SOLO MÍA ━━ [Finalizado] 《2》

42. Coronación y despedidas (Borrador)

A las pocas horas, uno de los bebés lloró y a su vez despertó los otros dos. El llanto sacó a (Tn) de su descanso, y rápidamente Kid y Law llegaron para ayudar.
Andaban una especie de Mushi-Talkies para escuchar cuando los bebés lloraran, y también por si (Tn) necesitaba algo, ya que habían adaptado la habitación para que no se escuchara ningún ruido y que nada los molestara a ella ni a los bebés.

Cuando Kid y Law abrieron la puerta, (Tn) escuchó que había música a alto volumen, risas y mucha gente hablando.

—¿Qué pasa afuera? —preguntó al levantarse de la cama.

—Los piratas de Kid, los piratas de Hawkins, y los míos, se juntaron celebrando el nacimiento de los bebés. —contestó Law.

—¡Oh! —suspiró ella con una sonrisa de agrado.

Kid y Law ayudaron a (Tn) a ubicar los bebés para alimentarlos, luego Law salió de la habitación para darle privacidad a los padres.

—Tranquilos mis angelitos, con calma o me arrancarán los pechos. —dijo (Tn) entre risas.

—¡Jaaa! ¡Que ni lo intenten! Esos pechos son míos, ¡cuidado enanos! —advirtió Kid sosteniendo la bebé, quien era la más tranquila de los trillizos.

—¡Oye! —alegó (Tn) riendo.

—¿Ya sabes cómo se llamarán? —preguntó Kid.

—Bueno... eso se lo iba preguntar a sus padres.

Kid se sentía contento por las palabras de su mujer y no tardó en demostrar su reacción.

—¿De verdad puedo nombrar un bebé? —sonrió con mucho agradado.
(Tn) afirmó con la cabeza y se complació con la manera en la que Kid actuó.

—Llama a Law y a Cracker. —pidió muy contenta

Esperaron a que Cracker se hiciera presente y una vez reunidos los tres hombres, (Tn) les pidió sentarse y extendió su puño cerrado.

—Vamos a resolver esto de manera justa. —explicó paciente—. En mi mano hay tres trozos de papel con un número escrito. Tomen uno y me dicen que numero les tocó. Ellos asintieron y tomaron el papel.

—Uno. —dijo Kid.

—Dos. —Law mostró su papel.

—Tres. —contestó Cracker.

—¡Muy bien! El numero que les tocó es equivalente al bebé que nombrarán, Kid... a ti te corresponde mi hijo mayor, Law, tu nombrarás a mi hijo del medio y Cracker... tú nombrarás a mi hija. —dijo (Tn).

Pero el pensamiento que cruzaba la mente de los tres hombres era: «Yo quería nombrar a los trillizos».

—Piensen bien los nombres, les daré una semana. —dijo la muchacha.

Ellos se retiraron para dejar descansar a la exhausta madre, y se encargaron de atender los bebés el resto del día. Ella cayó en un delicioso sueño del cuál no despertó sino hasta el día siguiente.
A pesar de que las puertas eran a prueba de ruido, aún así escuchó un bullicio que la sacó de su encantador descanso.
Se levantó un poco dolorida y checó los bebés que aún dormían. Sonrió al verlos tan tranquilos como si nada pasara y entonces salió de la habitación.