Extractos de Walter Riso

Parte III

41.     Quien es muy exigente en el amor, se pasa la vida aguardando a un personaje que no llega jamás y que ni siquiera sabe que existe.

42.     Creencia errónea: “existe el amor perfecto y podemos acceder a él mediante la persona correcta”, por desgracia, las almas gemelas son un invento de los astrólogos.

43.     Debemos manejar cierta flexibilidad y darnos una oportunidad para la convivencia. La insatisfacción es la primera hermana de la infidelidad.

44.     Muchas parejas bien establecidas arrancaron siendo los mejores amigos, casi “hermanitos”

45.     Los que están pendiente de las supermodelos y las que suspiran por los adonis están fuera de foco, es mejor bajar la puntería. Como yo veo las cosas (W.R), los “normales “ofrecen más garantía.

46.     La gente “bien casada”, los felices y contentos, los que no se cambiarían por nadie, están emparejados con gente común y corriente.

47.     Cuando amanecemos “entrepiernados”, con tortícolis mañanera y ternura acumulada, la mujer o el varón que se tiene al lado resulta ser la mejor opción en cien kilómetros a la redonda.

48.     No se puede amar una lista de ventajas y desventajas, sino la esencia.

49.     Amamos el olor, los gestos, los ojos, la expresión, la capacidad de entrega, la honestidad, la tranquilidad, los brazos, los abrazos, las sonrisas, los hoyuelos, las canas, algunas arrugas bien puestas, la franqueza, las caderas, el caminar, la torpeza y cualquier otra cosa que se le antoje al corazón.

50.  El que se dedica a la venganza mantiene frescas sus heridas. Francis Bacon

51.  Cuando una mujer decide vengarse de la pareja, el amor casi siempre está vigente.

52.  La mayoría de las mujeres no tomarían represalias por la infidelidad de un hombre que no aman

53.  Pero un varón típico, criado en la cultura de la honra y la virilidad, no dudaría castigar la traición de su pareja así no hubiera la menor pizca de afecto.

54.  Cuando intentamos protegernos de la traición y el maltrato psicológico con las mismas armas de quienes nos han dañado, caemos en la trampa de identificarnos con el transgresor.

55.  Cuando atacamos la deslealtad con deslealtad, la mentira con mentira, la deshonestidad con deshonestidad, perdemos autoridad moral.

56.  La infidelidad no admite contabilidades ni sistemas de competencia, sino exclusión y determinación.

57.  O perdono, o me voy.

58.  Un marido ventajoso y una mujer resignada es la peor combinación.

59.  Nadie puede negar que los hombres tienen una marcada tendencia a desear, perseguir  y seducir mujeres, pero esto no justifica que actúen como simios, dejando a su paso un reguero de hijos y personas psicológicamente afectadas.

60. La infidelidad crónica es una enfermedad. Lo cual no significa que los humanos nos resignemos a ella