¡Lady Shazam! [Damian Wayne] ✔️

1. La Llamada

[EDITADO]

"No necesito un superpoder para golpearte la cara."

Bella Batson
Filadelfia, Pensilvania, EE. UU.

—Bella Batson —elevo el rostro aun con cansancio viendo como la vieja gruñona me miraba con enojo y desprecio.

El sentimiento es mutuo, anciana.

—¿Tiene algún problema con mi clase que hace que duerma en ella? —no sabe cuantas veces lo he hecho y en su cara.

No quería gritarle en su cara que su clase era la más aburrida en la que he estado en toda mi vida, sin embargo, no me era recomendable ganarme un castigo, no quería que me regañaran al llegar a casa y necesitaba recuperar mis horas de sueño. La misión anterior había costado un poco por lo que tardamos llegue justo a tiempo para dormir tres horas, aun así, no fueron suficiente. Eso no podría evitar que le responda, sé que debería esforzarme en esto, se que si algo de esta clase puedo descansar y dormir tranquila sin interrupciones.

—De hecho si, profesora... —de mis labios irían saliendo una palabra ofensiva hacia su clase, solo salió una queja de dolor, viro a ver a mi compañero que era el fan número uno de Superman, según él, Freddy que me miro diciendo que me callara.

—¿Tiene algo que decirme, señorita Batson?

No respondo, no quiero ganar otra patada del único pie en buen estado de Freddy, su otro pie —el afectado—, que no se como pateaba mas fuerte que el de buen estado. Para mi alivio, la campana suena indicando el final de esa horrible clase.

—Tiene suerte, señorita Batson —recalco la profesora—. ¡No olviden traer su tarea el lunes! —exclama a mis compañeros, ninguno la escucho al salir corriendo todos; librándose de la tortuosa clase e ir a nuestra ultima clase. Estaba entre los que huyeron con emoción.

Al salir del salón voy donde los casilleros a buscar los libros de la materia cuando un brazo me agarra y me hace girar, era Freddy y su cara que significaba que venía un regaño.

—No puedes gritarle a un profesor, Bella. ¿Qué tal si te hubiera castigado? Tal vez habría una emergencia y no tengan a su Lady para ayudarlos —susurros.

—No puedo evitar decir la verdad, nos criaron para decir la verdad —me excuso tirando los libros en el casillero.

—Que delicadeza —cerramos en sincronía nuestros casilleros, le muestro la lengua al verle blanquear los ojos.

—Si digno de mi ahora vamos, quiero descansar.

—Un héroe no tiene descanso, Bella.

—Por favor, deja de copiar a Superman da miedo —me estremezco ante la imaginación de ellos dos juntos, diciéndome esas palabras en un bucle que no puedo apagar, una de mis peores pesadillas—. Suficiente con un Superman en mi vida —moví los brazos haciéndole reír.

Caminamos hasta el salón el cual se estaba llenando a cada minuto.

—Tienes suerte, Bella, el profesor no vino así que creo que podrás dormir —cierra la puerta detrás de nosotros.

Lo deje hablando solo, me acerco rápido a la ultima mesa libre al fondo del salón y agradezco que el profesor Collins siempre se este enfermando a cada rato es una de las horas que puedo recuperar mis horas de sueños perdidos y sin interrupción.

—Deberías de estar haciendo la tarea en lugar de desperdiciar tu tiempo en dormir en clases —se quejo sacando el libro de una materia que me interesaba poco en saber.