Capítulo 21 "La Aparición de Romeo"

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"Yo prometo que serán inmutables lágrimas inocentes"

(N/A, notas de la autora)

-dialogo-

"pensamientos"

"recuerdos (dialogo)"

Narración

Días antes, cuando su padre, el Duque de Grandchester llego a Nueva York y se encontró con él en el hospital después de su desmayo causada por aquella revelación que aún le costaba creer y asimilar. Le ofreció lo que parecía la solución a sus problemas y la llave de su felicidad que se le fue arrebatada aquella noche de invierno, las lágrimas derramadas, el dolor que sintió cuando la soltó mientras su corazón intentaba guardar su calor y el aroma de sus rizos dorados, al mismo tiempo que le pedía que fuera feliz, era una estupidez cuando era él quien deseaba ser parte y causante de su felicidad, pensó también que era un cobarde, como su padre, quien parecía compadecerse de él para que no repitiera el mismo error de dejar ir al amor de su vida como lo hizo él con Eleonor.

Cuando su padre le dijo que iría a ver a Susana y a su madre, este se ofreció ir solo, ya que eso le restaría tensión a la negociación. Al principio Terry quiso negarse y acompañarlo para evitar ser llamado cobarde, no obstante, su padre logro convencerlo de que probablemente su opinión sobre él no cambiaría si asistía a no. Cuando fue la tan esperada visita y después de su última función de aquel día, él se había quedado en el mismo hotel en donde se hospedaba el Duque para esperarlo, hasta que finalmente llego con un rostro impasible, que para el actor fue difícil descifrar si su padre había tenido éxito, causándole ansiedad.

-La señora Marlow acepto el trato-aquello logro sorprender al joven, sin embargo presentía que desde antes aquella señora le preocupaba su situación financiera ya que todas sus esperanzas estaban en el éxito y fama de Susana-La cantidad ofrecida se ajusta adecuadamente a sus necesidades y alguna que otra banalidad-dijo mientras tomaba asiento en uno de los sillones que se encontraba en esa suite-Sin embargo la señorita Susana pidió hablar contigo como única condición-Terry había sentido un hueco en su estómago al escuchar aquella petición, temía que la persona que había arriesgado su vida por él intentara retenerlo en medio de lágrimas, incluso atentar con su vida nuevamente.

-Está bien-acepto mientras intentaba recrear una infinidad de escenarios para lo que le tenía preparado Susana, no obstante, sentía culpa por verla como una amenaza.

Al día siguiente con el nerviosismo latente, se reunió finalmente con la ex actriz, siendo recibido cordialmente por la madre de esta, quien ni siquiera toco el tema de la visita del Duque, parecía conforme y hasta tranquila por aquel trato. Lo llevo hasta la habitación de la rubia para que finalmente pudieran hablar del compromiso que estaba por romperse.

-Hola Susana, buenos días-saludo el castaño al ver la joven en su silla de ruedas enfrente de una mesa.

-Por favor toma asiento Terry-sin contestarle el saludo sonrió levemente pero solo fue cuestión de segundos. El actor al acercarse más, noto el rostro de la joven, se veía seria, tranquila, pero en sus ojos había un vacío, el brillo que había cuando actuaban, ensayaban juntos e incluso cuando siempre lo veía, casi se desvanecía por completo.

-Susana-el remordimiento nuevamente se apoderaba de él, al no ser la joven actriz que él había conocido al entrar a la compañía.

-Solo, por favor, escúchame, sin interrumpir-la rubia respiro hondo para que su voz no saliera entrecortada-No te pedí que vinieras para intentar retenerte, no, sé que en un principio no debí haberlo hecho al haber atentado contra mi vida aquel día, debo de aceptar que estaba enojada, desesperada, asustada, mi vida había cambiado por completo-una lagrima comenzó a surcar su rostro, pero no dejaría que el llanto la interrumpiera-Cuando me cargaste ese día, sentía que eras lo único bueno que me quedaba en la vida, la actuación para mí se había terminado, pero entendí que tenerte a mi lado, de esta manera tan egoísta, nunca conseguiría que fueras feliz, nunca me mirarías como lo hacías con ella-apretó sus labios negándose a pronunciar aquel nombre-No me arrepiento de haberte salvado aquel día, sin embargo, Terry, al quedarte conmigo solo tendría tu lastima y es lo que menos deseo de ti, por eso, ahora no solo te estoy dejando ir, te pido, te suplico, que te vayas-había dicho finalmente y aunque las lágrimas siguieran fluyendo, ella rápidamente las retiro de su rostro-¡Por favor, vete!-dijo en voz alta, pero firme sin mostrarse alterada, logrando que el actor se retirara del lugar, incapaz de decir algo más.

All For You [Una Historia de Candy Candy]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora