✖️The seed of the Devil.✖️ >Español<

Chapter #2

-¿Quién es él?

-¿Qué? ¿Eres sorda?, el nuevo.

-Si ya te escuche. Nunca lo he visto.

-Madison, el fin del mundo puede estar pasando al lado tuyo y no te darías cuenta. –Dijo obvia-.

 La mire despreciándola un poco.

 -Mira –sugirió- Porque no vas y hablas con él y aclaras tu duda. ¿Sí?

-Supongo que es lo mejor que puedo hacer

-Anda campeona.

 Dijo dando una palmadita en los glúteos. Camine entre medio de la gente tratando de encontrarlo pero fue en vano. Aun con la duda de preguntarle de que era lo que estaba pasando, se me ocurrió mirar hacia el segundo piso y es ahí cuando lo veo subiendo tratando de no ser visto, claro que no le resulto. Lo mire sin perder su rastro y vi que entro a unas de las salas de los comedores oficiales cerrando la puerta detrás de él. Subí al segundo piso con mi vestido entre mis manos para no pisarlo. Vi que en la sala que entro Blake no estaba completamente cerrada así que pude acercarme un poco más y escuchar.

 -Está aquí.

 Reconocí la voz de Blake.

 -¿Cómo vino vestido?

 Se metió otro.

 -Está completamente de negro y…con un antifaz

 Unas risas amargas se unieron a la conversación.

 -Buen trabajo. –Volvió a decir la voz-. Ahora vuelve a bajo con Madison y hace lo normal. ¿Vale?

 Ahí supe que era mi salida. Volví a la planta baja y dirigiéndome a la barra para disimular.

 -Dame una Coca-Cola. –Dije al chico detrás de esta-.

-Sale en seguida. –Dijo sin importancia-.

 Deslizo la bebida por la barra para llegar directamente a mis manos cuando sentí unas manos rodeando mi cintura que conocía perfectamente.

 -¿Me extrañaste? –Dijo rosando mi oreja-.

-Demasiado. ¿Dónde estabas? –Dije dándole la cara-.

-Arreglando cosas. Sin importancia.

-Eso espero. ¿Bailamos?

-Eso me gustaría mucho.

 Y así fue toda la noche. Bailamos de 4, a veces de 10 o a veces todo nos uníamos. Fue todo de maravilla…pero no podía sacarme de la cabeza a ese chico. Ray. Y en la reacción de Blake al verlo. En la pasada de noche solo lo vi unas cuantas veces más y cada vez que lo hacía, Blake hacia cosas para que lo dejara, aunque no lo decía, yo lo sentía. Cerca de las 2AM, el director se acercó para despedirse y dardos las gracias por lo que habíamos hecho. Luego cerca de las 6AM, Blake me fue a dejar a la casa.

 -Fue una noche de maravilla. –Dije dándome la vuelta para mirarlo-.