Clases Preparto

Último Capítulo

Capítulo 19

{Último capítulo}

Rose notó como una persona se sentaba justo a su lado encima de su camilla, en la que ella ocupaba. Abrió lentamente los ojos, después de la dormilona que se había pegado.

Justin la miraba detenidamente, sonriente. -Como te encuentras? -Le preguntó acariciándole la mejilla izquierda, con mimo.

-Mejor, mucho mejor. -Contesto alegremente, agradecía que el dolor no siguiera, por qué sinceramente ya no lo podría aguantar más. Era insoportable.

Jugó con sus dedos entretenida, sin nada que decir. Hasta que se le ocurrió preguntarle una cosa, esencial. -¿Qué nombre te gustaría?

Justin se sorprendió al escuchar su pregunta, desvió su mirada hacia el lado opuesto de la habitación y entrecerró los ojos pensando. -Me gusta el nombre de….. Jacqueline.

Rose sonrió al escucharlo. Era un nombre perfecto. -Qué te parece?

Ella sonrió mostrando su sonrisa -Me encanta.

Justin sonrió y le dio un beso inesperado, dejándola anonadada. Diez minutos después la puerta se abre de nuevo y entra el doctor de antes. Me quedo paralizada del miedo, al ver que retira las sábanas. Otra vez me va a meter mano? ¡Joder! Pero esta vez con la epidural no me duele. Y eso es lo que me alivió.

Levanta la mirada y lo oigo decir -¡Al paritorio! Ya mismo vas a conocer a tu niña. -Justin y ella se miran, y él le tranquiliza con la mirada, lo que agradece eternamente.

El hombre llama a unos enfermeros y, cuando le sacan de la habitación, no quiere soltar la mano Justin, pero oye que una enfermera dice. -Él se viene conmigo. Tiene que ponerse una ropa especial para entrar en el quirófano.

Asiente con la cabeza sin estar muy segura. Le suelta y le tira un beso con la mano, y él le sonríe dulcemente, susurrándole que se tranquilice a lo que ella vuelve a asentir.

Cuando entra en el quirófano, su corazón va a tres mil por hora, una exageración, sí. Pero era lo que sentía, parecía que el corazón se le iba a salir del pecho, literalmente.

La pasan a la camilla del quirófano y algunos enfermeros se van desapareciendo por las puertas dobles que se movían a cada rato que alguien entraba en la sala. Entran tres mujeres y un hombre con mascarillas, que le conectan a varios monitores y le piden que ponga sus dos pies en los estribos. Lo hace sin replicar, aunque no estuviera preparada.

Una de las enfermeras se pone a su lado y le explica el sistema para empujar en el momento. Al tener la epidural, no sentirá los dolores, por lo que tiene que hacerlo siempre que ella se lo pida o que ella vea que en el monitor se enciende una luz roja. Asiente con la cabeza. Estaba muy asustada, pero asiente, dispuesta a hacerlo bien.

El doctor que está situado en sus piernas le pide que empuje y al mismo momento ve como en el monitor que hay a su derecha se enciende una luz roja. Coge aire como que le enseñó Justin en las clases, lo necesitaba. Y empuja… empuja… muy fuerte. Con toda la fuerza que en esos momentos ardía en ella.

Justo al penar en él, ve que aparece por la puerta con un traje verde, contiene risa al verlo en esas condiciones y sigue las indicaciones del médico. Justin le ayuda, y le indica como tiene que respirar, igual que en las clases.

Vuelve a repetir varias veces los empujones, y la sudor se acumulaba en su frente, al hacer el esfuerzo. Observa que el doctor sonríe, al parar de empujar. Respirando agitadamente, apretó fuertemente la mano de Justin. Tenía calor, mucho calor.

-La niña que está viniendo, es bastante grande y le cuesta salir. -Informa el doctor. Abre los ojos ampliamente. ¿Grande? ¿Cómo puede salir eso de ella, dios mío? Creo que me voy a desmayar…

De nuevo la luz del monitor se pone roja. Empuja nuevamente, y ya agotada, posa su cabeza en la camilla, tras un suspiro. -Vas muy bien Rose, perfectamente, ya casi sale la cabeza. Empuja..

Le indica nuevamente, empuja fuertemente junto con los dientes apretados. -A salido la cabeza, ya a pasado lo peor, solo empuja dos veces más y ya está con nosotros. Venga que tú puedes.

Suspira cansada, y empuja con las pocas fuerzas que le quedan. Y suspira al sentir como un enorme peso se le quita de encima. -Ya lo tenemos aquí.

No ve absolutamente nada, los ojos se le iban cerrando poco a poco, provocado por el cansancio, no quería cerrar los ojos, pero algo le impedía abrirlos.

Una lágrima se desliza por su mejilla, al escuchar el llanto de su pequeña. Era tan feliz en estos momentos. -Es una niña. Una preciosa niña. -Oye decir a lo lejos.

Nunca imaginé que viviría un momento así...

Nunca imaginé que sentiría lo que siento...

Nunca imaginé que me sentiría tan completa en estos momentos..

Me siento feliz. Más feliz que nunca.

Una de las enfermeras coge a la bebé y se lo lleva, mientras la doctora termina de atender a la pobre Rose, que cayó a un sueño profundo por el agotamiento, saca la placenta.

(…)

-Rose, despierta. -Oye un susurro, llamarla. Abre poco a poco los ojos y ve con visión borrosa la cara de Justin a pocos metros de ella. -Como te encuentras? -Le preguntó al ver como abría los ojos completamente.

-Bien, ¿qué a pasado?

-Te quedaste dormida, no pasa nada. Todo a salido de maravilla. -Sonrió ampliamente y miró de reojo una pequeña cuna, se fijo bien y era su mi pequeña. Un sollozo escapó por su boca al verla, tan pequeña, tan vulnerable…

-¿Quieres cogerla, mamá? -Sonrió en afirmativo, y vio como Justin se separó de ella y se acercó a la cuna cogiendo a la pequeña, se acercó nuevamente a ella y le extendió a la niña dejándola en sus brazos.

Tocó sus pequeñas manita y sus manos enganchó un mechón de su pelo con fuerza. Se rió junto a Justin quién le hacia caras raras, sin esperar una risa de su parte. -Bienvenida al mundo Jacqueline…

× × ×

Holaaaa chicas, como acaban de leer esta one shoot ya va llegar a su fin..... Asi que si este capítulo tiene muchos votos y comentarios subo el Epílogo esta semana.... eso depende se ustedes

Las quierooxx