Shameless (Camila Cabello y Tú) G!P/Male

I - Capítulo XVI: Cita

Se acercó en donde estaban y Andy saludo moviendo su mano levemente.

-Bien, diviértanse. -Habló Alejandro marchándose.

Salieron afuera y ya estaba cayendo la noche. Andy le abrió la puerta a Camila y rápidamente fue a subirse la auto.

-Te ves diferente... -Rompió el hielo Camila.

-Si, quería un cambio de look. -Rió Andy. -Espero que te agrade. -Contestó Andy.

-Pues claro. -Habló Camila riendo. -Te queda bien y me gusta. -Admitió.

¿Le gustaba? Eso se preguntaba Andy, a su crush le gusta su cambio. La ayuda de Ariana era necesaria para ese momento y lo agradecía.

-Tu no te quedas atrás, estás muy hermosa. -Habló Andy. -Bueno tú eres hermosa de por sí, ósea ya sabes... -Trató de explicarse.

Camila rió bajito por el nerviosismo de Andy.

-Gracias, es muy lindo de tu parte. -Dijo Camila con una sonrisa mostrando sus dientes.

Ahí estaba esa sonrisa. La sonrisa que que quería provocar por mucho tiempo, era simplemente hermosa.

-¿Quieres poner música? -Preguntó Andy. -Le acaban de poner un radio un poco más moderno. -Habló.

-Claro, gracias. -Habló Camila agarrando el cable.

Al poner su música estaba sonando Wicked Games de The Weekend. La canción de por sí era sensual, Andy miró el radio y luego pudo ver las piernas de Camila un poco más descubiertas por el simple hecho de al sentarse su vestido se había subido. No quería verse como una persona aprovechada y pervertida, por lo que siguió su vista al frente.

-¿A donde iremos? -Preguntó Camila mirándole.

-Iremos a un restaurante. -Habló Andy. -Espero que sea de tu agrado. -Argumentó.

Luego de unos minutos, habían llegado al restaurante. Andy le abrió la puerta a Camila, por lo que ella sonrió y agradeció. Cerró el auto con llave y lo siguieron para el restaurante. Al llegar, era un lugar hermoso; Andy había ahorrado demasiado para esto.

-Reservación de _______ Maddox para dos. -Hablo Andy.

-Aqui está, le damos la bienvenida, síganme. -Dijo el personal.

Andy y Camila siguieron al que atendía las recepciones. Al llegar a la mesa, Andy primero retiro la silla para que Camila pudiera sentarse, lo agradeció con una sonrisa. Luego se sentó en su silla, una camarera les había dado el menú. Al ver el menú, era obvio que todo era carísimo. Pero Andy se había preparado para todo tipo de gastos, así que no habría problemas.

-¿Ya saben que ordenar? -Preguntó la camarera.

Se podía notar que no le despegaba ni un ojo a Andy. Camila aclaró su garganta con un poco de molestia.

-Me encantaría que me trajeras una pasta Alfredo, con un vino tinto. -Habló Camila con indiferencia a la camarera.

Andy no entendía pero lo que más le sorprendía era que lo mismo que pidió Camila, eso iba a pedir.

-A mi tambien, pero solo dame una Coca-Cola. -Dijo Andy.

-Lo que usted ordene. -Dijo la camarera en un tono coqueto mientras anotaba.

Camila simplemente tenía una mirada sarcástica y agarró la mano de Andy sin pensar. Andy la miró con sorpresa, pero en esos momentos lo que quería era reventar a la camarera. No se sabía el porque quería hacer eso. La camarera se había ido y Camila canto victoria. Pero luego se dio cuenta de lo que hizo, por lo que se sonrojó y sintió un poco de vergüenza.

-Lo siento. -Se disculpó. -No me agrada en lo mínimo la gente aprovechada. -Contestó.

-No te preocupes. Además su comportamiento fue muy raro, gracias. -Dijo Andy riendo.

-¿Puedes quitarte los lentes un momento? -Preguntó Camila.

Con confusión, Andy se los quitó , la morena pudo ver fijamente bien el color de sus ojos que nunca había notado.

-Tus ojos son muy hermosos. -Habló Camila mirándolos y contemplándolos.

-Me dicen que los herede de mi madre. -Habló Andy.

-¿Donde está tu mamá? -Preguntó Camila.

-Cuando tenía 7 años, mi padre y madre se subieron a un avión. Luego ese avión desapareció y entiendo que están muertos. -Contó Andy.

-Lo siento... -Se disculpó Camila. -No era mi intención hacerte recordar eso.

-No te preocupes. -Le dedicó una sonrisa. -Pasó hace mucho. -Dijo Andy.

Camila sonrió sin mostrar los dientes.

-Deben estar muy orgullosos de ti. -Dijo la morena mirándole.

La comida había llegado y estaban teniendo conversaciones sin importancia. Eran conversaciones divertidas, era algo que tenía Andy. Sus temas de conversación hacían reír y también cada quien se estaban llevando alguna que otra información. Andy aprendió cosas de Camila y Camila aprendió cosas de Andy. Lo que no se sabía era que Camila, le curaba el alma esas conversaciones.

-Entonces derrame el aceite, por lo que provocó que Shawn resbalara. -Rió Andy.

Se había enterado que Andy trabajaba con Shawn en el taller y que le cuidaba. Camila rió por la anécdota contada. Al terminar, Andy había pagado la cuenta, no le importó haber gastado dinero en su cita. Cuando salieron pudo notar que Camila tenía frío, por lo que se quitó el gabán que tenía puesto y se lo acomodó.

-Gracias. -Habló Camila tapándose del frío.

Andy asintió y le abrió la puerta a Camila, cosa que ella agradeció. Se subió al auto y estaban de vuelta en la mansión.

-Bueno, hemos llegado. -Dijo Andy.

-Gracias por invitarme. -Dijo Camila.

-Gracias a ti por aceptar y por hacer de mi primera cita, la mejor. -Dijo Andy.

Camila se sonrojó y sonrió. Se acercó a Andy y le plantó un beso en la mejilla, un poco cerca de labios.

-Nos vemos el lunes. -Dijo Camila saliendo del auto y dejando el gabán.

-Nos... nos vemos. -Dijo Andy sin poder creerse lo que había pasado.

Camila lo siguió para la puerta, se giró y se despidió una vez más de Andy y entró.

Definitivamente era la mejor primera cita que había tenido.

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Holisss

Espero que estén bien.

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Los amo

Me pregunto que esperan en esta historia, los leo.

-Wonhos