recibir disparos ajenos, provocando que tanto él como el funcionario agacharan las cabezas y se pusieran alerta.

El vehículo se detuvo abruptamente, Jungkook logró escuchar a varios hombres gritar y exigir al conductor que bajara del auto. El funcionario que lo acompañaba inmediatamente sacó su arma y la apuntó hasta la puerta del autobús, pero se quedó inmóvil cuando observó que aquellos hombres tenían ametralladoras y armas de nivel más alto.

—¡Suelta el arma y sal del autobús! —ordenaron aquellos desconocidos, amenazando con dispararle al conductor sino lo hacía. Y el funcionario obedeció, dejando el arma de lado y bajando del vehículo— ¡Quítale las esposas! —después se acercó a Jungkook y con unas llaves especiales lo desató.

Estando libre y con los guardias amenazados, Jungkook avanzó rápidamente hasta la motocicleta color negra, poniéndose de la misma forma el casco y subiéndose para encenderla. Le dió una última mirada a todos esos hombres y finalmente arrancó, perdiéndose en el largo sendero.

Mientras se dirigía a la ciudad, no podía describir la adrenalina y emoción que estaba sintiendo en ese momento. El hecho de estar finalmente afuera, era suficientemente para hacer llorar a cualquiera, pero ni siquiera se pudo concentrar en eso puesto que tenía un sólo objetivo: llegar al hospital donde estaba Jimin.

Cualquiera diría que estaba haciendo una estupidez, y probablemente lo era, porque técnicamente podía fugarse, pero no pretendía hacerlo. Sabía que tarde o temprano lo atraparían, pues los policías no eran idiotas, sospecharían de inmediato que iría al hospital, así que tenía el tiempo contado antes de que lo descubrieran.

Después de un recorrido de aproximadamente cinco minutos, Jungkook llegó al hospital y se estacionó, en realidad no recuerda dónde lo hizo, sólo dejó la moto y el caso allí tirados y salió corriendo hasta la entrada. Finalmente ingresó, observando a su alrededor con la respiración agitada y rostro levemente rojo por las quemaduras del viento. En primero momento nadie se dió cuenta de su presencia lo cual fue un punto a su favor, ya que le permitió comenzar a escabullirse.

—Disculpe —se atrevió a preguntar a una enfermera— ¿Podría decirme dónde está el área de cuidados intensivos?

La mujer estuvo a punto de responder hasta que lo escaneó de pies a cabeza e inmediatamente reconoció que era un recluso.

—¿Qué hace usted aquí? —pregunta asustada para comenzar a pedir ayuda— ¡Seguridad!

—Mierda —maldice Jeon antes de darse media vuelta y alejarse rápidamente, decidiendo buscar por sí mismo.

En silencio, comenzó a recorrer los pasillos, observando los letreros y guiándose por los mapas en las paredes hasta que finalmente llegó al área de cuidados intensivos donde supuestamente debería de estar Jimin.

Eran varias habitaciones en un mismo pasillo, todas con grandes ventanales que permitían observar al paciente desde afuera. Jungkook fue ventana por ventana, buscando con desesperación hasta que se detuvo de golpe al reconocer una cabellera rosa en una de las habitaciones.

Y finalmente lo vió, a Jimin acostado sobre una cama, con una mascarilla respiratoria y varios cables a su alrededor. Jungkook avanzó lentamente hasta colocar sus manos sobre el cristal, y literalmente soltó un suspiro de alivio. Estaba vivo. No pudo evitar sonreír un poco, sintiendo su vista nublarse al contemplar lo angelical e inofensivo que se veía con los ojos cerrados.

Pero justo en ese momento su tiempo sentimental se arruina cuando un policía se abalanza contra él y lo agarra, tirándole al suelo.

—¡Lo tenemos! —avisa otro oficial por medio de la radio.

A pesar de eso, Jungkook no se resistió, dejó que lo agarran y esposaran. Logró dedicarle una última mirada a Jimin antes de que lo sacaran de allí. Probablemente no podría disfrutar de ningún beneficio penitenciario por el resto de su vida y que a su condena le sumaran diez años más, pero no se arrepentía de nada.

Porque había válido totalmente la pena.

Sin embargo... quien diría que justamente después de que Jungkook abandonó el hospital escoltado por policías, Jimin despertó.

 quien diría que justamente después de que Jungkook abandonó el hospital escoltado por policías, Jimin despertó

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Finalmente Jimin ha despertado. Y tranquilas no sufrirá ningún efecto secundario como pérdida de memoria. Continúen en el otro cap para poder ver su reencuentro, uwu.

Presos Deseos ✗ kookmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora