013.

32.4K 3.8K 8.4K
                                    

! Esta historia contiene temas de drogas, el abuso de ellas, violencia familiar y lenguaje homofóbico.

n/a: solo para recordarles que harry se ve así ^^en la fic :) sufran conmigo por su belleza

—&—

Louis revisó la hora en su celular y vio que faltaba todavía unos buenos cuarenta minutos antes del partido, aunque los visitantes estaban comenzando a llenar las gradas, notó. El coach Dallas estaba en su oficina y eso le daba al Alfa unos quince minutos de descanso antes del juego.

—¡Loueh!—Liam le dio unas palmadas en la espalda a modo de saludo

—Hey—Zayn le dio un corto abrazo.

—¿Qué hacen aquí? Falta mucho para que empiece.

—Queremos buenos lugares—su mejor amigo se encogió de hombros.— Además tengo que asegurarme de que cumplas con el plan.

—¿Hoy? ¿Cómo ahora?—Zayn rodó los ojos y asintió— ¿Y si dice que no?

—Es un partido y seguramente su amigo el rubio también vendrá. Corre, tienes como diez minutos para decirle.

Louis asintió con la cabeza y comenzó a trotar hacia el Starbucks (el cual por ser día de juego, cerraba un poco más tarde) y abrió la puerta dirigiéndose a la caja.

—¿Quieres venir a mi partido? Empieza como en... ¿30? o algo así—hizo una mueca de lado.

Harry frunció el ceño y suspiró, dejando el trapo con el que estaba limpiando las máquinas y se giró hacía el chico. Habían dos clientes más en el lugar y todos estaban al pendiente de la respuesta. La reacción del ojiverde fue inesperada, le echó una mirada de arriba a abajo y se mordió el labio inferior por unos segundos.

¡Es el uniforme!

Louis sonrió casi arrogante cuando su Alfa llegó a aquella conclusión. Harry puso sus manos sobre el mostrador y se inclinó hacia adelante.

—No.

Mierda.

—Joder, Harry ¿qué tengo que hacer para que salgas conmigo?—se revolvió el pelo con las manos y dio unos pasos adelante, provocando que la única separación entre el omega y él sea el estúpido mostrador

—Odio el fútbol y me parece terrible primera cita, pero puedes recogerme cuando se termine.

—Oh.

—¿No se te hace tarde?—le mostró el reloj digital que tenían en la pared y Louis se preocupó un poco (pero tenia asuntos más importantes que atender)

—¿En dónde te recojo?

—En mi casa, duh. Querías algo a la antigua ¿no? Tienes que pedirle permiso a mi padre—se echó para atrás, recargándose en una de las máquinas (muy responsable de su parte) y se cruzó de brazos

—¿Qué?

—Lo que escuchaste, Tomlinson. Ahora vete.

—No tengo tu número.

—Consíguelo—sonrió ampliamente y casi con malicia.— Ah y suerte.

Louis revisó una vez más la hora y maldijo en voz alta cuando vio que faltaban veinte minutos para que empezara (¡y ni si quiera ha calentado!). Con una adrenalina impresionante corrió hasta los vestidores y se puso con rapidez el equipo, luego, a trompicones llegó a las canchas y se mezcló con sus compañeros lo mejor que pudo. Notó varias cejas alzadas, sin embargo nadie le dijo nada.

Fire On Fire [larry stylinson]Where stories live. Discover now