dieciocho

348 41 3
                                    

flashback

- No deberías estar aquí. - habló con frialdad al notar mi presencia detrás suya.

No contesté y me senté a su lado en silencio.

Al ver que no tenía intención en moverme, resopló con molestia y se levantó de su asiento para irse.

- Estás herida, no deberías moverte mucho. - dije agarrándola de la muñeca.

Frunció el ceño y me miró con rabia.

- ¿Hablas enserio? - preguntó con un tono de enfado. Quedé en silencio sin soltarla. - ¿Acaso sabes por qué estoy herida? Por culpa de tu estúpida novia. - intentó soltarse de mi mano, pero no pudo.

Dejé salir un breve suspiro antes de comenzar a hablar.

- Mira, lo siento, ¿vale?

- ¿Te crees que con eso lo arreglas? - su voz se rompió. Mi mirada subió hacia ella, observando sus ojos cristalinos. - ¿Sabes? Es mejor que sigas fingiendo que no me conoces, lo haces muy bien, de verdad.

Sus palabras me debilitaron, y pudo soltarse por fin de mi. Dio media vuelta y se fue, limpiándose las lágrimas y la sangre seca que tenía en el labio.

Yo simplemente me quedé ahí, sentado, como un cobarde.

- ♥ -

- Alerta roja. - me susurró Jimin al oído.

Le miré confundido, preguntando con mi mirada a qué se refería.

Señaló con la mirada levantando una ceja, acompañado de una pícara sonrisa. Mis ojos siguieron la señal, y pude ver a Hana hablando con Zico en una esquina.

- ¿Dónde está Jungkook?

Jimin volvió a señalar. Estaba jugando a los dardos con los chicos.

- Ah... - suspiré. - ¿Cómo puede dejarla sola?

- Es tu momento, Kim Taehyung. - se burló haciendo rodar mis ojos.

- ¿Sabes que tú mismo me estás llevando al peligro, no? - acerqué la copa en mis labios con una sonrisa haciendo reír a Jimin.

- Pero lo importante es lo que te hace feliz, Taehyung-ah.

Simplemente negué con la cabeza mientras reía.

Mi teléfono volvió a sonar, por cuarta vez durante esta noche.

- Adivina adivinanza, ¿quién será? - rió Jimin por mi molesta expresión al mirar al móvil.

Resoplé molesto y volví a guardar el móvil en el bolsillo.

- Yah, ¿y si es algo importante? No es normal que te llame tantas veces durante varios días seguidos.

- No me importa. - contesté con frialdad.

Jimin sonrió e ignoró la situación bebiendo de su copa.

Mientras me apoyaba en la barandilla, seguí observando a Hana. Los celos me comían, y en mi cara se notaba. Jimin simplemente disfrutaba del show que me montaba en mi cabeza, ya que con mis gestos me delataba a mi mismo, pero mientras la observaba, mi cuerpo se tensó en el momento que vi a Zico acercándose demasiado a ella. Hana parecía incómoda.

- Jimin. - le di mi copa.

- ¿A-a dónde vas otra vez? - me miró confuso.

Le ignoré mientras me dirigía como una bala hacia ellos.

• house of cards (s1) | kth •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora