[Des]Ventaja Número XXVI

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Tiktoks

El fresco viento llega por la ventana abierta hasta su rostro. Aún así, Kirishima no se siente bien.

Está aburrido.

Vamos, que el invierno ya había acabado y empezaba la primavera. Los parciales también estaban terminando ese fin de semana y solo quedaba menos de un mes para que oficialmente la clase 3-A se graduara de la UA.

La primavera es bastante linda en la academia, los árboles Sakura frente a su balcón estaban empezando a brotar y el día estaba bastante soleado. Muy agradable para tal vez salir a dar un paseo, ir de compras con amigos, tener una cita con su novio...

Lastimosamente, Aizawa los había castigado a todos ese fin de semana sin poder salir de la institución porque alguien se robó su vodka (vete a saber quién) y ya no podían salir. Tampoco podía salir (al menos al salón común) a disfrutar con amigos porque absolutamente todos ellos estaban estudiando para la recuperación de exámenes (sí, los imbéciles desaprobaron todo). Y mucho menos podía contar con tiempo a solas con su novio, pues este ahora también seguía estudiando.

Y sí, lo último no tiene ni siquiera sentido. Bakugou había aprobado todo, no quedaba más que un examen el Lunes de sociología, pero ambos tenían el curso aprobado. Para Kirishima era una perdida de tiempo seguir estudiando, para Bakugou era una responsabilidad más al parecer.

Kirishima no puede creer que uno de los últimos fines de semana que pasará junto a su novio en la academia sean en su cuarto, estudiando. En serio no puede.

—Suki. —Llama arrastrando las palabras y sin querer moverse. Está en la cama, el aire que le llegaba al rostro se había detenido en algún momento y el calor le entró, sin embargo tenía demasiada pereza como para moverse. —Suki. —Volvió a llamar.

—Qué quieres, Shima. —Respondió el rubio en un tono de voz neutro. El pelirrojo suspiró desanimado antes de hablar.

—Dame amor.

—No. Estoy estudiando, algo que deberías hacer tú también.

Bakugou ni siquiera lo miró.

Kirishima pataleó al aire, pero sus movimientos duraron menos de un segundo. Era curioso como sus piernas ahora en el colchón pesaban más que cuando estaba de pie. Terminó bufando cuando ni siquiera pudo terminar una pataleta. Ah, maldita flojera de fin de semana.

—No quiero. —Musitó.

—Entonces abúrrete. —Bakugou respondió sin despegar sus ojos del libro que resolvía. ¿Era eso geometría? Esperen, ¿cuando había terminado de estudiar para el examen de sociología?

—Pero...

—No.

Kirishima chasqueó la lengua. Su mano cayó a un lado de su cara y notó a una almohada pequeña. Sin pensarlo mucho simplemente la agarró y la lanzó hacia su novio. Venganza infantil pero al cabo era venganza. A Bakugou casi se le caen los lentes de lectura que llevaba de la impresión más que del golpe. Esto hizo reír a Kirishima y enojar más al rubio.

— ¿Qué te pasa, imbécil? —Gruñó, el pelirrojo respondió con otra risa. Bakugou suspiró, acomodando sus cosas en la mesita de noche que había tomado como escritorio de su habitación. —Joder, déjame seguir estudiando. —Dijo, molesto. — ¿No tienes más que hacer? No sé, actúa un adolescente promedio. ¿No te puedes descargar esas mierdas sociales como canchat, tiktok o algo así para perder el tiempo?

[Des]Ventajas de una muy masculina y explosiva relaciónWhere stories live. Discover now