"Nadie elige de quien enamorarse."
Una historia que nace de aquellos sentimientos que generamos en la adolescencia por personas que no debemos, y por más que intentamos, no podemos evadirlos.
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Desaparezco un momento y pasa de todo. Desde el baño del según piso he escuchado gritos, pero preferí ignorarlos. Yo también me estaba desahogando. Este tema de la mudanza de Bett y Eric, me está cayendo peor de lo que imagine. Sé que mis ojos están rojos por llorar, pero lo bueno de todo este desastre es que nadie se da cuenta de ello.
-Tu familia me hace mucha gracias - dice y no tengo que voltearme a mirar de quien trata. Su voz es inconfundible.
-Me alegra que alguien se esté divirtiendo con todo esto - digo con ironía y acomodo dos vasos de vidrios en la bandeja que tengo frente a mí, ocupada antes solo con una jarra de agua.
Es tan ofensiva tanto su presencia como su actitud. Mientras la abuela y la tía Sandy se encuentran mal allá afuera, ella aprovecha para molestarme la vida. Es peor de lo que imagine.
Cuando me volteo con la bandeja en mi mano, noto que se encuentra en toda la mitad interponiéndose en mi camino.
-¿Cómo crees que no voy a estar feliz? - pregunta agarrando su cabello una y otra vez. ¿Qué es lo que trata de decirme con eso?
-Lo que sea - suelto - Ahora dame permiso, por favor. Necesito llevar esto.
-A veces te pasas de inocente, que resultas hasta estúpida - me dice.
-Bett, no estoy de humor - digo seria. ¿Es que no le basta con todo lo que ya me está haciendo?
-Solo quiero compartir contigo algo - dice y me coloca su mano derecha frente a mis ojos, por un instante los cierro, creyendo que me abofeteará o algo por el estilo, pero me está mostrando su mano de la parte de arriba. Un hermoso y brillante anillo se encuentra ubicado en su dedo anular.
-Me alegra que te hayas comprado un anillo, es muy lindo. No sabía que tenías buen gusto - suelto fastidiada. ¿Cree que me importa en este instante un estúpido anillo?
-No seas estúpida, mocosa - me dice entre dientes.
-¡Mahia están esperando...! - el grito de Eric se apaga cuando ve la situación en la que me encuentro - ¿Está pasando algo aquí? - pregunta mirándome fijamente. Niego con la cabeza y apartó la mirada.
-Amor que bueno que apareces - dice Bett volteándose a mirar a Eric - le estaba contando acerca de las buenas nuevas.
¿Buenas nuevas? ¿A qué se refiere? Solo me ha mostrado el... Ay, caray. Por favor, que no sea lo que estoy pensando.
-¿A qué te refieres? - pregunta Eric confundido. Di que ella está mintiendo.
Unas actuadas carcajadas nerviosas salen de su boca.
-Me refiero a nuestro compromiso de matrimon...
He sentido mis brazos débiles ante sus palabras y, no he podido evitar que la bandeja se me cayera de las manos.
