De vuelta a la vida

CAPITULO IX - Evadiendo la realidad

Son casi las 11 de la noche, Lucia y yo llegamos al departamento nos despedimos, ha sido un día largo y prácticamente no he dormido. Solo he intercambiado un par de mensajes con Siwon, parece que sigue ocupado, probablemente no nos veamos hoy, aunque sabía que esto iba a pasar, me siento triste, que rápido me acostumbré a su presencia, después de todo, estuvimos juntos casi 2 días...no quiero enviarle más mensajes, porque sé lo que es que alguien te esté esperando, y no puedas ir porque estás trabajando. Apago las luces y me recuesto, pronto caigo en un sueño profundo.

Son las 8 de la mañana, me despierto con el sonido del celular, es un mensaje de Siwon

Lo siento, no pude verte anoche, prometo que lo compensaré. Ya te extraño...Buen Provecho.

¿Buen Provecho? ¿Acaso se equivocó? ¿A quién le quería enviar el mensaje? Mil cosas se vienen a mi mente, alguien toca la puerta, salgo a abrir, me siento un poco confundida, cuando abro, un repartidor me entrega una bolsa y se va, cuando la abro hay un cheese cake y un café. Me siento culpable de mis pensamientos, respondo su mensaje

Gracias, sería mejor si lo compartiéramos, también te extraño.

El día de hoy Lucia y yo no saldremos juntas, así que decido ir a caminar por Insadong y después iré a la Torre Nansam. Amo esta ciudad, todos sus colores y edificios me envuelven, hace un par de años, jamás hubiera imaginado que estaría aquí, viviendo una de las mejores experiencias, y no solo por estar saliendo con Siwon Choi, sino porque me atreví a viajar sola al otro lado del mundo ¿Por qué no lo hice antes?

Esta atardeciendo, y llego a la torre, siempre he preferido los atardeceres sobre los amaneceres, los colores cambiantes de esta hora me encantan, ver salir la primera estrella de la noche, ¿hay algo más perfecto? Sí, podría haberlo, no tardo mucho en darme cuenta que el lugar está repleto de parejas, en general no tengo problema con ello, pero conforme pasa el tiempo, me siento triste, ojalá Siwon estuviera aquí ¿Seguirá ocupado? Pareciera que lo llamo con la mente porque en ese instante me marca.

-Hola! ¿Dónde estás? – Me pregunta, su voz siempre es alegre.

-En Namsam...- Le digo un poco desilusionada.

- ¿Por qué? ¿Con quién?

-Sola, hoy Lucia tenía otros planes y no quería perderme esta visita ¿Y tú? ¿Aún estás ocupado?

- Un poco, me gustaría terminar pronto y estar contigo, pero con la gira y el aniversario, es una locura, ya que estás ahí, ve al restaurante que está en la torre, reservaré un lugar para ti, sé que no es lo que esperas, pero te gustará, la comida es deliciosa.

- Ok, muchas gracias, aunque no tienes que hacerlo.

- Quiero hacerlo, anda ve y disfruta la hermosa vista.

Colgamos. Llego al restaurante y efectivamente, ya hay una reservación a mi nombre, el lugar parece un poco elegante, un mesero se acerca y me dice que la comida ya fue elegida al tiempo que me sirve una copa de vino; la vista desde el lugar es hermosa, pero me gustaría que Siwon estuviera aquí, sé que dije que ambos deberíamos entender los compromisos del otro, y de verdad lo entiendo, es solo que lo extraño, y no podremos pasar tiempo juntos una vez que me vaya. Antes de que la cena llegue, la hostess se acerca con una hermoso ramo de rosas rojas, alguien me cubre los ojos...reconozco ese aroma...¿De verdad vino? Me volteo inmediatamente...es él...Siwon está allí.

-¡Veniste! ¿No dijiste que estabas ocupado? – Me gusta que haya llegado pero me preocupa que haya dejado algo pendiente.

-Terminé antes de lo que pensé, además te adelantaste, ya había planeado traerte.

- ¿De verdad? Lo siento.

- ¿Sabías que aquí se viene con pareja?

- Sí, algo había leído, pero no le tomé mucha importancia.

- ¡No lo puedo creer, estoy con la persona menos romántica del mundo! –Dice dando un poco de dramatismo a sus palabras.

- Tú tampoco eres romántico, no veo que tengas ningún candado – Según lo que había leído, las parejas suelen colocar un candado en los barandales del camino a la torre, algo que se ha vuelto muy popular en muchos lugares románticos del mundo. Inmediatamente después de decirlo me arrepiento de mis palabras, es muy prematuro pensar en eso, simplemente me dejé llevar por el momento, sin embargo, Siwon quita de mi mente ese arrepentimiento al sacar de la bolsa de su pantalón un candado.

- ¡Vamos!, se hace tarde y ¡tenemos muchas cosas que hacer! –Toma mi mano y salimos del lugar. Nos dirigimos a los barandales repletos de candados de todas formas y colores, Siwon saca un marcador y coloca nuestras iniciales, mientras lo coloca en ese mar de promesas que muchas personas se han hecho.

- Sabes que esto no es solo romanticismo – Comienza a decir – en verdad quiero que esto funcione de todas las formas posibles, no te prometeré nada, solo quédate a mi lado mientras lo hago.

No necesito nada más, no necesito que prometa nada, le creo...Nos besamos, haciendo un compromiso, no una promesa.

Después de contemplar la ciudad desde lo alto de la torre, caminamos por el puente Banpodaegyeo, donde contemplamos las luces y fuentes. Caminar de su mano me hace no querer saber nada más del mundo, la vida debería ser tan sencilla, como caminar de la mano de la persona que quieres.

Es miércoles, anoche no tuve el valor de hablar de mi regreso a México con Siwon, tengo miedo de lo que vendrá después, no hay forma de que él pudiera viajar a México, ni creo que yo pueda regresar pronto a Corea, debido a sus múltiples compromisos lo veré hasta el viernes, planeamos ir a la isla Jeju, esta vez, Lucia irá con nosotros.

Los siguientes días, visito Ihwa, los palacios de la dinastía Joseon, Bukcheon Village, me enamoro de sus pintorescas calles y de sus habitantes con trajes típicos. El jueves por la noche Lucía y yo caminamos por el mercado Dongdaemun, estoy buscando algunos souvenirs para mis amigos y familia.

-¿Y ya hablaste con Siwon de lo que harán cuando te vayas?- Me pregunta mientras compramos algunas brochetas de pescado.

-En realidad no, no sé qué decirle, porque por más que pienso no veo la forma de poder verlo a menos que sea por videollamada.

- No creo que viajar a México, sea gran problema para él.

-No es eso, por sus compromisos con SuJu, su empresa y algunos rodajes, no podrá viajar pronto, hasta ahora solo sabemos que probablemente visite Mexico como parte de la gira en Julio del siguiente año.

- ¿Qué? ¡No puedes dejar que eso pase!

-No puedo hacer nada, al menos, por el momento no se me ha ocurrido nada. ¡Ni siquiera estoy segura de que sepa que mi avión sale el lunes! – Le digo desesperada, esto es demasiado difícil, deberíamos hablar claramente, pero estoy negándome a aceptar la realidad.

-¿Qué? O sea que iremos a Jeju, y en cuanto regresemos le dirás, bueno gracias por todo, pero mi avión sale mañana. ¡No puedes hacer eso!

-Claro que no, te juro que mi corazón y mi cabeza son un desastre en este momento, siento que solo arruinaré todo.

-Pues en el fondo sabías que seria difícil, sabes que aunque pase cualquier cosa, eres fuerte y saldrás de esto– Trata de consolarme – Al final, ¡ya besaste a Siwon Choi! Ve el lado positivo – A veces me sorprende su frialdad al decir las cosas, yo suelo ser así también cuando no soy la del problema.