Cambiemos la historia | WangXian |

Capitulo 2

Era poco acostumbrado que alguien se acercara al Pabellón de la Biblioteca para revisar como iba castigo de Wei Wuxian, con Lan Wangji vigilandole no tenían de que preocuparse.

 Sin embargo, ese día Lan Qiren le pidió a su sobrino mayor que revisara si todo estaba bien. Es bien sabido que su sobrino menor era su más grande orgullo y no quería que  la personalidad revoltosa del otro joven lo corrompiera.

Lan Xichen se dirigía a su destino, creía que su tío exageraba; en su opinión el discípulo principal de la secta Jiang era un alma alegre, un poco revoltoso, pero sin malicia en su corazón. Era una buena opción para ser amigo de su querido hermano. No le es difícil entender a Lan Wangji, y sabe perfectamente que, a pesar de su expresión seria, disfruta mucho la compañía de aquel joven; lo cual hasta cierto punto le sorprendía, pero se sentía feliz de que su hermano tuviera un amigo.

Finalmente llegó a su destino,  abrió lentamente la puerta evitando hacer ruido, lo ultimo que queria era interrumpir a ambos jovenes. 

- ¿Qué dijiste, Lan Zhan?

- No es nada...

- Mentir está prohibido en los Recesos de la Nubes -- Una de las reglas que se le establecieron tanto a él como a cualquier otro discípulo de la secta GusuLan es ''No escuchar conversaciones ajenas'', sin embargo la conversación que se desarrollaba le llenó de intriga -- Solo dímelo, prometo que no me iré y me quedare contigo, pero dime.

El primer jade observaba como su hermano dudaba, se veía nervioso. Al momento siguiente su rostro se ensombreció un poco y luego se llenó de decisión.

- Lan Zha... mmm - Si no fuera por tantos años practicando y perfeccionando su autocontrol lo más seguro era que hubiese soltado una fuerte exclamación. Lan Xichen no creería que su hermano le robo un beso a Wei Wuxian, mucho menos que fue en el Pabellón de la Biblioteca, no lo hubiera creído de no ser que es el mismo quien lo estaba viendo.

Y lo que menos esperaba era que el otro joven correspondiera a su hermano.

Sin mirar más, salió del lugar lo más rápido que pudo, claro, sin llegar a correr. En su camino se encontró con Lan Qiren y lo que menos quería escuchar en ese momento llegó

- Dime Xichen, ¿Cómo va el castigo de Wei Wuxian?

- Todo va bien, tío - Si bien lo último que quería era mentirle a su tío, esto no contaba como una mentira.

Todo estaba bien, el lugar seguía intacto, no habían peleado y por primera vez el revoltoso discípulo de Yunmeng Jiang permanecía en silencio, aunque no de la forma esperada.

Por supuesto, no iba a decirle todo lo que vió, no diría nada. Primero quería hablar con Lan Wangji al respecto. Después de todo, lo que pase después es su decisión.

Sin hacer más preguntas el maestro Lan se retiró. No sin antes despedirse de su sobrino.

Por su lado, Lan Xichen decidió esperar hasta que el Lan menor saliera del Pabellón de la Biblioteca.

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Luego de que Wei Wuxian se fuera, Lan Wangji reposó su cabeza sobre una de sus manos. No podía creer lo que sucedió, y sumado a eso sentía una enorme felicidad, tanta como para dejar que una leve, casi imperceptible sonrisa se deslizara en sus labios.

Sabía que cambiar el pasado sería difícil, sin embargo estaba decidido. No permitiría que la sonrisa de su amado desapareciera, y aun cuando se necesitara del cultivo demoniaco no le abandonaría.