Falling Blossoms (Heechul y tu)

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Habían pasado 3 meses ya desde que facilitó su número de contacto al señor Womg, se sorprendió al no recibir una llamada de inmediato cuando su asistente entregó su número de teléfono, pero al mismo tiempo estaba agradecido de que fuera de esa manera, realmente no quería tener que llegar al extremo de tener que encontrarse con los mafiosos en persona pero esa gente no aceptaba un no por respuesta y ya les había dado demasiadas largas en ese tiempo. Había solucionado ya gran parte de las irregularidades que los negocios ilícitos que su padre habían dejado detrás de sí, de más estaba decir que aquello había conllevado mover demasiadas influencias y deshacer varias conexiones también así como su respectivo desfalco económico en ambas situaciones.

- ¿Todo bien hijo? Hoy llegaste demasiado temprano.- su madre se asomó desde la cocina.

- Solo quise venir a comer a casa.- respondió sonriendo a su madre. Fingir que todo estaba bien delante de ella y de los demás era agotador, pero era el camino que había decidido por el bien de su familia.

- En unos momentos más.- dijo la mujer mayor con una voz dulce, no sabía que lo causaba a ciencia cierta, pero se daba cuenta del semblante agotado de su hijo menor. - _______(Tn), querida, ¿Podrías ayudarme con la comida?- habló dirigiéndose al cuarto contiguo.

La puerta se abrió dejando ver la figura de la menuda mujer, llevaba puesta una falda cuadriculada y una blusa de cuello alto y mangas largas, la saludo con la cabeza, sin emitir ningún sonido mientras la observaba.

- Buenas tardes.- sonrió y camino hacia la cocina.

Kyung Hoon observó a las mujeres cocinar manteniéndose en completo mutismo, la chica parecía apreciar de manera genuina a su madre, y por su parte, su madre parecía aceptarla como una hija más en lugar de como una trabajadora, la chica se veía más contenta, más viva desde que él habló con su tía.

- ¡Hermano!- la puerta se abrió de nuevo y Heechul prácticamente salto sobre él.

- Hola Hee.- le revolvió el cabello y ambos se sentaron a observar el cielo despejado. Se dejó llevar por la sensación de paz que le proporcionaba la brisa al chocar contra su rostro, su hermano cerró los ojos y dejó que el aire revolviera su cabello, el hizo lo mismo, las risas femeninas llegaron a sus oídos, percibió la melodiosa voz de la menor al platicar con su madre y suspiró una vez más... Aquello era a lo que el podía llamar felicidad.

- Hermano...- murmuró Heechul abriendo lentamente los ojos pero sin fijarlos en el menor, dirigió la vista hacia el árbol de cerezos que yacía a un costado, los capullos de las flores comenzaban a abrirse lentamente.

- Dime.- Kyung Hoon dirigió la mirada hacia el mayor.

- ¿Qué es amor?- pregunto con total inocencia. Su hermano lo observó con más detalle y pudo distinguir un leve sonrojo en su rostro. Se sentía gratamente sorprendido, el lenguaje de su hermano se había desarrollado en los últimos meses.

- Jajaja, ¿Como llegamos a este tipo de conversaciones?- volvió a revólver el cabello de su hermano mayor y sonrió, sintiéndose genuinamente divertido como hace tiempo que no lo hacía. - Amor es, lo que mamá y yo sentimos por ti, te cuidamos, te ayudamos, estamos aquí para ti y queremos lo mejor para ti.- Habló y se sintió como si estuviera tratando de explicar de donde venían los bebés, el no era muy bueno con los temas sentimentales.

- ¿Y _______(Tn)?- pregunto el mayor sin despegar su mirada de los botones de cerezo. - ¿E-Ella me ama?- notó el ligero temblor en la voz del mayor. Ambos se quedaron en silencio.

- Existen muchos tipos de amor Hee.- observó hacia la cocina y vio a la chica asomarse en busca de ellos, la vio sonrier al localizarlos y les informó que podían pasar a comer, Heechul dirigió su mirada hacia la chica y sonrió ampliamente, la observó embelesado, sin ningún rastro de malicia.