Día 25: Animales/Niños

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°•°Huevo Podrido°•°

Era sábado por la mañana y la madre de Changkyun despues de desayunar lo llevaba temprano al parque a jugar.

Era un día hermoso, hacía sol y el viento movía suavemente las hojas de los árboles que refrescaban el lugar. La madre del pequeño Changkyun siempre se sentaba a conversar con otras madres mientras dejaban a sus hijos jugar entre ellos.

Ahí Changkyun había conocido a su mejor amigo, Kihyun. Siempre que se encontraban jugaban juntos, construian en la arena y se lanzaban por la resbalalín haciendo competencias.

Esa mañana los pequeños estaban precisamente en eso; el último que llegaba se convertiría en un huevo podrido y Kihyun se rehusaba a ser un huevo que olía mal. Pero justo cuando estaba por subir la escalera que llevaba al resbalín sus ojos se enfocaron en un pequeño pajarillo acurrucado entre sus alas, inmóvil bajo el resbalín.

Preocupado se metio bajo la estructura de metal, olvidando por completo que llevaba la ventaja sobre la carrera, ignorando así mismo que en la resbaladilla de al lado Changkyun se había lanzado ya, ganando la carrera.

-¡Jaa-jaa! ¡Eres huevo podrido Kiii! -gritó el pequeño de 5 años que aun no se percataba que Kihyun no le estaba prestando atención.

Y como no recibió respuesta alguna, Changkyun comenzó a buscar a su aniguito con la mirada, sin exito.

Camino rodeando el juego y se topó con Kihyun arrodillado bajo la estructura.

-Kiki, ¿que haces?, ¿te pasa algo? -preguntó inocentemente Changkyun a su amiguito, acercándose lentamente hasta arrodillarse junto a él.- O-oye, si es porque te dije huevo podrido... l-lo siento.

-Kyunnie.-dijo el pequeño tomando entre sus manos al pajarito que habia encontrado, volteandose a ver al pequeño Changkyun con los ojos llorosos.-¿E-esta muerto? No se mueve.

Changkyun se quedó inmóvil mirando aquella escena. Le preocupaba mucho ver a su amiguito tan triste y también se sentía muy mal por ver a aquel pajarito tan quieto.

-No lo sé Ki.-respondió Changkyun mientras sus ojos se cristalizaban.

Los pequeños una vez se miraron a los ojos entendieron el temor del otro y rompieron en llanto.

Ambos eran pequeños de sólo 5 años y eran bastante sensibles y en especial con los animales.

Las madres de los dos pequeños no tardaron en correr hacia sus hijos luego de escuchar los lamentos acongojados. Corroboraron ambas la situación y para aliviar a sus niños decidieron ir al veterinario mas cercano para comprobar el estado del animalito.

Una vez encontraron una clínica veterinaria disponible, una de las madres entró junto al veterinario llevando al pajaro entre sus manos mientras la otra entregaba sus datos en la recepción, donde los pequeños esperaban las noticias acerca de la salud del animalito que habían encontrado.

Ambos estaban mas tranquilos sentados mientras la madre de Changkyun hablaba con el recepcionista. El pequeño Kihyun aun lloriqueaba un poco y Changkyun a su lado lo miraba con preocupación. Tomó la pequeña mano de su amigo fuertemente y le entregó un pañuelo para limpiar su pequeña nariz que a ahora se había enrojecido.

-Mi mamá dijo que iba a estar bien, Kiki, no te preocupes.-dijo Changkyun intentando consolar a su amigo.

-¿D-de... de... verdad? -contestó Kihyun tratando de calmarse.

-Es verdad, mi mami nunca miente.

Kihyun miró el pañuelo que le había entregado antes Changkyun y limpió su pequeña y respingada nariz, intentando calmarse y respirar profundo. Pero le costaba dejar de pensar en el pobre animalito, así que sus intentos fueron en vano porque de pronto otro par de lagrimas comenzaron a nublar su vista.

Antes de ponerse nuevamente a llorar, sintio como su rostro se acaloraba luego de que Changkyun se atreviera a tomar su rostro y a dejar un corto e inocente beso en una de sus mejillas.

-Va a estar bien.-dijo Changkyun quien tambien se habia sonrosado.

Y eso fue suficiente para detener las lágrimas de Kihyun y también fue suficiente para acelerar los latidos de sus pequeños corazones.

Los pequeños, avergonzados se quedaron estáticos mirando la punta de sus pies columpiarse hacia adelante y hacia atras.

De pronto la mamá de Kihyun salió hasta la recepción y la madre de Changkyun quien aun charlaba con el recepcionista se dirigió hacia ella. Luego de intercambiar un par de palabras ambas sonrieron y fueron hasta donde los niños que se encontraban sentados y muy callados.

-Niños.-dijo la señora Yoo.- Este pequeño pajarito sólo tiene un ala herida, pero se encuentra muy bien.

El par de niños saltaron de sus sillas alegres por la noticia y entre ellos intercambiaron un abrazo, olvidando incluso que se encontraban avergonzados.

-Sólo necesita un par de días de cuidados.-agregó pronto la señora Im.- así que entre ustedes dos se turnarán para cuidarlo, ¿les parece?

-¡Si! -gritaron al unísono los pequeños, contentos y aliviados.

Fin.

31 días junto a mi OTP 《ChangKi》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora