Rotten Soul (Jikook)[Adap.]

꧁Capítulo O3.꧂

Jungkook era muy celoso, asique cuando vio a ese chico sonreirle de una manera coqueta a Namjoon lo primero que hizo fue sentarse en medio de los dos, empujando al chico lejos de él.

—¡¿Qué te ocurre?! — gritó el chico.

—Es mi novio. No el tuyo — enrolló sus brazos con el de Namjoon — búscate uno en otra parte.

—Eres un celoso de mierda Jungkook, solo hablábamos de una película. No todos queremos robarte a Namjoon, ten un poco de autoestima y confía en tu puta relación — le gruñó antes de levantarse de la mesa, rodando sus ojos.

Jungkook mordió sus labios con fuerza, limpiando una lagrima que había salido rápidamente. Namjoon acarició su pierna para calmarlo.

—Jungkook, solo olvídalo y concéntrate aquí — le susurró el pelinegro — aquí está tu cliente para esta tarde.

El castaño levantó su mirada, viendo al chico del otro lado de la mesa junto a los demás chicos que ahí se encontraban. Conocía sus rostros, ya se había acostado con ellos.

Namjoon estaba apunto de explicarle como serian las cosas esa tarde, pero un chico de cabello rubio que nunca había visto por ahí se acercó a Jungkook para tocar su hombro. Frunció su ceño y se dirigió hacia él. Jungkook también lo miró con mala gana

—Como ahora me ayudarás a ponerme al día, había pensado en ir a tu casa... 

Namjoon miró a Jungkook con el ceño fruncido, apretando su mano sobre el muslo del castaño. — y bueno. Si no puedes, solo dame tu número para que me ayudes a distancia... — dijo el rubio con una sonrisa.

Su muslo derecho ya estaba doliendo mucho, Jungkook intentó apartar la mano de Namjoon sin éxito alguno.

— ¿Y yo cuando acepté ayudarte? — el castaño alzó una ceja, Jimin hizo un puchero y miró hacia otra parte.

—Bueno... cuando el profesor me dijo que tú me ayudarías pensé que habías aceptado. Además, vi tu ultima calificación. Una "S" no la saca cualquiera, eres muy inteligente. Los demás estudiantes me han comentado que los exámenes de ese profesor son muy difíciles, pero para ti al parecer son como sumar dos mas dos...

Jungkook aflojó su mirada. Nadie le había reconocido sus excelentes calificaciones y del esfuerzo que ponía en cada una de ellas.

— ¿Puedes retirarte? — habló Namjoon, interrumpiéndolo — él no te va a ayudar.

—¿Y tú quien eres? — preguntó Jimin.

Namjoon lo miró unos largos segundos.

—Su novio.

—A-ah perdón — Jimin hizo una reverencia — solo quería...

—Ya he dicho. No te va a ayudar — habló el pelinegro con firmeza.

Jimin permaneció en silencio. Luego miró a Jungkook, buscando una respuesta en él, pero el chico castaño no levantó su cabeza y tampoco dijo nada.

—Está bien. Pediré ayuda en otra parte — el rubio jugó con el borde de su camiseta y luego se alejó de la mesa lentamente, Namjoon se aseguró que el chico se hubiese alejado lo suficiente como para poder hablarle sobre la sesión a Jungkook. Sin embargo, Jungkook no le prestaba atención. Su cabeza seguía reproduciendo el momento en el que Jimin reconocía lo inteligente que era, con esa sonrisa en su rostro...

—Recuerda hacer los preliminares — dijo Namjoon antes de cerrar la puerta de la habitación.

Jungkook volvió a concentrarse. Se la había estado pasando todo el día pensando en Jimin que ni cuenta se dio cuando ya se encontraba en la habitación con su cliente

Jungkook dejó caer un poco su bata, dejando sus hombros al aire. Sonrió travieso.

El chico se acercó a él por detrás, el castaño frotó su trasero contra su entre pierna y luego dejó caer la bata del todo. Mostrando su redondo y firme trasero con sus curvas en sus caderas.

El pelimenta se dio la vuelta para acariciar la nuca del chico y besarle ahí mientras sus manos viajaban por su pecho.

•••

A Jimin se le estaba dificultando todo, pero ahora cualquiera sospecha que tenía de Namjoon se había hecho más fuerte aún.

¿Quién demonios tendría una casa tan cerrada y tan vigilada con cámaras si no esconde algo adentro?

Con su capucha puesta para que su rostro no fuese reconocido, caminó todo el perímetro de la casa, sin encontrar todavía alguna falla, algún punto ciego de las cámaras o un pequeño hueco por donde entrar

Jimin volvió a caminar a su auto para mandarle un mensaje.

"Su casa está muy cerrada. No se si usted lo sabía"

Luego mandó otro mensaje.

"Sospecho mucho de él al igual que usted"

Le dio la tecla enviar, volvió a mirar hacia la casa, debía entrar de alguna forma. Conseguir información o encontrar algo sospechoso. O simplemente, acercarse a Namjoon o Jungkook para entrar en confianza con ellos.

Pero Namjoon parecía ser un chico muy inteligente y detectaría su comportamiento con él si Jimin decide acercarse.  Asi que el rubio optó entonces por acercarse al mismo Jungkook, con quien era más fácil de tratar.

•••

Jungkook y Namjoon habían llegado más temprano a casa a comparación con otros días.

—¡Hola chicos! — saludó su madre dándole un abrazo a los dos — Namjoon, ¿quieres sentarte a comer con nosotros?

Namjoon sonrió:— Claro, no veo porque no.

Los dos tomaron sus puestos y InHa fue por la comida para servirles y colocarles el plato en la mesa. Luego ella se sentó con ellos.

— ¿Y eso que llegaron tan temprano? — preguntó la señora.

—No quisimos llegar tarde de nuevo. ¿Acaso no ha escuchado del asalto a una chica que ocurrió por esta calle? — habló el castaño con un falso tono de voz.

InHa asintió:—Si, si lo escuché. La violencia no tiene horario y mucho menos preferencia...

La señora llevó los palillos a sus labios, masticando su primer bocado y luego levantó su vista justo al cuello de Jungkook.

—¿Qué es eso? — apuntó con sus palillos, Jungkook abrió sus ojos como platos asustado y miró a Namjoon.

InHa miró a Namjoon.

Namjoon le sonrió a Jungkook.

—Sabe que amo mucho a Jungkook, ¿verdad? — la mirada del pelinegro se dirigió hacia InHa — espero que no se moleste conmigo y con su hijo por esto pero... — acarició la nuca del menor.

Jungkook lo miró asustado.

Namjoon sonrio:—Hemos estado teniendo sexo... Sé que debo esperar a casarme con Jungkook para eso, pero simplemente no podemos evitarlo. ¿Verdad bebé?

Jungkook sonrió nervioso, tragó saliva y lentamente miró a su madre con sus mejillas sonrojadas.

—Si... No te enojes ma...

InHa miró a Namjoon por un largo tiempo.

—Bueno... No me molesta... Solo, protéjanse y no abusen... — la señora retomó su comida.

—Entendido madre.

—Y con abusar me refiero a nada de hematomas en mi hijo. ¿Entendido Namjoon?

Namjoon asintió:— Entendido.