Donde un detective policial, una recaudadora de deudas ilegal, un asesino por contrato, una ex militar mercenaria y un niño prodigio, forman un equipo para combatir los crímenes más violentos de la ciudad.
"Cariño no digas que quieres a un chico mal...
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Masticaba mis fideos de Ramen, mientras que al mismo tiempo me encontraba completamente alerta y lista para atacar en cualquier momento. El resto del equipo Z que estaba reunido alrededor de la pequeña mesa, también se notaban como si estuvieran listos para pelear si debían hacerlo. Nuestros ojos estaban todos en sospecha y estamos observándonos los unos a los otros, casi como esperando a que alguien reaccionara, perdiendo su paciencia y golpeando al más cercano a un lado de ellos. El único quien sorbía su Ramen como si fuera sólo otra regular cena amistosa era Jinyoung. Él estaba estirando su cuello y siendo cauteloso de no ensuciar su traje de negocios en vez de observar a su alrededor en caso de que alguien tratara de matarlo.
Era algo seguro decir que jamás hacíamos cosas como estas. El fiscal nos había forzado a abandonar el frío y oscuro almacén para poder dirigirnos a un restaurante, a sólo un par de pasos cerca de nuestro lugar y estábamos completamente fuera de nuestra zona de confort. La conversación aún seguía mientras que hablábamos sobre el caso en el que trabajábamos, pero rápidamente todos luego quedaron en silencio.
-¿De quien fue esta idea?-Yiyeon habló repentinamente y frunció su ceño.-Solo sentarme alrededor de ustedes, todos en la misma mesa como si fuésemos amigos hace que pierda mi apetito.
-Oi que eran un grupo algo extraño, pero jamás pensé que era demasiado malo.-Jinyoung murmuró y su vista, pensativamente se movió a través de nuestros rostros con expresión incómoda.-Son peores para sociabilidad, aún más que yo mismo.
-No somos peor que tu.-Hablamos repentinamente en unión.
Aquello hizo que todos se congelaran y miraran alrededor con sorpresa, mientras que el fiscal se rio entre dientes.-Bien, ustedes son malos pero de pueden arreglar. Es exactamente lo que trataré de hacer. No puedo creer que jamás han tenido una cena juntos cómo está, por cierto. No hay duda de porque no sirven en realizar trabajo en equipo.
Seungmin empujó sus lentes, como de costumbre y miro a Jinyoung.-No somos demasiado malos en el trabajo en equipo. Por ejemplo, acabamos de decidir silenciosamente todos, que te detestamos. ¿No es aquello suficiente? Casi como telepatía.
-¿Puedo largarme cuando termine mi ramen? Me perderé el drama que actualmente estoy observando si no llego a mi hogar para cuando sean las dos de la madrugada.-Yiyeon murmuró y observo la hora en su teléfono. Ni siquiera noto que acababa de admitir que solo se quedaba despierta hasta las dos de la madrugada, cada semana, para esperar por un nuevo episodio de un drama.-Suele ser más entretenido que todos ustedes juntos, en sus vidas.
Ella arrojó su largo cabello negro sobre su hombro y comenzó hablar sobre el drama que estaba mirando todas las semanas. Jinyoung, era el único que estaba oyéndola. Jackson comía su Ramen y jugaba a un juego en su teléfono, mientras que Seungmin, parecía tratar de terminar su comida lo más rápido posible así se podría ir y por último Hyunjin estaba observando a la distancia con una expresión seria en su rostro. A diferencia del resto, yo me encontraba perdida en mis pensamientos y repasando levemente en mi mente la información que logramos conseguir en el club la noche anterior, en Booster.
