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Se escuchaban varios murmullos provenientes de la habitación de la pareja Kim, en la que la pequeña Jia de cinco años, vigilaba la ventana que daba a la puerta principal, mientras que su madre Yoohyeon hacía algunos arreglos a su improvisado fuerte de almohadas.

-¿Cómo va nuestro fuerte de almohadas, Sargento?

-¡Todo en orden su señoría! ¡Todas nuestras armas están cargadas y listas!

-¡Cállese sargento! Mamá- quiero decir, ¡nuestro objetivo está en la mira!- Yoohyeon dejo su puesto  y miró por la ventana, solo para encontrarse a Minji dirigiendose hacía la puerta principal de su casa.

-¡Rápido, entra al fuerte! - La pareja de niñas se escondió rápidamente y esperaron a que Minji apareciera.

-¿Yoohyeon? ¿Jia? ¿Están aquí?- Una voz familiar sonó desde la sala de estar.

Las dos guardaron silencio y esperaron pacientemente, su escondite de almohadas se comenzaba a tambalear.

Al no escuchar respuesta, Minji decidió subir a la habitación para averiguar la razón del repentino silencio. Cuando esas dos estaban solas, el caos se desataba, por lo que le parecía extraño.

Cuando Minji llego vio lo que parecía ser un fuerte de almohadas. Ella negó con la cabeza lanzando una pequeña risa.

Ella también podía jugar.

Minji se llevó la mano a la barbilla con gesto pensativo y dijo en voz alta _ Mmm ¿En donde se estarán escondiendo?

_ ¡Ya viene mami! ¡Prepárate!

La castaña camino sigilosamente hacía el fuerte de almohadas y tomó la almohada superior.

_ Quizás se estarán escondiendo aquí _ Con un movimiento rápido Minji tiro de la almohada, develando a su esposa y a su hija con sombreros militares de juguete.

_ ¡Ahh! ¡Mamá monstruo nos encontró, comandante Jia! ¿Qué debemos hacer?

_ ¡Debemos utilizar nuestro súper movimiento!

_ ¿Qué súper movimiento?

_ ¡El ataque de besos! _ Un segundo después, el dúo se lanzó sobre Minji, tirándola a la cama, llenándola de besos. Esta última, aunque lucho un poco, finalmente se rindió ante la fuerza abrumadora de sus besos. Cómo había sobrevivido cinco años de convivencia con Yoohyeon y Jia, no lo sabía. Pero no las cambiaría por nada en el mundo. ¿Qué más podía pedir?

Afortunadamente para ella, las dos se detuvieron con su ataque de besos, obviamente terminando con su "operación comando" . Especialmente Jia, que se había quedado dormida acurrucada en el pecho de Minji. Yoohyeon le quitó el gorro de militar a la pequeña para luego ponerlo en la mesita de noche, luego se acercó a Minji dispuesta a besarla, cuando un dedo chocando con sus labios le impidió hacerlo.

_ ¿Por qué me detienes?

_ ¿Realmente crees que te vas a salir con la tuya después de llamarme, mamá monstruo?

_ Uh, ¿Si?

_ Claro que no. Cómo castigo, dormirás en el sofá esta noche, señorita.

_ Pero-

_ Sin peros. En el sofá o no habrá rockandrol esta semana _ Minji se aseguró de no usar la palabra en cuestión ya que su hija podría escucharla y la situación podría conducir a una conversación incómoda muy rápido.

_ Ow, está bien _ Para Yoohyeon no era problema dormir en el sofá una noche. Pero, ¿no rockanrolear en toda la semana? Imposible.

Y con eso, tomó una almohada, una manta y salió de la habitación.



Bittersweet; jiyooWhere stories live. Discover now