—Gracias. Cuando salí de la corte... —continuó— después de escuchar la puta sentencia de mi padre...—hizo una pausa— Me tomé un vuelo directo a Amsterdam y lo primero que hice fue comer hongos—rió con amargura— ¿Sabes qué vi?

Negó con la cabeza a modo de respuesta.

—A ti. Mi mundo se caía a pedazos y lo único que quería era a ti. Entonces... me di cuenta.

—No lo digas—dijo con voz temblorosa.— Detente, Louis.

—Quise volver corriendo hacia ti y gritarte lo m-

—Louis—se levantó y le dio la espalda.

—Nací para ti y tu para mí, Harry—hizo lo mismo que el rizado, poniéndose frente a él.— Y lamento mucho lo que pasó hace seis años, fui un imbécil, un idiota y merezco que me odies—volvió a rascarse ese punto en el antebrazo con desespero.— Pero estamos aquí después de seis años, eso tiene que significar algo.

Parecía que Harry iba a decir algo pero los pasos de alguien acercándose a ellos interrumpieron el momento, Louis volteó a ver a Raphael con un gesto molesto y rodó los ojos.

—¿Harry? ¿Qué haces aquí afuera?—ojeó al alfa, con un poco de desconfianza— ¿Te está molestando?

Louis soltó una carcajada burlona, tan característica de él que le provocó mariposas en el estómago y un sentimiento nostálgico.

—Estamos hablando ¿entiendes el concepto de privacidad?—preguntó burlón mientras se ponía un cigarro entre los labios

—¿Perdona?—caminó hasta quedar frente a Louis, sacándole unos diez centímetros de altura, cosa que no logró intimidar al más bajo

—Tampoco entiendes el concepto de espacio personal ¿no estudiaste espacios en la universidad o algo así?—lo hizo para atrás con el índice y formó una mueca disgustada

—No me toques.

—¿O qué?—alzó la barbilla y sonrió mostrando unos colmillos que el rizado nunca había visto

Harry se congeló al entender el gesto.

—Louis...—dijo al mismo tiempo que el aludido pasaba la punta de su lengua por sus caninos, lo tomó de la muñeca para frenarlo pero sintió un cosquilleo y lo soltó de inmediato

Eso bastó para que el alfa desviara su atención de Raphael y observara confundido a Harry.

—¿Qué...?—atrajo su brazo hacía él y envolvió su propia muñeca sobre el lugar que el rizado había tocado y retrocedió

—Vamos, Harry—Raphael le habló invitándolo a entrar de nuevo, sin saber qué había pasado o qué estaba pasando realmente.

[...]

La gran idea de ir a tomar el "brunch" (Louis seguramente odió eso, pensó Harry) fue de Zayn, a quien seguramente le gustaba ver el mundo arder. Ahí estaban en un restaurante, el moreno con una sonrisa traviesa y su esposo a su lado. Louis parado en la terraza hablando con su asistente (quién mierda es ese y por qué estaba parado tan cerca del alfa) y Raphael sentado en la silla contigua a la suya.

—Así que ¿qué tal las cosas entre ustedes dos?—Zayn puso su barbilla en la palma de su mano— ¿Bien?

—Apenas empezamos, pero creo que... es algo realmente bueno—contesto Raphael con una sonrisa sincera.— Nunca me había sentido así.

Harry observó con discreción a Louis que seguía hablando con el otro omega, se apretaba el puente de la nariz y hacía gestos con la mano, el otro escribía cosas en su iPad y asentía con expresión seria. Después lo vio tocar el brazo del alfa en un intento de calmarlo y el hecho de que Louis no se quitara como lo había hecho con Harry la otra noche le provocó un ardor en el pecho.

—¿Recuerdas, Harry?—asintió distraído y después de unos segundos se concentró en la conversación de la mesa al ver a Louis acercarse por fin

—Lo siento—jaló una silla y se sentó.— Cosas del trabajo.

—Te ves ocupado ¿necesitas irte?—preguntó Raphael con su brazo sobre el respaldo de la silla de Harry

—¿Y perderme esta encantadora reunión?—contestó burlón y Liam sonrió— Ni loco.

—¿John no va a comer con nosotros?—Zayn señaló al asistente que había desaparecido por la puerta

—Es vegetariano, revisé el menu y no hay nada que pueda comer—se encogió de hombros.— Me dijo que va a ir a una cafetería.

—¿Son algo?—Raphael alzó una ceja interrogante y Louis bufó

—¿Qué te importa si me follo a mi asistente o no?

—¿Lo haces?—Harry se inclinó hacia adelante esperando una respuesta y se lamió los labios cuando Louis se tensó

—¿Y tú?—le echó una mirada rápida a Raphael

No como a ti.

—Uhm...—el aludido frunció el ceño confundido e incómodo

—¿Alguna vez han ido a Italia?—interrumpió Zayn

Harry no pasó por alto la mirada alarmada que Louis le dirigió a su mejor amigo, tampoco ignoró la travesura en el tono de voz en el que el omega hablaba.

—¿Quieren ir? Louis paga—batió sus pestañas y el ojiazul tatuado gruñó.— En dos semanas nos vamos ¿qué dicen?

—Yo puedo pagar por lo mío—dijo Raphael con la mirada puesta en el alfa frente a él.

Una mesera se acercó con la cuenta y la dejó en medio, casi de inmediato, Louis sacó su billetera y puso una tarjeta de American Express completamente negra (el beta se sonrojó un poco, su propia tarjeta plateado casi le quemó el bolsillo y supo que el hombre lo estaba haciendo a propósito).

—Tomen esto como un... perdón por mi comportamiento de ayer—se dirigió a la pareja, pero Harry no sabía qué decir.— Me porté como un idiota.

—¿Eres así de rico? ¿Puedes solo pagar un viaje así?—pareció como si Raphael se hubiera arrepentido inmediatamente de decir aquello en cuanto salió de su boca por la forma en la que apretó sus labios

—No lo estaría ofreciendo de no ser así—sonrió ampliamente y tomó el recibo que la mesera le tendía junto al pedazo de plástico oscuro— Bueno, me voy. Nos vemos en dos semanas, adiós a todos.

Harry quiso apartar la vista, trató de despegar sus ojos de la silueta de Louis mientras se alejaba pero le fue imposible.

—¿No puede pedir perdón como una persona normal?—escuchó murmurar a su nuevo novio

Y el rizado deseó que fuera así.

—Una vez le regaló un pez y un montón de estupideces a un chico para que lo perdonara—comentó Zayn y luego bebió de su café.— Dijo que era imposible decirle que no cuando se veía así de ridículo con ese estúpido pez.

—Es un poco idiota ¿no lo crees?

—Es Louis—contestó con simpleza, como si eso respondiera a la pregunta de Raphael. Aunque más tarde lo lamentaría, pues se supone que ellos no se conocían.

En la mente de Harry, esa era una respuesta bastante completa para todo.

Es Louis.

Fire On Fire [larry stylinson]Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora