C. 33

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Los niños están comiendo alegremente, mientras tratan de hacer pequeños juegos ellos mismos, tal y como yo lo había hecho no hace mucho. Pero había uno en particular que me preocupaba, MinKy.

Él estaba sentado mientras miraba con la vista perdida la comida, era como si no estuviera aquí. me acerqué con cuidado hasta donde estaba él, me agaché un poco para poder estar a su altura.

─ ¿Qué pasa? ¿no tienes hambre? ─ pero MinKy no dijo nada, incluso no me miró para nada─. ¿Te sientes bien? ─ con cuidado lleve mi mano a su frente, la retire de inmediato, estaba ardiendo en fiebre─. Me levanté alarmada, caminé hasta donde estaba Sook, quien estaba regañando a un par de niños que habían empezado a aventarse la comida─. Sook ─ la llamé.

─ ¿Sí? ─ me dice mientras deja a los niños de nuevo en su lugar, esta vez con poca comida en sus bandejas.

─Es sobre MinKy, está ardiendo en fiebre ─ le digo preocupada, ella mira hacia atrás de mí, a la dirección donde está el pequeño.

─Seguro que se trata de eso ─ ella suspira, no la veo tan alarmada como lo estoy yo.

─ ¿Eso? ─ pregunto, pero después meneo un poco la cabeza─. Tenemos que llevarlo con un médico o al menos bajarle la fiebre ─

─Claro, pero Rita, la fiebre no bajara rápido, después de todo es algo normal en niños con genes de lobo ─

─ ¿Entonces que hacemos? No podemos dejarlo así ─

─ Claro que hay que atenderlo, además de que es probable que si los demás niños se quedan alrededor de él pueda casuar el 'despertar' de otros a temprana edad ─ dice ella, esta vez preocupada.

─Bien, comprendo ─ asentí, tomando una decisión─. Lo llevaré conmigo a casa ─

─ ¿Eso no será un problema? Tenía entendido que llegaría el joven Jungkook hoy ─

─Esto es más importante, estoy segura que entenderá ─

─Está bien, si usted lo dice ─

Volteo a ver a MinKy, quien se encuentra cabeceando un poco, pobre pequeño, yo me encargaría de que descansara mejor. Ya me encargaría de lo que dijera Jungkook después.

[...]

Con cuidado arropo a MinKy con una sábana, la cual es ligera, ya le había dado un baño con agua tibia para que la fiebre bajara un poco, además de que había puesto unas compresas frías en su frente, ahora dormía más tranquilamente.

Sali de la habitación para bajar a la cocina y preparar algo de sopa. MinKy era tan pequeño aun, y que pasara por algo así a temprana edad, eso solo me hacía ver lo difícil que era tener genes de lobos, ¿nuestros hijos pasarían por lo mismo?

Esa pregunta me sorprendió en demasía, cubrí mi rostro con ambas manos y solté un pequeño gritito, ¿Qué cosas pensaba? Pero era natural que pensara así, después de todo Jungkook y yo estábamos juntos, además de que vivíamos solos en una casa, muchas cosas podrían pasar.

Mientras me torturaba yo sola con mis pensamientos me movía de un lado a otro para hacer la sopa. Estaba tan entretenida pensando y haciendo la sopa, que al escuchar la puerta abrirse pegue un brinquito del susto.

─Estoy en casa ─ escuche a Jungkook hablar.

Fue en automático, salí corriendo de la cocina para encontrarme con él, Jungkook me recibió con los brazos abiertos.

─Te extrañe ─ dije mientras restregaba mi rostro en su pecho.

Escuche una pequeña risita, sus brazos me rodearon con gentileza mientras nos movíamos de un lado a otro.

Plenilunio  [ℐeon ℐungkook]Where stories live. Discover now