Ｐｌｅｎｉｌｕｎｉｏ [ℐeon ℐungkook]

C.6

"Tus acciones demuestran de qué está hecho tu corazón."

━━━━━━━━ ⸙ ━━━━━━━━

Mi alarma suena y me levanto, me estiro aun sentada en la cama y después me levanto. Tiendo mi cama, aunque más bien parece que solo aventé la colcha por encima de las almohadas.

Me doy una ducha y después me visto, lavo mis dientes y salgo de mi habitación, he salido antes que las veces anteriores. La abuela ya está en la cocina preparando un desayuno para ambas.

─Buenos días, abuela ─

─Buenos días cariño, ¿dormiste bien? ¿No estas cansada? ─

Cierto, ayer había ayudado a la abuela a limpiar el ático. Bueno, mis brazos dolían un poco por haber cargado algunas cosas, pero no era nada que un anti-inflamatorio no pudiera quitar.

─Estoy bien, solo que ahora mismo no tengo mucha hambre, solo tomare el jugo de naranja y si me da hambre más tarde, le pediré a la señora Min que me deje comer algo ─

─ Está bien, ella sí que es una buena mujer─ asiente ella mientras sonríe.

Yo solo niego divertida y después cojo el vaso de jugo de naranja para beber un poco. Miro la hora en el reloj que está colgado en la pared y dejo a un lado mi vaso a medio terminar.

─Es hora de que me vaya abuela, regreso más tarde ─ me levanto de la silla y la abuela hace lo mismo.

─Cielo, ten mucho cuidado cuando regreses, si es posible pídele a la señora Min que te deje salir antes, acabo de ver las noticias y parece que han habido algunos asaltos por la zona ─ parecía preocupada.

─Estaré bien, pero si te deja más tranquila, le pediré a la señora Min que me deje salir más temprano ─ sonrió.

Ella asiente, claramente un poco más tranquila al escuchar mis palabras.

(...)

Había dicho que le pediría a la señora Min poder salir más temprano, pero era imposible, hoy parecía que más gente había decidido venir al restaurante. Incluso el hijo de la señora Min, Yoongi, estaba ayudándonos un poco.

Al principio cuando llegue al trabajo, había sido algo difícil confrontar a ese chico, pues no lo recordaba muy bien que digamos, después entendía que era normal que no recordara nada, después de todo habían pasado años desde que nos habíamos visto.

Todos estábamos de un lado a otro, mis dedos se movían rápidamente en la caja registradora para poder cobrar los diferentes pedidos. También ayudaba en lo que podía a la señora Min.

Eran cerca de las seis de la tarde cuando él entro de nuevo al local, y aunque quisiera verlo más, era casi imposible. La clientela aumentaba más a estas horas normalmente. como siempre, él se sentó en la mesa más alejada, que aunque pareciera extraño, todo el día se mantuvo desocupada esa mesa, bebió un poco de su café y comió lentamente lo que había pedido.

Eran las ocho cuando él se despido de Yoongi y de la señora Min y salió del local, no sin antes darme una mirada, un escalofrió recorrió mi cuerpo, me ruborice.

─Cariño, tomate un descanso, aún faltan dos horas para salir pero no has comido nada ─ dice la señora Min mientras se acerca hasta donde estoy.

─Yo estoy bien, ¿por qué mejor no descansa usted? Ha estado de un lado a otro todo el día, a usted sí que no la he visto descansar ─

Ella chilla emocionada y aprieta un poco mis mejillas.

─Como hubiera querido tener una niña ─ dice ella sonriendo, después mira con amor hacia su hijo, quien se está encargando de limpiar las mesas que van quedando vacías. ─ Pero Dios me dio un hermoso hombrecito, así que no me quejo ─