dieciséis

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ALGUNOS HUÉSPEDES que se cruzaban con el grupo los miraban con curiosidad, curiosidad que se iba al ver las miradas que Natsuki y Terasaka les daban. Ahora Isogai llevaba a Karasuma, ya que Natsuki había tomado el papel de líder junto a Karma, que no se había separado de su lado ni un segundo. Al llegar a una esquina Natsuki paró a todo el grupo y asomó la cabeza.

— No me jodas.— Susurró,— podemos ir olvidándonos del factor sorpresa y la ventaja numérica, Karasuma...

Todos miraban al asesino en silencio total, por eso cuando el hombre rompió una vidriera con su mano, todos retrocedieron un paso.

— Que rollo, nu. Por lo que deduzco de vuestros pasos, ninguno de vosotros está a mi altura, nu.— Natsuki alzó una ceja sintiéndose ofendida.— Se suponía que os acompañaría una especie de profesor de las fuerzas de élite, nu. Supongo que Smoog debe de haberlo intoxicado con gas. Vamos, salid, nu.

Natsuki salió de su escondite mientras escuchaba como sus amigos le pedían que no lo hiciese:—Vas a tener que conformarte conmigo.— El rubio la miró y sonrió con superioridad.— ¿O acaso tienes miedo de que vuelva a patearte el culo?— Sus amigos estaban realmente confundidos, ¿De qué se conocían? Salieron de su escondite y se pusieron tras Natsuki.

— Nat, ¿lo conoces?— Preguntó Nagisa frunciendo el ceño comenzaba a sentir que Natsuki le había ocultado cosas. Natsuki asintió sin mirarlo.

— Nos hemos encontrado un par de veces.— Karasuma ni siquiera se molestaba en regañarla, ambos sabían que había llegado el momento.

— Colega, acabas todo con nu.— Comentó Karma abriéndose paso entre sus compañeros. Natsuki sonrió divertida pero no bajó la guardia, Karma la miró unos segundos y sonrió al ver como ella lo hacía.

— Tengo entendido que se trata de un tic lingüístico de los samurái, nu. Me gusta como suena, así que lo he adoptado, nu.

Comenzó a tronar sus dedos preparándose para pelear:— A le mejor me equivoco, pero da lo mismo, nu. Después de que os mate a todos no quedarán testigos de que lo haya usado.

El ambiente volvió a tornarse serio mientras Natsuki lo analizaba, al contrario de la primera vez que se lo había encontrado no portaba ninguna clase de arma visible, únicamente sus manos desnudas. Si el hombre era peligroso con armas ¿Qué era capaz de hacer sin ella?

— ¿Pelearás con las manos desnudas?

— A la hora de controles de seguridad son una ventaja, nu. Me acerco a mis objetivos y les parto el cuello, o si lo prefiero les aplasto el cráneo.— Explicó el asesino actuando con sus manos a medida que hablaba.— ¿Divertido, no os parece?

— Como un buen chiste.

— Cuanto más desarrollas tu fuerza para asesinar a gente, más necesidad tienes de probarla para otras cosas. Concretamente para luchar.— Respondió posando su mirada en Karasuma, que lo miraba agarrando a Isogai intentando no caerse al suelo por el gas.— Pero que decepción, nu. Vistos mis adversarios he perdido mis ganas de luchar, nu.— Rebuscó entre los bolsillos de su gabardina y unos segundos después sacó un walkie-talkie.— Es un rollo matar a tanta escoria humana uno solo. Les diré a mi jefe y a mi colega que os maten ellos.

Pero antes de que pudiera comunicarse con el walkie-talkie Karma golpeó su mano con una maceta, mandando el aparato contra la ventana y rompiéndolo al instante.

— ¡Eh colega nu!— Natsuki frunció el ceño nerviosa al no saber lo que pasaría a continuación.— Pareces muy normalito para ser un profesional, yo también puedo romper cristales y aplastar cráneos, pero si lo primero que haces es llamar a los refuerzos, a lo mejor lo que pasa es que temer enfrentarte a un alumno de secundaria.

hit and run ▭ karma akabaneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora