My mind lies [◇] YeonGyu.

20 | Smile.

| Sonrisa.

Ese día había decidido llegar temprano al hospital de TaeHyung, así tendría tiempo para hablar con él. Esperaba que tuviera tiempo en su agenda para llevar el control de mi embarazo, él era como una figura paterna que hace años perdí, a veces me daba risa cuando me regañaba, realmente hacia bien su rol, creo que es por la práctica con sus pequeños y HoSeok.

Dejé mis cosas en el perchero de la sala personal, nadie me robaría nada. Es lo bueno de aquí: todos nos tenemos confianza y por si acaso HoSeok había colocado cámaras de seguridad por todo el hospital, pero eso también era una orden del gobierno para todos los centros de salud física, mental, públicos o privados. Se habían visto muchos casos en los cuales los pacientes eran maltratados por el personal: justo como había pasado con YeonJun, por consecuencia del número de demandas se impuso esa ley. Cada tanto tiempo viene un supervisor a checar desde los regímenes de salubridad así como las cámaras de seguridad.

Como todos en esta ciudad sabían; la clínica Kim era una de las mejores que existían, no teníamos ese tipo de problemas gracias a lo perfeccionistas que son ambos fundadores. Los únicos problemas que teníamos algunas veces es cuando HoSeok rompía por accidente los tubitos de sangre o alguno que otro medicamento, pero limpiábamos todo antes de que TaeHyung se enterara o nos pegaría; a él por no tener cuidado y a SooBin, Hueningkai y a mí por encubrirlo.

Estaba sentado esperando en la oficina de TaeHyung. Estaba aburrido hasta que la puerta se abrió a los minutos después, pero no era TaeHyung si no HoSeok con expresión algo cansada, había ojeras debajo de sus ojos, no se veía exactamente bien.

— ¿Paso algo, appa HoSeok? —pregunté abultando mis labios con levedad. Él rió un poco por la manera en que lo llame, solía hacerlo algunas veces, sobre todo cuando quería hacerlo reír.

Lo vi sentarse tras el escritorio de TaeHyung un poco cansado, se rascó los ojos antes de sacar unos archivos de su portafolio.

— Desde hace un par de días JiMin contrajo un virus en el jardín de niños —empezó diciendo un poco cansado, parpadeaba para mantener la atención a los papeles que tenía en sus manos— pero RyuJin se contagió ayer, ella es más pequeña y no paraba de llorar por el malestar. TaeHyung y yo pasamos la noche en vela, él la cuidaba a ella mientras yo de JiMin, él no vendrá hoy, sabes lo cuidadoso que es, no dejará que cualquiera cuide a nuestros bebés —sí, tenía mucha razón. TaeHyung no dejaría a sus niños con cualquier persona.

— Ha de ser horrible —murmuré, pero algo dentro de mí se estremeció porque yo ya tenía un bebé en mi interior. Sin duda tendría que pasar por esos momentos.

— Es una de las partes feas de ser padres —dijo con una sonrisa de lado. No todo podía ser tan malo al ser padres, muchos dicen que es lo peor que le puede pasar en la vida mientras que otros aman cada parte de eso. HoSeok era de esos qué amaba ser padre, pero que algunas veces reconoce que no es tan bueno como lo pintan— ya te tocará saberlo —habló con una enorme sonrisa.