La Hija de los Malfoy

El comienzo de una... ¿amistad?

Lilii terminó estando en el despacho de Dumbledore. En todo el tiempo, desde que había llegado, nunca había estado en el despacho del director. Lilii observaba con detenimiento los retratos mientras escuchaba un quejido del fénix que se encontraba ahí.

Harry, quien se encontraba ahí también, había explicado toda la situación. Lilii simplemente se había quedadado en silencio. Cuando Dumbledore finalmente le miró.

- Fue una acertada decisión, señorita Malfoy—habló Dumbledore—no solo demostró lo que ha aprendido, sino que también salvó la vida de su compañero... cincuenta puntos para Slytherin

- Gracias, director—murmuro Lilii viéndole—disculpe el atrevimiento, ¿puedo acariciar al Fenix?

- Su nombre es Fawkes, señorita Malfoy—sonrió Dumbledore

- Fawkes...

Lilii se acercó al fénix mientras le acariciaba, Fawkes comenzó a soltar una melodía triste. Lilii ni siquiera se había dado cuenta de que lágrimas empezaron a salir de sus ojos hasta que comenzó a nublarse su vista. Ella tocó sus mejillas notándolas mojadas.

¿Por qué estoy llorando?, pensó Lilii.

Lilii comenzó a tararear la melodía de Fawkes, mientras el fénix se inclinaba más hacia ella. Lilii volvió su cabello rojo con mechas doradas. Los ojos de Lilii ahora de un color negro observaban a Fawkes con algo de melancolía.

- Eh, Malfoy, debemos irnos—habló Harry sacándola de sus pensamientos

- Claro...—susurró Lilii mientras acariciaba por última vez al fénix—adiós Fawkes...

Lilii y Harry bajaron por las escaleras. Harry no sabía bien que decir, cuando vio a Lilii comenzar a caminar la detuvo de inmediato tomándole de la mano.

- ¿Sucede algo, Potter?—preguntó Lilii viéndole

- ...

- ...

- ...

- Si no tienes nada que decir, ¿podrías soltarme, por favor?—habló Lilii

- Ah—Harry la soltó—gracias... gracias Malfoy, de no ser porque actuaste rápido... tú salvaste la vida de Ron

- Que seamos enemigos o rivales no significa que dejaré que muera frente a mi—habló Lilii frunciendo el ceño—además tú pudiste haberlo salvado, solo te alteraste al ver a tu único amigo así... después de todo, sabes la utilidad que tiene un bezoar.

- Aun así gracias—habló Harry—pudiste haber dejado así a Ron, pero no lo hiciste... te lo agradezco... Lilii

- ¿Así que me llamarás por mi apodo?—preguntó Lilii con una ligera sonrisa—muy bien... si no quieres sentirte tan en deuda o quieres seguir llamándome Malfoy solo te pido un ligero favor

- ¿Cuál?—preguntó Harry

- Mañana es nuestro partido contra Ravenclaw, después del partido espérame en la entrada del Gran Comedor—sonrió Lilii—iré con el cabello negro y los ojos azules... te llamaré Harry y tu puedes llamarme Dani... sólo no lo olvides

Lilii se despidió de inmediato corriendo hacia su habitación en las mazamorras de Slytherin. Si bien habían cancelado los partidos esta vez Ravenclaw no podría seguir posponiendo.

La mañana siguiente, Lilii se aseguró de tener una excelente ventaja contra los de Ravenclaw. Finalmente el partido terminó con 360-0 a favor de Slytherin. Con suerte, ellos podrían vencer con facilidad a cualquiera. Lilii se despidió de su equipo, mientras se dirigía con ropa casual hacia el gran comedor. Tal y como prometió, Lilii llevaba el cabello negro y sus ojos azules cuando vio a Harry en la entrada del Gran Comedor.