five.

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chapter five.           sleepover and glances,
and there's a serial
killer on the loose !

     -NO TE PREOCUPES VENS, yo te puedo enseñar los pasos que el cubo requiere para poder ser resuelto, y quizás así si podrás siquiera hacerme competencia

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     -NO TE PREOCUPES VENS, yo te puedo enseñar los pasos que el cubo requiere para poder ser resuelto, y quizás así si podrás siquiera hacerme competencia.— el de gafas que ahora se encontraba recostado en la enorme cama blanca de la rubia, mirando en dirección hacia esta, se burló del hecho de que no había podido siquiera resolver el cubo. Había pasado por lo menos una hora y Mars estaba intentando todavía armar el cubo, negándose a quedar en más vergüenza —si es que era posible— resulta que armar ese pequeño juguete era más complicado de lo que ella había pensado.

     —No es justo, tú has practicado por semanas, siempre te veo con esto por todas partes.— dijo fingiendo enojo luego de haber dejado a un lado el cubo. Tomó rápidamente las gafas del chico queriendo probárselas y hacer un pequeño show.

    —¡Oh mírenme! "Soy Curtis Farradick, soy muy inteligente y puedo resolver este cubo en cinco minutos, todo tiene unos pasos, blah blah blah."— la ojiverde intentó imitar su voz mientras movía exageradamente sus brazos queriendo enfatizar el dramatismo.

     Los dos chicos estallaron a carcajadas— Yo en serio no hablo ni me expreso de esa forma. Aunque no puedo decir mucho acerca de tu actuación porque lo único que veo es una mancha rosa que se mueve.— bromeó el rubio acerca de su terrible vista mientras intentaba ver y enfocar cerrando sus ojos.

     —Verdad, lo siento.— la chica se acercó rápidamente a este y ubicó delicadamente las gafas.

    Al haber llevado acabo esta acción, el ojiazul quedó a escasos centímetros de Venus, generando que los dos detallaran por unos instantes las facciones que se alzaban a sus vistas, la vista de Farraday bajó por un momento hacia los labios de la rubia, sin siquiera saber por qué, sin haberlo pensado y arrepintiéndose de ello luego, para luego volver a observar sus hermosos ojos verdes.

     Mars no notó esto porque casi simultáneamente había hecho lo mismo, así que los dos simplemente ignoraron lo que habían hecho, de todas formas dejándolos confundidos del por qué de ese instinto.

     —Estás muy ciego.— intentó calmar el ambiente alejándose del chico y tomando una liga que dejaba siempre en su mesa de noche, al lado de un portarretrato del grupo de amigos. Luego de esto se levantó y fue hacia su tocador, en donde comenzó a organizar su cabello para poder estar lista y acostarse luego.

     —Lo sé, no sé qué hice para merecer esto.— el de gafas aclaró su garganta y se acomodó la ropa que tenía.

     Luego intentando salir de la incomodidad, avisó a la chica que usaría el baño para cambiarse a la ropa en la que dormiría.

     —Está bien, ya sabes donde queda.

     Venus aprovechó y sacó rápidamente de su armario, la pijama que utilizaría, y se cambio rápidamente. No entendía por qué había visto los labios de su amigo de esa forma, le había confundido el momento muchísimo, principalmente porque en ese momento vio de una forma al chico en la cual nunca lo había visto antes. Vio lo azules verdosos que eran sus ojos, vio más allá de sus enormes lentes que cubrían la mayoría del tiempo sus facciones;  lo rubias que eran sus pestañas —a tal punto de aparentar que no tuviera— que podías detallar cómo parecían finos hilos de oro con la reflexión de la luz sobre estas; lo rojizos y suaves que se veían sus labios. Vio cada uno de esos detalles y la suma de estos creó una nueva concepción de Curtis Farraday en su mente, ahora no era solamente el niño que conoció a los seis años, con el que compartía la mayoría de su tiempo, quien la había consolado cuando se raspaba o a quien había consolado cuando sacaba una A- en algún examen. Ahora notaba lo lindo que se veía cuando sonreía, o cuando se sonrojaba al escuchar cómo Thomas o los chicos lo molestaban. Notaba cómo se emocionaba al hablar de ciencia, de química o de matemáticas, como su miraba se iluminaba al explicarle cuando no entendía algo. Su mente se llenó de recuerdos que tenía con el, de muchos momentos que habían compartido, y muchos de ellos cambiaron a causa de ese instante.

     —Ya basta tonta.— se dijo a si misma y abrió su cuaderno lila para anotar el tiempo que había pasado hablando por el walkie-talkie con los chicos, el tiempo que ha pasado con Curtis, básicamente para poder sacar de su mente todos esos pensamientos.

     —No recordaba que tu baño fuera tan grande.—el rubio apareció por la puerta de la nada, causando que la chica saltara del susto de nuevo.

     —Creo que hoy me quieren matar de un infarto.

     —¡Chicos, algo importante está pasando!— la voz de Davey volvió a resonar a través del walkie-talkie del chico.

Los dos se sentaron de nuevo en la cama, esta vez guardando mucha distancia entre sí, el aire se sentía más pesado e incómodo luego de aquel momento. Pero aún así, intentaron actuar con normalidad.

—¿Qué pasó Davey?— interrogó Mars.

—Si, ¿ahora qué pasó Armstrong?— repitió enojado Eaton— estaba teniendo un sueño húmedo con la madre de Dale.

—No menciones a mi madre imbecil.— respondió enfadado Woods.

—Estaba en lo cierto. ¿Recuerdan a todos los niños perdidos? Es un asesino en serie. Acabaron de llamar a mi papá.

—¡Mierda!— Farraday exclamó luego de encender el televisor que Venus tenía en su cuarto.— No está bromeando, está en las noticias en este momento.

«Esta tarde el Cape May Chronicle recibió una carta de un individuo que se hace llamar el asesino de Cape May, atribuyéndose la responsabilidad de por lo menos la muerte de trece adolescentes y dos adultos

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«Esta tarde el Cape May Chronicle recibió una carta de un individuo que se hace llamar el asesino de Cape May, atribuyéndose la responsabilidad de por lo menos la muerte de trece adolescentes y dos adultos. El autor también proveyó una lista de nombres, fechas, y detalles pertinentes relacionados a varios casos sin resolver de personas desaparecidas. Hemos confirmado la veracidad del testimonio. Puedo oficialmente declarar a esta persona como un asesino serial activo»

~•~
words; 1072
o seaaaa, tres capítulos en casi un día (no cuenta porque ya son la 1 am:(() realmente idk why me dieron tantos ánimos y ganas de escribir, so like no puedo dormir porque ya tengo preparados otros capítulos, ámenme plis.
bueno sin nada más que decir, realmente espero que les haya gustado este capítulo, ya quiero romance so like por eso the awkward moment, ¿qué creen que fue?

𝐈𝐃𝐋𝐄 𝐓𝐎𝐖𝐍. summer of 84Donde viven las historias. Descúbrelo ahora