¿Gay?

J&L- Tanto. Tanto. Tanto...

Casa de Jeremy. Jueves tarde, 18:47. Primera quedada.

- ¿Por qué dices esas cosas?

- ¿Qué cosas?

Luca rió. Le gustaba oír hablar al chico del pelo rizado. Su voz era tranquilizadora, igual que su tono, calmado, y su forma de expresarse, tan exacto, preciso. Simplemente su manera le gustaba. A Luca le gustaba ese chico.

- No sé. En clase. Te pones rojo y dices cosas sobre mierda de animales.- Luca recordó la expresión exacta del momento en el que toda la clase se empezó a reír y Jeremy le miró directo a los ojos, tragando saliva incómodo. Luca solo sonreía y ahí cree que lo supo.

<¿No soy hetero? Ostia. ¿Gay? Vale, es guapo. Voy a dejar de mirarle, joder. O no. Vale ha dejado de mirar él. Ahora yo... Es que está guapo así avergonzado. Bueno, ¿cómo se llamaba igualmente?>

Luca lo supo. Desde ese pensamiento y al averiguar su nombre al final de clase cuando se sentó a su lado para hacer aquel trabajo juntos. Ya había aceptado ser el compañero de Irene, pero ella tenía muchas amigas en clase, seguro que alguna encontraría como reemplazo. Y Jeremy parecía estar siempre tan solo que porqué no.

Desde ese momento ya no hubo vuelta atrás porque no volvió a ver a Jeremy neutral, como uno más.

<Que marrón. ¿Cómo le digo ahora a Alex que soy bisexual? Seré bisexual, ¿no? ¿Y a Al? Joder, que marrón, que vergüenza.>

Luca pensó y pensó. Y llegó hasta un pensamiento, ahí sonrió. Al pensar en su madre sonrió.

<A mi familia le encantaría verme con un tío, ya se conforman con que les presente a cualquiera con tal de no ocultarles que tengo pareja. Joder, es que es muy guapo. Deja de mirar Luca, por dios.>

Y Luca dejó de mirar. Solo esperó a ir esa tarde a su casa a hacer el trabajo. Pero no pudo porque Jeremy tenía que avisar y era muy precipitado. Así que espero una semana entera y aquel día por la tarde le miró bien. Y se rieron mucho. Y Jeremy descubrió que Luca le ponía nervioso pero de una buena manera, tal vez de una muy buena manera. Muy, muy...

(...)

- No es que diga siempre datos poco concurridos en las conversaciones, como sobre la... caca. No lo hago. Es que me...- tragó saliva.- me relaciono un tanto... no es relacionarse, porque ni si quiera lo intento... pero es más...

- Que no te sale, ¿no? Hablar con gente y variados.

- Eso.

Jeremy soltó la respiración que llevaba aguantando al estar pensando tanto en tan poco. Y sonrió mirando a Luca. Se quedaba casi fascinado mirándolo porque el chico era guapísimo. No la clase de chico convencional de instituto, ni si quiera de revista o de modelaje. Luca era simplemente único en su campo. El campo de lo bello. Así lo llamó Jeremy. Y se rió. A lo mejor sentía efectos del Jack Daniels.

No debía haber visto aquel vídeo sobre socializar, ni debería haber leído los comentarios del vídeo. Ni debería haberle hecho caso al que ponía que se bebiera algo de alcohol y acabara con la tontería de la timidez de una. Jeremy solo tenía ron en su casa y un chupito le había sentado mal. El segundo mejor y el tercero lo había escupido. El caso es que supo que no le hacia falta haber hecho eso cuando empezó a saber que podía hablar con él con una facilidad casi irreal y comenzó a descubrir cómo era Luca. Simple, no hablaba de nada en específico pero hablaba de todo en particular, era como una personalidad muy amoldable. Y Jeremy también se amoldaba a todo menos a que le mirara tanto a los ojos, tan fijamente, directo, sin cortar contacto visual, sin coartarse nada.