24. Sigue allí

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La mande una mirada fulminante.

—¡Hazlo! ¡Ahora!

—Oblígame, Christopher —masculló. Con mi voz inyectada de enojo y odio hacia el comunicador.

—Hazlo o si no le diré a los señores Vásquez que estas a nada de repetir el año.

Resoplo, enojada.

Esto es lo más masoquista que hare en toda mi vida, pero tenía —para mi mala suerte — razón necesito un adulto con quien hablar de esto y los Señores Valdez no son una opción, por varias razones entre ellas mi identidad de superhéroe.

Golpeó con impaciencia mi pie contra el suelo hecho de hielo de la fortaleza de la soledad. Estabas no venía en mi versión adolescente sino de mi altar ego. Por precaución si las cosas se pasaban de la raya entre ambos.

Me muerdo la lengua al no soltar una maldición hacia Frederick Christopher Freeman y hacía Clark Joseph Kent.

Sentí una brisa golpearme, el cabello se puse en mi cara impidiendo mi vista. Escuché su risa. También sentí como su mano movía con delicadeza mi cabello.

Me observaban sus ojos azules tan profundos que podían ver el bien en cualquier de las personas. Ojos que no importara que cometiste en el pasado siempre te daría otra oportunidad.

Está bien, ya me estoy sintiendo mal.

—Después dices que yo soy la que tarda en las reuniones —murmuró. Le doy una pequeña sonrisa que fue correspondida por una más grande.

—Me alegro verte, Bella.

Sus ojos me observaban al detalle y eso solo me ponía cada vez más nerviosa

—No me hagas esto más difícil para mí.

—No fui yo quien empezó a ignorar a su compañero, Bella.

—Lose, lose. No tienes que poner más carga a mi consciencia.

—Fui una tonta niña malcriada que no acepta que ahora tiene que compartir su secreto con alguien y es que no sólo puede aceptar que...

No pude continuar gracias a sus brazos me envolvieron en un abrazo. Su cabeza se colocó encima de la mía, mientras afirma su agarre. Con mis manos temblando pasó mis brazos por su cuello mientras escondo mi cabeza en el hueco de este.

—Nunca estuve enojado contigo, Bella.

Me dejo un beso en la cabeza.

"Que conmovedor. "

Otra vez Míster Mind y su insufrible voz chillona. Su risa combinada con la de Sivana hacía eco en mi cabeza, retumbando en esta sin parar.

"Caerás como todos tus antepasados."

No puedo sentirme así. No puedo sentirme vulnerable. No enfrente de él. No puedo caer.

—No puedo demostrar debilidad —murmuró en un susurro, con la voz quebrada. Mi cuerpo tiembla de temor. Agrando la fuerza en el abrazo.

—Todo el mundo tienes debilidades, incluso el hombre más fuerte —murmura. Pasando sus dedos por mis cabellos, pero eso no quita nada.

El solo sigue allí, en mi cabeza empezado un caos en ella y yo no podía hacer nada para evitarlo.

—No estoy bien, Superman.

Dejo salir todo. Cada una de las lágrimas cae en el hombro de su traje.

—¿Qué tienes?

—Todo salió mal.

༺༻

Acepte la taza de chocolate caliente.

Mis ojos ardían, estaban hinchados de tantas lágrimas caídas. Tuve que controlarme. Aunque no podía cada segundo salían nuevas lágrimas cuando ya había limpiado las anteriores. Con esfuerzo, tuve que recordar ese día y contárselo. Cada detalle.

Pará mí vergüenza, tuvo que cargarme y llevarme. Aún lugar más apropiado de su fortaleza para lograr calmarme y hablar.

Veo como se sienta a mi lado. Nos encontrábamos en unos de los tantos cristales de los cuales están formado su fortaleza. Le doy un sorbo a la taza. Suspiró dejando que el calor del chocolate invada mi garganta.

—Entonces ese gusano ayudó a Sivana a escapar —afirmó.

—Su nombre es Míster Mind y si, no desperdició la oportunidad de que Batman y Nightwing estuvieran ahí —masculle el nombre de los dos. Él me mandó una mirada a lo que yo me "disculpo".

—La que más escucho es la de Míster Mind diciéndome que pronto destruiría el mundo y todo gracias a mí.

—Hay algo que no me estás diciendo. ¿Qué ocurrió para que no lo atraparas?

Bueno le conté todo menos lo de control mental.

—Míster Mind tiene poderes no sabemos cuáles, sólo sabemos que tiene control mental entre ellos.

—Utilizó su poder en ti —asiento —. ¿Ya no está afectado tu mente?

"El hombre de otro planeta no podrá evitar lo que realmente deben ser los campeones."

Me sobo la frente. Echo la cabeza hacia atrás. Cada minuto, cada segundo, cada hora, el dolor es peor.

—No. Sigue ahí. Aunque intente sacarlo no puedo. Cada vez es más frecuente su voz en mi cabeza, cuando duermo es peor.

Tomó de golpe todo el chocolate caliente y dejó la taza a mi lado. El palpitar de mi corazón se descontrola, combinado con el dolor de cabeza no me es favorable.

—Déjame ayudarte.

—¿Cómo? Superman, yo no logré golpear a Sivana como crees vencer a Míster Mind.

—No estás sola en esto. Tienes a tus hermanos, me tienes a mí y tienes a Robin.

Sonrió sincera. Algo que no había hecho desde que sucedió el desastre en Industria Sivana.

Golpeó con mi hombro el suyo moviéndolo un poco.

—Tengo la mente de un gusano en mi cabeza y lo único que te interesa es que me enamore de Robin.

—Son tal para cual —guiño un ojo —. Ambos son un orgulloso, con un ego bastante alto y se enojan por todo.

—No lo niego, pero no tendré una cita con él.

—Me gustaría ver eso algún día —murmura riéndose entre dientes —. Y porque cada vez que lo menciono tu corazón se te acelera.

Otra vez ese calor en mi cara y no puedo evitar golpearlo en el brazo.

—Te odio, Superman —exclamó riendo. Me levanto para verlo y lo golpeó nuevamente solo que esta vez en la cabeza con un poquito de fuerza de más.

—Yo también te quiero.

En ese momento, caigo quedando en posición fetal. Escondo mi rostro entre mis piernas. Un dolor se extiende desde la punta de mis pies hasta mi cabeza. Cada vez era peor.

Ese dolor.

No otra vez.

"Pronto tú serás la responsable de la muerte de todos tus hermanos."

Siento como pierdo la conciencia. Cada vez, siento más débil cada una de mis articulaciones. El dolor aumenta. Mis ojos, percibo como la electricidad corre por mis venas.

—¡Bella! —se levanta
Se agacha para quedar a mi lado—¿Qué te sucede? ¿Es el otra vez?

Ni respondo y es que no puedo responder. Solo puedo gritar. Gritar de dolor.

—Llama a... Freddy.

Oscuridad eso era lo único que podría ver por un largo tiempo.

¡Lady Shazam! [Damian Wayne] ✔️Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz