Capítulo #37 - Día lleno de buenas noticias

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A la mañana siguiente se pusieron todos de acuerdo para hacer un picnic en el parque. Querían disfrutar del aire libre y comer en familia. En un principio se encontraban Demi, Wilmer, Nick y Paulina. La niña se intentaba arrastrar por todos lados, quería salir al césped y ponerse a jugar. La madre la tomó en brazos, pero ella insistía.

Nick: Me parece que esta pequeña es igual de traviesa que la madre.

Demi: Hija cálmate un rato, estamos esperando a tu tío y a los abuelos.

Wilmer: Nick, (dijo llegando con más bolsas) ayúdame. Cariño, déjala que juegue un rato, mientras esté aquí al lado no creo que pase nada.

Demi: Sigue consintiéndola, (dijo sentando a la niña en la manta y dejándole espacio libre para moverse) serás tú el que vaya detrás de ella, te lo advierto.

Nick comenzó a reírse, dejó las bolsas a un lado y cargó a Paulina en brazos. Este la lanzó por los aires y la pequeña reía sin parar. Wilmer se sentó al lado de Demi y le dio un leve beso. Wilmer ya había aprendido a aceptar a Nick, todo entre ellos dos era mucho más fácil. Al fondo pudieron ver al resto de la familia llegar...

Wilmer: Felicidades (Demi le dio un pequeño golpe en el hombro y él la miró) ¿Qué ocurre?

Demi: Tu primo no sabe nada del embarazo. (le susurró) Hola (saludó a sus suegros) Paulina dale un beso a tus abuelos.

Christopher: ¿Y qué pasa con los tíos? Yo también quiero mi beso.

Demi: Dale otro a tu tío que se pone celoso (comenzó a reírse y tomó a la niña en brazos para acercarla a ellos) ¿Cómo están?

Marissa: Bien

Demi se fijó que Marissa rápidamente le echó un pequeño vistazo al anillo que colgaba de su dedo y se sonrieron. Esta le hizo un gesto cómplice, iban a darles la noticia a todos, una vez que estuvieran comiendo. Paulina una vez que repartió besos volvió agitarse, no quería estar en brazos de su madre, quería jugar así que Demi la dejó de nuevo en el suelo.

Paulina intentaba alejarse, pero Demi no se lo permitía así que comenzó a llorar. Christopher la tomó en brazos y la sentó sobre sus hombros, sujetándola por las manos. Después comenzó a moverse sin parar, ante la risa de Paulina no paró el juego. Demi la miraba con ternura, estaban comenzando a salirle los primeros dientes y aquello se le notaba en el carácter. Lloraba con muchísima más facilidad. Cuando fue acercándose la hora de la comida se sentaron en la manta y a la niña comenzaron a darle un puré.

Christopher: Anoche le costó conciliar el sueño (dijo llevándose un trozo de pan a la boca) Cuando Nick vino a recogerla esta mañana, estaba alborotada.

Demi: Vete acostumbrando (se rió y siguió hablando) Lleva unos días alterada.

Sobeida: ¿Y a ustedes como les fue en la cena? (parecía verdaderamente interesada)

Wilmer: Muy bien y creo que la noticia que tenemos les gustará. (tomó a Demi de la mano) Nos vamos a casar y vamos a comenzar a buscar un hermano para Paulina.

Los padres de él abrieron los ojos de par en par y después se sonrieron. Demi miró a Wilmer y decidió aclarar el tema...

Demi: Mejor dicho, nos casaremos, pero lo segundo aún hay que hablarlo.

Christopher: Ya era hora (tomó a su hermano por el hombro) y lo de darme otro sobrino me parece perfecto.

Marissa: Yo también tengo algo que decirles (todos miraron a Marissa y Demi la animó a hablar) Hace unos meses me hice unos estudios y me dijeron que podía tener muchos problemas para quedar embarazada.

Christopher: ¿Por qué diablos no me dijiste nada?

Marissa: Porque no era nada seguro y no quería quitarte esa ilusión de ser padre.

Christopher: Me parece que...

Marissa: Espérate... (lo interrumpió) gracias a Dios esos análisis no estaban en lo cierto. Porque estoy embarazada y todo apunta a que pueden ser mellizos.

Demi se sorprendió por toda aquella noticia. No se esperaba nada igual. Christopher se quedó en shock, intentando asimilar las cosas. Nadie decía nada, se mantenían callados hasta que Demi decidió romper el hielo.

Demi: Vaya, tienes buena puntería.

Wilmer y Nick no pudieron contener la risa, Christopher la miró y seguidamente se incorporó para abrazar a Marissa y susurrarle al oído cuanto la quería. Sobeida se sentía verdaderamente orgullosa de ver a su familia unida de una vez por todas. 

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El próximo capítulo será el final, probablemente lo suba más tarde o mañana. 

Gracias por leerme y no olviden dejar su voto y comentario. 

Xoxo, D

Ardiente Deseo (18+)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora