Perder para Ganar

CAPITULO 56: Paseo Y Angel

Mire el reloj y eran las 4:30 pm, deje de acariciarle el cabello a Sam que este soltó un bufido de protesta y me tomo de la muñeca y volvió a ponerla en su cabeza para que siguiera acariciándole.

-no mas Sam estoy aburrida- Dije quitándola perezosamente

- y ¿Qué quieres que haga?- Dijo soltando un bostezo

- nose vamos al parque o comamos un helado- Dije como niña con un puchero en mi rostro, Sam abrió los ojos en ese momento y frunció el ceño para mirarme con ternura y finalizar copiando mi chistoso puchero- por favor

- ¿la niña quiere ir al parque?- Dijo con voz melosa mientras se acercaba a mi cara provocando que las maldita mariposas emprendiera su vuelo

- si- Dije con el mismo puchero, el pego nuestros labios en un tierno beso que solo duro unos 20 o 30 segundos aproximadamente, para después dar un corto beso en mi frente

- esta bien princesa vamos- Dijo saltando de la cama para ayudarme a levantar y salimos de mi casa para empezar a recorrer las calles con bromas

Pasamos una cuadra cuando un grupo de chicos montando patineta pasaron por nuestro lado, uno que otro se quedo mirándome provocando que bajara la mirada a mis zapatos algo avergonzada, Sam soltó un leve gruñido para entrelazar su mano con la mía y apegarme más a su cuerpo. Rodee los ojos divertida, volvió el Sam posesivo y celoso.

Entramos a la tienda en donde compramos un par de donas y dos capuchinos helados, nos dirigimos al parque en donde empezamos a reírnos por los malos chistes que me decía Sam, es pésimo en eso. En ese momento una niña aproximadamente de seis o siete años se cayo casi en mis pies, yo la ayude la levantarla mientras ella se limpiaba los raspones

-¿estas bien cariño?- Dije acariciando sus rizos dorados que caía en sus delicados hombros

- si- Dijo ella con sus mejillas sonrojadas, no se si era por la vergüenza o por el simple hecho de que ella estaba corriendo

- ¿Cómo te llamas?- Dije acariciando su mejilla mientras le brindaba una de mis mas sinceras sonrisas

- me llamo Ana- dijo con una sonrisita que podía ver un pequeño espacio donde se supone que allí debía haber un diente, pero parece que lo ha mudado

- ¿enserio? Yo también me llamo Ana- Dije divertida ella soltó una risita, para dirigir su mirada a mi brazo donde se encontraba completamente descubiertas mis cicatrices lo que hizo que todos mis músculos se tensaran, ella se quedo observándolas por una largo rato para luego pasar su pequeño dedo índice por ellas haciendo que me estremeciera

- eres un ángel- Dijo en susurro

- ¿Qué dijiste?- Dije extrañada

- que…Eres un ángel- Dijo mas fuerte mirándome con ojos esperanzados- las personas que se lastiman son Ángeles que Dios trajo a nuestro mundo para ayudar a los seres humanos, pero estos le hicieron tanto daño que ellos decidieron cortar su piel para no cortar la ajena, estos lo usan con el fin de volver a casa, por eso lo hacen a tal extremo de que no pueden aguantar mas y finalmente logran lo que se propusieron… volver a casa

- ¿Quién te dijo eso pequeña?- Dije asombrada y extrañada al mismo tiempo

- mi mamá

- tu mamá es muy sabia- Dije mirando por el rabillo del ojo a Sam quien miraba atentamente a la pequeña, como si temiera perderse de algo

- si lo era… ella también es un Ángel a diferencia de que ella ya volvió a casa- Dijo mirando hacia el cielo con una pequeña sonrisa dibujada en su rostro, una gran nostalgia se apodero de mi y lo único que pude hacer fue estrecharla a mi pecho mientras una rebelde lagrima salía por mi ojo derecho

- mamá también regreso a casa- Susurre en su pequeña oreja, ella asintió con la cabeza para pasar sus pequeños bracitos alrededor de mi cuello y corresponder mi abrazo

- eres fuerte… por eso Dios te mando a ti a cambiar esta horrible sociedad, porque el confía en ti y de que tu puedes lograrlo… todos los ángeles tienen confianza en ti también al igual que tu mamá y la mía… no nos defraudes ángel- Dijo en mi odio

- te lo prometo- Dije dándole un tierno beso en la coronilla

Nos separamos después de otros segundos y ella salió corriendo para continuar jugando con sus amigas de su misma edad, me puse de pie y Sam limpio mi lágrima para juntar nuestros labios en un tierno beso y juntar nuestras frentes.

-te quiero mucho mi Ángel- Susurro en mis labios

- también te quiero- Dije besando cortamente sus labios para sentarnos a comer y a hablar de cualquier bobada que nos ocurría

- ¿quieres un chiste?- Dijo alzando y bajando las cejas rápidamente

- oh no Sam eres pésimo en eso- Dije riendo

- oh vamos déjame hacerte uno- Dijo con puchero

- no

- por fis

- no

- si

- no

- si

- no

- no

- si- Dije cruzándome de brazos, bufe cuando el me lanzo una sonrisa triunfante

- muy bien… ¿Qué le dijo un pollito a otro pollito?

- nose dime- Dije después de segundo fingiendo estar pensando

- piu, piu- Soltó una sonora carcajada yo alce la ceja incrédula, ven, es pésimo en los chistes

- eso no es gracioso- Dije riendo, el me lanzo una mirada fulminante

- si lo es, es solo que eres una aguafiestas

- ¿yo?- Dije señalándome divertida

- si- Dijo dándome un corto beso en los labios