¿Gay?

#31 - Terapeuta sentimental (1° parte)

LUCA

(1 día antes de la fiesta)

- última oportunidad para decirme que sí.

- Lo siento Luck. No puedo.- dijo Jeremy sentándose en el banco conmigo después de haber ido a tirar el envoltorio del bocadillo que se había comido y yo me había acabado. En mi defensa diré que él no quería más y me suplicó que me lo comiera. O tal vez solo me lo ofreció amablemente.

- Ya.- dije quitando la sonrisa que había puesto para converncer a J de que se escapara de casa.- Pero, solo digo que tu madre no tendría porqué enterarse...

- Ya lo hemos hablado. Me encantaría poder ser como tú y escaparme de casa sin un mínimo remordimiento en mi conciencia. Pero no puedo, además, mi padre estará despierto, los viernes llega de trabajar más cansado, e irónicamente se va a dormir más tarde. Se queda en el salón viendo la tele y tendría que pasar por delante de él. No puedo. Es una respuesta definitiva.

- Si tu padre se queda dormido en el sillón. Yo he salido muchos viernes por ahí, por delante de él y no se ha enterado.

- Yo soy más torpe. Seguro que golpeo un mueble o algo.

- Pero si ya lo has hecho otras veces, no es tan difícil.

- No para una fiesta. No es lo mismo.- dijo como decimocuarto excusa y zanjé el tema porque no quería seguir con ello.- Pero, ¿por qué tanta insistencia en que vaya a esa fiesta? Te he prometido...

- que vendrás a la próxima, sí, te he oído.- dije aparentemente molesto rodando los ojos.

- Lo siento, de verdad.

- Tranquilo. Supongo que tendrá que esperar.- Jeremy puso cara de confusión y suspiré rápidamente- Lo que te tenía que decir, sobre mi distanciamiento y todo eso...

- Ah sí. No era importante ¿no? Porque me lo puedes decir ahora si quieres.

Supuse que se había referido a que si fuera tan importante y no una tontería, como le había dicho que era, ya se lo habría contado, pero me dolió el comentario ya que para mí era importante decirle de una vez por todas que me gustaba.

- No. Te lo diré en la próxima fiesta. Supongo que no era tan importante.- dije con la voz y la vista baja. Subí mis ojos para ver la mirada culpable de Jeremy.- Y no vuelvas a decir que lo sientes. Da igual.

- Soy un amigo horrible.- el timbre sonó mientras Jeremy hablaba y yo sonreía por la cara de inocencia que ponía.- y encima llego tarde a clase. También soy un alumno horrible.

Empezó a cerrar el bolsillo de su mochila y a ponersela a la espalda dispuesto a irse a clase, como debería hacer yo.

- Eres un empollón. Y un gran amigo.

- con un terrible miedo a su padre.- añadió él serio, pero luego intentó hacerme cosquilla y acabé riendo junto a él.- ¿vienes?

- No. Me voy a quedar un rato.- dije mirándole mientras me tapaba el sol que me daba de cara con una mano.

- Vale, pues supongo que nos vemos.

- Sí, ya nos vemos por ahí.

Jeremy asintió y se levantó del banco dejándome solo y ofreciéndome una última sonrisa. Suspiré cerrando los ojos cuando él se fue corriendo y los volví a abrir al escuchar un grito proveniente de mi espalda.

- ¡Luck! ¿esta tarde quieres venir a jugar a videojuegos? O podemos ver alguna serie, o lo que quieras...

- Tengo planes, pero gracias.