30 | Tears.

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| Lágrimas.

↪Capítulo SooKai↩

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Capítulo SooKai↩












































S-SooBin... —gimió Hueningkai con los nudillos blancos aferrándose a las sábanas blancas que cubrían el colchón de su cama, estaba sudado, las lágrimas se deslizaban por sus mejillas.

SooBin por su parte lo desvestía lentamente, con mucha paciencia acariciando cada centímetro de piel que descubría provocando pequeños escalofríos en la piel de su novio.

— ¿P-Por qué yo? —preguntó Kai una vez que estaba desnudo de la cintura para abajo. Empujó a SooBin para acomodarse sobre él, juntó sus labios de manera necesitada, presionando con fuerza y rapidez provocando pequeños sonidos húmedos cada cuánto provocados por la saliva y sus labios.

— Porque así lo quiero, ni sueñes que me la meterás otra vez —dijo con una risa. Con mejillas sonrojadas Hueningkai escondió el rostro en el cuello del otro dando pequeños besos mientras sus caderas hacían un lento vaivén sobre el miembro semi-erecto de SooBin.

Esa noche no dormiría, cuando SooBin lo decía era bastante en serio. Estaba ansioso, hasta sus dedos de los pies se curvaban con el más mínimo roce de su novio, pero sabía que esa noche terminaría sobre estimulado rogando porque lo dejara descansar, porque lo dejara dormir sobre su pecho como aquellas noches que ya habían pasado juntos.

Los dedos de SooBin le quitaron la camiseta rompiéndola sobre el pecho, Kai ladeó la cabeza con algo de vergüenza mordiendo su labio inferior, el mayor sonrió y luego dejó un beso húmedo en el cuello del menor.

— Nadie ha tocado a mi bebé, ¿no es así? —cuestionó, la piel de Hueningkai estaba pálida como era comúnmente, no había ninguna marca, ningún aruño, nada; estaba completamente blanca, hasta las marcas que SooBin a veces solo le hacía por diversión habían desaparecido.

Porque a pesar de lo que había pasado; Hueningkai solo disfrutaba de las marcas de SooBin, se había dado cuenta cuando habían terminado, ahora que lo tenía otra vez no lo dejaría ir.

— ¿Te has acostado con alguien más? —preguntó llevando ambas manos hacia las nalgas del más pequeño apretándolas hasta que éste gimió y sus dedos quedaron suavemente marcados.

— N-No —sincero bajó la cabeza con otra lágrima deslizándose por su mejilla, sus dedos se hundían en los hombros de SooBin dejándolos marcados.

— ¿Por qué lloras? —cuestionó tomando delicadamente el rostro del menor limpiándole las lágrimas con las yemas de sus dedos, de manera tranquila con una mirada comprensiva. Hueningkai alzó la mirada, apretando sus labios para callar sus lloriqueos.

My mind lies [◇] YeonGyu.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora