¿Gay?

#29 - Ni una palabra ninguno de los dos

LUCA (el de la foto)

- Adri.- llamé abriendo la puerta de su habitación. Fruncí el ceño cuando entré y la vi en el suelo haciendo una postura extraña con los ojos cerrados.- ¿Qué haces?

Observé como se movía pausadamente y abría los ojos mirándome de reojo ya que estaba de perfil a la puerta.

- Yoga- contestó con mucha tranquilidad y se levantó estirando sus brazos hacia arriba.- ¿qué quieres?

- Vale- alargué las vocales y entré completamente a su habitación porque me había quedado observando desde la puerta.- tú sabías imitar la firma de papá muy bien ¿no?

Adri me ignoró durante unos segundos en los que solo la vi hacer una mínima sonrisa, hasta que bajó los brazos, volvió a abrir los ojos y me miró.

- Sí. ¿Qué es?- se acercó a mí y le tendí el papel en el que ponía mis faltas de asistencia a clase constantes.- Sigues saltándote clases.

Noté su tono relajado y sin pizca de reproche, me gustaba que estuviera tan relajada porque hoy había sido un día bastante extraño y duro. Quedar con Jeremy en el fondo no había sido tan buena idea como había pensado. Le había echado tanto de menos que hasta tenía miedo de que pudiera notar lo feliz que estaba de volver a hablar con él. Tan feliz que se me había pasado completamente el enfado que sentía. Aunque los celos seguían ahí, y el dolor de la (supuesta) traición también.

- Solo cuando me agobio y alguna que otra vez más, lo admito. Pero ya no importa, dentro de pocos meses salgo de ese instituto para siempre.

Adriana encogió de hombros mientras me miraba fantasear sobre mi futura libertad y se dirigió a su escritorio, que estaba lleno de papeles desordenados, y me firmó mi papel. Mi hermana vivía en el caos absoluto, pero dentro de él, ella se organizaba a su manera, ese era su estilo. Me acerqué a ella para cogerlo y me apoyé en la mesa mientras ella estaba sentada en la silla.

- No veo lógico que os sigan dando notitas de estas como si fuerais niños.

- No lo es, pero bueno- me encogí de hombros.- Por cierto, ¿desde cuándo haces yoga?

- No sé, me relaja. Me lo recomendó Livia. Y te noto tenso Lucki, deberías probarlo.

- No sé si sabría relajarme tanto. En fin, gracias.

- Espera- dijo Adri cuando me dirigía a la salida. Me giré para encararla.- ¿te has enfadado con Alex?

Suspiré bajando mis hombros, había pensado que esta situación llegaría tarde o temprano, pero seguía dándome pereza no saber qué contestar a esa pregunta. Porque me la había hecho muchas veces desde el día en el que me enfadé, pero ¿lo seguía estando? ¿O solo eran celos injustificados?

- Es una larga historia- me limité a contestar y ella frunció el ceño.

- ¿Estás bien?

Asentí con la cabeza y me dirigí a la salida pero giré una última vez para mirar a Adri.

- Gracias otra vez.- dije y cerré la puerta. Lo último que vi de ella fue la sonrisa tierna que me puso. No me había insistido. Y había acabado siendo mejor de lo que había pensado. Porque si Adriana me veía mal era muy pesada tratando de averiguar porque, era lógico era mi hermana y estábamos muy unidos. Aún así agradecí inmensamente que hoy lo dejara pasar.

Por ahora, lo único que pasaba por mi cabeza era si Jeremy aceptaría venir a la fiesta a la que le había invitado. Y eso significaría que no más excusas.

(...)

JEREMY

Acabé el cuarto dibujo de Luca que hacía esta semana. Estaba intentando plasmar la mirada que había puesto la última vez que fuimos a la biblioteca. Justo hacía casi dos días. Fue una mirada misteriosa pero sincera, y me causó mucha intriga.