CAPITULO 68: En Coma

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Después de dos días sin saber lo que estaba pasando Ana, finalmente el doctor por fin tomo el coraje dar la cara, pero por su expresión sabia que no eran buenas noticias, todos nos pusimos de pie una vez que este hizo un extraño sonido con su garganta


-familiares de la señorita jones- Dijo el doctor pasando la mirada por todos


- soy su abuela- Dijo doña Arabia acariciando la pequeña cabeza de el pequeño David


- hicimos todo lo posible para que estuviera estable y...- No me digan que ha muerto porque es el colmo, todo el bello de mi cuerpo se erizo y mis manos empezaron a temblar- la chica entro en estado de coma- Todo mi mundo se cayo en pedazo- creo que fue por la reacción que tuvo al ver a las dos personas que consideraba muerta, le dio un pequeño infarto haciendo que cayera inconsciente hicimos todo lo posible para mantenerla con vida pero fue lo único que pudimos lograr

-¿Cuánto tardara en despertar?- Dijo después de segundo de silencio Luke

- nose sabe pero lo mas que puede tardar en unos dos días o tal vez en una horas- Dijo el doctor mirando el reloj de su muñequera

- ¿podemos verla?- Dije inquieto

- esperen un par de minutos que la instalen en una habitación allí podrán verla- Dijo con una sonrisa- con permiso

- bueno- Dijimos todos al mismo tiempo


Narra Anastasia Jones:

Me sentía como si me hubiera muerto ya que me pellizcaba y no sentía absolutamente nada.

-hola cariño... no estas muerta- Dijeron a mis espaldas, pero podía reconocer esa voz en cualquier parte

-¿mama?- Dije entre alivio y emoción

- ven cariño- Me voltee y allí se encontraba ella, tal cual como la conocía, su cabello brillaba al igual que sus ojos, corrí hacia ella y ella me estrecho en su pecho- ¿Cómo pudiste creer que te quitaría a las pocas personas que tenias?- Dijo asiéndose la ofendida, yo solté una risita

- lo siento... es que pensé que...

- no pensaste nada jovencita- Dijo regañándome de forma divertida, para tomar mi mano y entramos a la clínica en donde yo me encontraba, empezamos a recorrer los pasillo y entramos a la habitación en donde me encontraba yo allí conectada a un sin numero de aparatos, mi piel lucia mas pálida de lo normal al igual que mis labios y allí estaba Sam sujetando mi mano mientras dormida en el asiento recostado de su antebrazo, mire el reloj y eran las 2:30 am, una lagrima se deslizo por mi mejilla, no me merezco a Sam, el es demasiado bueno para mi- No pienses estupideces Ana... ambos se merecen el uno al otro- Dijo mirándome por el rabillo del ojo

- ¿Cómo lo sabes?

- Dios no une a dos personas que están destinadas a estar juntas y muchos menos que sigan aun sabiendo por lo que haz pasado... ese chico daría la vida por ti... pero Ana ¿tu lo quieres enserio?- Dijo yo guarde un par se segundos de silencio

- mamá yo- Dije negando con la cabeza- lo amo demasiado- Dije y ambos nos sorprendimos por esa palabra tan grande que ha salido de mis labios, haciendo que ella me mirada con una sonrisa en sus labios

- creo que ya no me necesitas cariño... pero te estaré cuidando desde allá arriba ya que aquí tienes tu propio ángel guardián- Dijo acariciando el cabello de Sam, para depositar un beso en su coronilla, acaricio mi mejilla para besar mi frente- estoy orgullosa de ti cariño... te amo

- también yo mamá- Dije para verla desaparecer, me quede mirando hacia la nada un par de segundos- eres demasiado sabio- Dije mirando hacia arriba con una sonrisa plantada en mis labios- gracias por todo, mire el reloj y eran las 5:50 am, ¿Cómo rayos se fue el tiempo de rápido?

Me acerque a mi cuerpo e iba a tomar mi mano cuando este me absorbió por completo, después pude sentir un leve apretón en mi mano izquierda para estar consciente de los molestos pitidos de la maquina donde indicaba los latidos de mi corazón, abrí lentamente mis ojos para ver como los primeros rayos de sol se asomaban por la cortina haciendo que el color de cabello de Sam se viera mas claro, me quede viendo sus facciones que estaba relajadas, se veía mas joven durmiendo y las ojeras ya estaban desapareciendo, se veía tan condenadamente lindo que provocaba quedarme siempre observándolo, mis pensamiento fueron interrumpidos cuando una molesta comezón se apodero de mi nariz, intente sacar mi mano del agarre de Sam pero este me la sujeto fuertemente.

-NADIE SE LA LLEVA PORQUE...- Se despertó alterado mientras su respiración era agitada haciendo que frunciera mis labios, luego el miro hacia donde tenia miraba de incredibilidad

- ¿te importaría prestarme mi brazo? Me pica mi nariz- El obedeció sin apartar la mirada de mi, una vez que me rasque y quede satisfecha este me estrecho en su pecho mientras soltaba un pequeño sollozo, tome su rostro en mis manos para deshacerme de esas lagrimas de esos hermosos ojos azules

- Dios Ana pensé que te perdería y yo...- Dijo dolido, yo atrape sus labios como si mi vida dependiera de ello

- Sam... te amo- Dije con una sonrisa en mis labios, el quedo procesando lo que dije para luego atacar mis labios y besar toda mi cara para separase con una gran sonrisa en sus labios y sus ojos brillando como nunca

- Dios Ana... también te amo- Dijo para acariciar mi mejilla y pesar cortamente mis labios haciéndome reír como una estúpida enamorada

Perder para GanarWhere stories live. Discover now