𝙉𝙤 𝙛𝙧𝙞𝙚𝙣𝙙𝙨

"Amigas"

Al día siguiente fue exactamente la misma situación y así otro y otro día. Ya llevábamos cuatro semanas compartiendo con Hye Yoon y ella estaba cómoda con nosotros, pero yo no. Sentía que formaba parte de un mal tercio. Era obvio que yo sobraba en este grupo. Las únicas veces que lograba convivir con Jungkook como antes era en las salidas, ya que tomabamos el autobus hacia la misma dirección, pero no siempre era así porque prefería acompañar a Hye Yoon a su parada y que yo me fuera nada más. Y hoy, era uno de esos días.

— Nos vemos mañana T/n — aquí me encontraba despidiendome de esos dos que me dejaron de lado formando su propio dúo.

— Adiós... — me despedí como pude y tan pronto como los vi alejarse bajé mi mirada algo triste — y otra vez me dejas... — sentía que esto duraría días, meses o incluso años. Debía hablar con Jungkook.

— Hola.

— ¡Ay! — di un salto en mi lugar y miré a quien apareció repentinamente - Diablos, ¿qué quieres?

— ¿Tan malo es ver a Park Jimin? — comenzó a hacer un puchero y a acercarse a mí como siempre, pero solo me quedé en silencio mirando a la nada.

— Tu amigo se fue otra vez — comenzaba a sentirme más mal de lo que ya estaba — vaya, yo pensé que le importabas más — cada una de las palabras que salían de su boca era una lágrima más acumulandose en mis ojos — aunque debo admitir que la nueva es muy bonita — no resistí más y solté todo silenciosamente — ¿por qué estás tan callada? — vi su rostro acercarse al mío mientras intentaba ocultarme como podía.

— No es nada... — noté su expresión de sorpresa y posó su mano sobre mi hombro.

— Hey... lo siento. No pensé que esto te estaba lastimando — no pasó mucho para que sintiera el calor del cuerpo de Jimin junto al mío. Así estuvimos unos minutos esperando el autobús que nos acercaría a casa. Por ese momento, olvidamos todas nuestras diferencias, pero cuando las recordé inmediatamente lo alejé de mí intentando secar las lágrimas que caían por mi rostro.

— Lo siento — él se disculpó sin ninguna razón y se sonrojó.

Cuando el bus llegó finalmente, me subí en él y me despedí de Jimin con mi mano y nada más. No importa cuánto me hagan sentir bien sus abrazos, debo mantener la poca dignidad que me queda.

- Narra Jimin -

Cuando T/n se alejó de mis brazos sentí mi rostro calentarse de inmediato provocando que me avergonzara — lo siento — solo atiné a disculparme ya que no sabía cómo actuar ante su rechazo. Era obvio que no me ganaría su amistad así de fácil. Ella es muy rencorosa.

— Adiós.

Cuando el autobús había llegado, se despidió fríamente y se fue. Ni siquiera me dio tiempo de hacer lo mismo, por lo que, ahí iba T/n otra vez. Alejándose de mí como siempre.

— Yo sé que puedo arreglarlo, sólo espérame T/n.

- Narra T/n -

Nuevamente los días pasaron y dos semanas más se cumplieron. Y por supuesto, no había hablado con Jungkook. Soy una cobarde. ¿Por qué en esta clase de situaciones no puedo hablar con él honestamente? Pero no. No dejaría pasar un solo día más. Era suficiente. Realmente me sentía excluida de mi propio grupo y no lo iba a soportar.

Apenas llegué a la escuela comencé a buscar a Jungkook deseando que estuviera en su casillero al igual que todas las mañanas, pero al ver que no era así decidí ir a nuestro salón aunque tampoco se encontraba ahí, así que mi última opción fue esperarlo cerca del baño, quizá estaba allí. Los minutos pasaban y Jungkook no salía del baño.
¿Será que vendrá tarde? Tomé esa pregunta como una posibilidad y decidí caminar hacia el salón antes de que llegue tarde, pero fue inútil porque el timbre sonó de inmediato. Me apuré y caminé rápido hacia el salón desafortunadamente no llegué a tiempo y el profesor era muy estricto con la hora de llegada así que me dejó afuera.

— Rayos... — miré por la pequeña ventana de la puerta para ver si mi amigo había llegado al salón pero no era así - ¿dónde estás Jungkook? — los minutos pasaban y yo era la única fuera del salón esperando hasta que Park se hizo presente. Era como si el destino quisiera que estuviéramos juntos. Por eso odio al destino.

— Hola T/A — a él parecía no importarle que nos encontraramos tan a menudo, pero yo no pensaba igual.

— Hola Park.

— ¿Por qué tan formal?

— Tú empezaste — guardó silencio al ver que nuestra conversación era algo tensa y yo me sonrojé un poco al notarlo — lo siento — tomé mi mochila y fui camino al baño.

— ¿A dónde vas?

— Al baño.

— Okey — comenzó a caminar detrás de mí hablando sobre el clima soleado y lo maravilloso que era tener días así.

— Disculpa — detuve mi andar obligándolo a parar y lo miré fijamente — ¿necesitas algo?

— Em... creo que no — estaba completamente confundido ante mi pregunta.

— Entonces no me sigas.

— Ah es eso. Bueno, como te decía... — siguió y siguió hablando fastidiandome con su voz hasta que entré al baño y cerré la puerta en su cara. Ahí era libre finalmente. De todos los chicos con los que me podía encontrar, tenía que ser con él. Lavé mis manos y arreglé un poco mi cabello pero al ver la puerta abrirse me detuve para observar.

— Oh, Hola T/n — Hye Yoon apareció frente a mí y me sonrió ampliamente. Ahora me había encontrado con dos personas que no me agradaban del todo.

— Hola Kang.

Ella rió levemente y me corrigió — solo dime Hye, ya somos amigas desde hace varios días T/n — amigas... eso creía ella.

— Ajá... — respondí poco convencida por lo que dijo y luego me retiré del baño — nos vemos luego — salí del lugar y me encontré con Jimin esperándome.

— Tardaste un poco.

— Tú quisiste acompañarme — caminabamos hacia el salón, pero Hye Yoon nos detuvo.

— ¡T/n! — me di la vuelta al igual que Jimin y ambos la miramos — cuando salgas a la hora de almuerzo por favor sentémonos juntas — sonrió alegremente, hizo una reverencia y se fue. Debía admitirlo, esa chica era un ángel. Ya entiendo qué le ve Jungkook y eso me molesta aún más haciendo que frunza mi ceño.

— ¿No te agrada? — Jimin se acercó a mi oído para susurrar aquello invadiendo mi espacio.

— No lo sé — lo aparté cansada de su cercanía y me dirigí al salón para seguir esperando afuera con él. Al no haber conversación alguna comencé a pensar en lo que Hye Yoon dijo. ¿Sentarnos juntas? ¿Escuché bien?
¿Por qué se sentaría conmigo y no con Jungkook? Quizá ella no es tan mala como yo creo y solo la alejo por celos. Comenzaba a sentirme mal por mi desconfianza hacia ella.